Hay una decena de ciudades del norte de Italia en cuarentena por el coronavirus. | Foto: AFP

SALUD

Italia se aisla por el coronavirus y Corea declara máxima alerta

La expansión del virus fuera de China preocupa a la OMS. En el norte italiano hay varias ciudades en cuarentena y se ha suspendido el fútbol y el carnaval veneciano. En Corea del Sur se duplican los contagiados.

22 de febrero de 2020

El norte de Italia viven una situación de grave emergencia por el coronavirus, que ya ha cobrado la vida de tres personas. Mientras los casos de diagnóstico positivo de covid-19 siguen creciendo y superan los 150, las autoridades en diferentes provincias han tenido que optar por medidas estrictas ante la alarma general. 

La tercera persona contagiada por el coronavirus, y enferma de cáncer, murió este domingo en la localidad de Crema, al norte de Italia, indicó Giullio Gallera, responsable de Salud de Lombardía. "Se trata de una señora anciana, que estaba internada en el departamento de oncología en estado grave y que se había contagiado con el coronavirus", explicó Gallera en conferencia de prensa. 

Los tres muertos eran personas muy enfermas y ancianas. Las dos primeras -primeras europeas- fueron albañil jubilado de 78 años y una mujer de 77. Ambos estaban hospitalizados desde hacía varios días por otros problemas de salud, pero dieron positivo a las pruebas del nuevo coronavirus.

Las autoridades de Lombardía, entre las regiones más industrializadas del país y que incluye la ciudad de Milán, ordenaron a partir del lunes el cierre de escuelas, museos, teatros, cines y lugares de reunión por temor al coronavirus. El prestigioso teatro La Scala de Milán anunció este domingo la cancelación de sus representaciones como medida de precaución.

El alcalde de Milán, Giuseppe Sala, preparó una serie de medidas muy estrictas, por un plazo de 7 a 15 días, para preparar la ciudad a la llegada del brote a esa próspera región, entre las más ricas de Italia.

De hecho hay cuarentena en al menos 11 localidades, la mayoría en Lombardía. "No se permitirá la entrada ni la salida a menos de que presente una exención especial", anunció el primer ministro Giuseppe Conte. Se trata de la medida más extraordinaria tomada en Europa para contener el mayor brote registrado en el viejo continente.

En cuatro ciudades grandes hay contagios detectados como Turín, Milán, Venecia y Bolonia, por lo cual algunas han dispuesto el cierre de escuelas y universidades.

Las fuerzas armadas están autorizadas a hacer cumplir las nuevas medidas si es necesario. El gobierno ha previsto sanciones de hasta tres meses de prisión en caso de violación de estas limitaciones. 

El fútbol profesional italiano es otra víctima de la epidemia. Sus directivos decidieron postergar tres partidos previstos para el domingo por el campeonato de primera división, a raíz del descubrimiento de los focos de contagio. Por esta decisión, los juego entre Inter y Sampdoria, Atalanta contra Bergamo, y Verona ante Cagliari serán disputados en una fecha posterior.

Entretanto, las autoridades se vieron en la obligación de cancelar los dos últimos días del Carnaval de Venecia por varios casos registrados en la ciudad. Esta es una de las mayores manifestaciones turísticas que organiza la ciudad de los canales cada año.

En Milán, donde continúan los desfiles de la Semana de la Moda, el diseñador Giorgio Armani y la modista Laura Biagiotti, decidieron trasmitir por video los desfiles de sus nuevas colecciones. Otras firmas como Boss y Dolce e Gabbana mantuvieron sus desfiles abiertos al público. 

El foco principal

El posible punto cero del virus en Europa se encuentra alrededor de Codogno, una localidad de 15.000 habitantes, a 60 kilómetros de Milán.

Una docena de equipos de policías fueron desplegados al poblado Codogno y sus alrededores para fijar "el perímetro", inicialmente limitado pero se irá ampliando gradualmente, explicó una joven policía a la AFP. 

El que se cree "paciente 1" de Lombardía es un hombre de 38 años, Mattia, investigador de la multinacional estadounidense Unilever, con sede en Codogno y Casalpusterlengo, donde 120 de los 160 empleados han sido sometidos a pruebas.

Hasta ahora se desconoce cómo se contagió ya que el amigo, que se creía que era el "paciente cero" en Italia porque en enero estuvo en China, no dio positivo. "Según los análisis no desarrolló anticuerpos", precisó el viceministro de Salud, Pierpaolo Sileri. 

Muy sociable y atlético, Mattia participó en varios maratones a principios de febrero, se reunió para cenar con varios amigos y dedicó algunas jornadas a actividades de solidaridad. 

Involuntariamente, contaminó a su esposa embarazada de 8 meses, a un amigo con el que jugaba fútbol y a tres clientes habituales de un bar local, así como a los médicos que lo atendieron y pacientes del hospital del Codogno donde estuvo internado entre miércoles y sábado por un inicio de pulmonía.

¿Camino a la pandemia?

