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Batido de zanahoria para mejorar la salud ocular, así se debe preparar
La zanahoria se caracteriza por ser rica en vitamina C, minerales esenciales y beta-carotenos.
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Para mantener una buena visión, es indispensable contar con los nutrientes esenciales, los cuales intervienen en el buen funcionamiento de los ojos.
Por tal motivo, es importante agregar a la dieta una serie de alimentos para proteger la salud ocular. Su consumo puede llegar a contrarrestar los efectos negativos de los rayos ultravioleta, la luz de las pantallas que se asocian con la pérdida de visión.
Cabe recordar que los expertos en el cuidado de los ojos recomiendan que se deben usar lentes con unos filtros respectivos cuando las personas pasan expuestos al brillo y reflejo que causan las diferentes pantallas, con lo que se podría prevenir alguna enfermedad visual.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el abuso del uso de las pantallas causará a futuro, para el 2050, que la mitad de la población mundial sufra de miopía.
En ese sentido, el portal Mejor con Salud recomienda una infusión de zanahoria, la cual es una gran aliada para la salud ocular. Sin embargo, antes de ingerirla, lo mejor será consultar con un optómetra.
La zanahoria se caracteriza por ser rica en vitamina C, minerales esenciales y beta-carotenos. Además, disminuyen la sensación de fatiga que son causados por los esfuerzos del trabajo o los lugares oscuros.
¿Cómo preparar la infusión de zanahoria?
Ingredientes:
- Tres zanahorias.
- Medio vaso con agua.
- Un cuarto de cucharada de soja en polvo.
Preparación:
- Lavar las zanahorias y cortar en pequeños trozos.
- Colocarlas en una licuadora y procesarlas con medio vaso de agua.
- Agregar la soja en polvo y mezclarla adecuadamente.
Consumo:
- Beber cuando se sienta un cansancio ocular o en la mañana.
- Ingerir tres veces por semana.
Otros alimentos para evitar una visión borrosa
Brócoli
Es una verdura cuyas propiedades permiten que los ojos se mantengan protegidos del sol. Esto se debe a que contiene vitamina C, que contribuye a la mejora de los vasos sanguíneos en general, incluyendo los que están en los ojos. También es rico en vitamina A, que favorece los pigmentos de luteína y zeaxantina, elementos que ayudan a filtrar los rayos solares para que no choquen directamente con la membrana interior, precisa la clínica oftalmológica Ocumed.
Futas y vegetales con vitamina C
Esta vitamina ayuda a reparar y renovar nuevas células tisulares, afirma la Academia Americana de Oftalmología. Este nutriente se puede encontrar en frutas cítricas como naranjas, mandarinas, toronjas y limones. Muchos otros alimentos ofrecen vitamina C, incluyendo los duraznos, los pimentones rojos, los tomates y las fresas.
Alimentos ricos en vitamina E
Este antioxidante ayuda a mantener sanas las células. La vitamina E puede encontrarse en el aguacate, las almendras y las semillas de girasol, entre otros productos.
Pescado con ácidos grasos omega-3
Dietas ricas en ácidos grasos omega-3 provenientes de peces de agua fría ayudarían a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades oculares. Aquí se incluye el salmón, atún, sardinas y la trucha.
Pimentón rojo
Este vegetal es rico en vitaminas A y E que optimizan la visión nocturna y le brindan a la persona antioxidantes que detienen la degeneración macular. Brinda un aporte importante de vitamina C que previene algunas de las enfermedades oculares más comunes.
Té verde
Esta bebida es fuente de componentes denominados catequinas, antioxidantes que tras ingerirse y absorberse por el tracto digestivo, llegan hasta los tejidos que conforman los ojos. De esta forma ayudan a proteger la retina y reducen la posibilidad de desarrollar cataratas en el futuro.
Granos enteros
El zinc ayuda a mantener la retina sana y protege los ojos de los nocivos efectos de la luz y los granos enteros son una importante fuente de este mineral, asegura la Academia Americana de Oftalmología. Los fríjoles, arvejas y habas no deberían faltar en la dieta. Otros alimentos con alto contenido de zinc incluyen las ostras, la carne roja magra, el pollo y los cereales fortificados.