Verrugas en el cuello: ¿cómo eliminarlas naturalmente con aloe vera y bicarbonato?

Las verrugas comunes son causadas por un virus y se transmiten por el tacto. Son pequeños bultos granulares en la piel que aparecen con mayor frecuencia en los dedos o en las manos. En la mayoría de los casos, son indoloras e inofensivas.

La textura de estos bultos es áspera al tacto y, en ocasiones, suelen presentar un patrón de pequeños puntos negros. Tras la exposición al contacto, una verruga puede tardar de dos a seis meses en aparecer en la piel, según reseña Mayo Clinic.

Para muchas personas, las verrugas resultan antiestéticas, ya que una pequeña área de la epidermis se engrosa y torna rugosa. Además, pueden ser protuberancias pequeñas, carnosas y granulosas de color piel, blanco, rosa o tostado.

Por lo anterior, hay quienes deciden removerlos por cuestión de estética. De hecho, el portal especializado Mejor con salud listó algunos remedios caseros y naturales que pueden ayudar a aminorar las verrugas en lugares como el cuello.

Bicarbonato de sodio

Este ingrediente posee propiedades antisépticas que ayudan a combatir las bacterias que se puedan encontrar en la piel.

¿Cómo usarlo?

1. En un recipiente limpio mezclar un poco de vinagre blanco y un poco de bicarbonato.

2. Revolver hasta que todo quede bien integrado y se forme una especie de pasta.

3. Aplicar directamente en la zona afectada con ayuda de una brocha o con guantes.

4. Dejar actuar unos minutos y retirar con abundante agua.

5. No utilizar todos los días, pues se pueden generar irritaciones en la piel.

Aloe vera

El aloe vera es una planta muy famosa a nivel mundial por sus propiedades terapéuticas, ha sido empleada durante siglos como método de tratamiento en la piel. Las verrugas también hacen parte de ese gran conjunto de dificultades que pueden ser tratadas con este útil ingrediente natural.

¿Cómo emplearla?

1. Si se posee la hoja de sábila, se debe lavar y abrir por la mitad.

2. Extraer el gel que se encuentra en el interior con ayuda de una cuchara.

3. Colocar el gel directamente sobre el área afectada.

4. Repetir el proceso varias veces al día.

Cabe resaltar que son diversas las clases de verrugas, según información del portal Muysaludable.sanitas.es. Algunas de las más conocidas son:

• Genitales: se les puede conocer también como condilomas. En ocasiones son blandas y se pueden ver con la forma de una coliflor cuando vienen en grupo. Estas pueden nacer en cualquier parte de los genitales, tanto de los hombres, como de las mujeres. Además, son altamente contagiosas.
• Subungueales y periungueales: así son llamadas aquellas que pueden aparecer debajo de las uñas o a sus alrededores.
• Vulgares: estás suelen ser las más frecuentes. Su apariencia es redonda y pueden venir en grupos o solas. Al tocarlas se pueden sentir un poco rugosas y aparecen, casi siempre, en el dorso de las manos, las plantas de los pies o el cuero cabelludo.

• Filiformes: en cuanto a la forma de estas verrugas, son alargadas y blandas. Pueden aparecer en el cuello y los párpados. Normalmente, se unen a la piel por una pequeña área, por lo que suelen desprenderse solas o que se enreden con la ropa o las joyas.
• Planas: los niños y adolescentes son las personas que más sufren este tipo de verrugas. A diferencia de las anteriores, no sobresalen mucho y su color es más claro que el de las demás. Aunque son pequeñas también pueden aparecer en grupos.