La epidemia del coronavirus cada día amenaza con volverse pandemia. En los últimos días experimentó una oleada de nuevos casos preocupantes fuera de China, en particular en Italia y Corea del Sur, donde se juzga la situación "grave", y en Irán, donde ya causó cinco muertos, el mayor número de decesos en un país fuera de la región asiática.

En Irán se contabilizaron 10 nuevos casos de contagio, lo que situó el número de afectados en ese país en 28. El virus progresa y pone en riesgo países como Líbano, donde ya se registró un caso. Israel, también afectado, decidió prohibir la llegada de vuelos provenientes de Corea del Sur y Japón.

"Hemos visto un aumento muy rápido (de los casos) en pocos días", constató Sylvie Briand, directora del departamento de Preparación mundial para los riesgos infecciosos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En todo el planeta el número de afectados supera los 78.000.

Fuera de China continental (sin incluir Hong Kong y Macao), se han confirmado 17 muertos y más de 1.300 casos de contagio, en especial en Corea del Sur y en el crucero Diamond Princess, en Japón.

La epidemia entró en una "fase grave y el Gobierno hace todo lo posible para prevenir la propagación", declaró el sábado el primer ministro surcoreano, Chung Sye-kyun, en un discurso.

Las autoridades de ese país anunciaron una segunda muerte el sábado y el número de afectados aumentó por segundo día consecutivo, con 229 nuevos infectados. El país ya tiene un total de 433 casos.

Ante el rápido aumento de contagios, el presidente surcoreano Moon Jae-in decidió establecer "el más alto" nivel de alerta. La epidemia de covid-19 está "en un momento decisivo. Los próximos días serán cruciales", dijo.

Entre los nuevos pacientes diagnosticados, 95 estaban hospitalizados en Cheongdo (sur).

A la espera de África

La preocupación por lo que suceda fuera de China es cada día mayor. La Organización Mundial de la Salud, OMS,  teme "la posible propagación del covid-19 en los países cuyos sistemas de salud son más precarios", advirtió su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

Es el caso de muchos países africanos cuyas infraestructuras sanitarias y el personal médico están mal preparados para afrontar la epidemia. Por ahora, en el continente, solo Egipto ha confirmado una persona infectada.

Un estudio publicado el viernes por el centro de enfermedades infecciosas del Imperial College de Londres estima que "alrededor de dos tercios de los casos de Covid-19 salidos de China quedaron sin detectar a nivel mundial".

En algunas ocasiones no se extremaron las precauciones. Japón confirmó el domingo que el virus se había diagnosticado en una pasajera del "Diamond Princess", que regresó a su casa en tren después de haber sido considerada como un caso negativo. Más de una veintena de pasajeros extranjeros se encuentran en el mismo caso.

La epidemia puede poner en riesgo la frágil recuperación de la economía mundial, afirmó este domingo Kristalina Georgieva, jefa del Fondo Monetario Internacional (FMI) ante los ministros del Finanzas y gobernadores centrales del G20 que se reúnen en la capital saudita. "El virus ha afectado la actividad económica en China y puede poner en riesgo la recuperación" mundial, advirtió.

Poco margen de maniobra 

En Japón, un centenar de viajeros que estuvieron en contacto estrecho con personas infectadas en el crucero Diamond Princess empezaron a desembarcar el sábado, indicaron medios locales.

El Gobierno nipón reconoció que 23 pasajeros que ya habían abandonado el barco no pasaron todos los controles necesarios.

Eso explicaría por qué dos pasajeros australianos y una israelí fueron declarados portadores del virus al regresar a sus países, a pesar de que inicialmente habían dado negativo. "Lamentamos profundamente el error operacional de nuestra parte", declaró el ministro japonés de Sanidad, Katsunobu Kato.

Los más de 1.000 miembros de la tripulación del barco todavía a bordo comenzarán ahora una cuarentena de 14 días. El Diamond Princess es el mayor foco de contagio fuera de China. De los 3.711 pasajeros que se encontraban inicialmente a bordo, más de 630 contrajeron el coronavirus.

Disminución en China

En China continental, el país más afectado por la neumonía viral y donde ya se han registrado más de 2.440 muertes, pareciera que la epidemia pierde algo de fuerza. Las autoridades sanitarias anunciaron 96 fallecimientos nuevos este sábado -domingo allá-, y en las dos jornadas anteriores 109 y 118 muertes.

La cifra diaria de casos de contagio sigue también bajando, con 400 nuevos infectados el sábado, frente a los cerca de 900 del viernes. El número total de contagiados en China continental ronda los 76.000.

En una carta de agradecimiento a la fundación Bill y Melinda Gates por su apoyo financiero contra la epidemia, el presidente chino Xi Jinping señaló que su país está en "un momento crítico", informó el sábado la agencia Xinhua.Este coronavirus es considerado por China como la "emergencia sanitaria más grave" de China desde 1949, cuando se inició régimen comunista, declaró este domingo el presidente Xi Jinping, quien reconoció "deficiencias" en la respuesta a la epidemia.

Sin embargo, las autoridades chinas han minimizado hasta ahora el impacto a largo plazo de la epidemia sobre su economía, paralizada por los lugares en cuarentena, las carreteras bloqueadas y la falta de mano de obra.