Uno de los diarios más reconocidos a nivel global, The Objective, pudo confirmar con fuentes cercanas al caso que el exmilitar de carrera y exmiembro del Ejército venezolano, Hugo ‘el Pollo’ Carvajal’, habría hecho una propuesta al Gobierno norteamericano, en medio de la escalada de tensiones con Venezuela.
Según pudo confirmar el medio, a través de personas familiarizadas y próximas a Carvajal, el exmilitar de inteligencia le propuso al gobierno Trump un nombre concreto para reemplazar al dictador Nicolás Maduro en un caso hipotético en que este salga del poder.
La recomendación, de acuerdo con el medio, no es algo que pasa desapercibido, ya que el exgeneral fue una ficha clave en el gobierno de Hugo Chávez y conoce en profundidad el aparato militar de Venezuela, siendo hoy uno de los que rompió sus relaciones con el dictador, quien se encuentra en tensión tras el despliegue militar en el Caribe.
Carvajal presentó a Rafael Ramírez, expresidente de PDVSA y exministro del chavismo, como la ficha que debería liderar un eventual gobierno de transición en Venezuela, después de los rumores sobre una posible incursión militar de Estados Unidos dentro del país suramericano.
El Pollo, como es conocido dentro y fuera de Venezuela, se ha convertido en una ficha clave dentro de la justicia norteamericana después de que sus declaraciones hicieron que su misma sentencia fuera aplazada, con el objetivo de que su cooperación fuera mayor.
The Objective reveló que, en el marco de esos diálogos entre el exmilitar y la justicia norteamericana, habría propuesto la posibilidad de que el expresidente de la filial petrolera, Rafael Ramírez, quien también fue un hombre de confianza de Chávez, fuera considerado para hacer una transición política si Maduro salía del poder.
El medio pudo confirmar que Carvajal considera que Ramírez “conserva legitimidad dentro del chavismo tradicional” y, eventualmente, podría servir como puente entre la oposición y lo que quede del aparato estatal venezolano.
Rafael Ramírez fue uno de los hombres más poderosos del gobierno de Hugo Chávez, especialmente en el sector petrolero, eje fundamental de la economía venezolana. Fue el máximo responsable de la industria petrolera venezolana durante diez años.
Por más de una década controló simultáneamente el ministerio y PDVSA, acumulando un poder enorme. Entre 2014 y 2017, fue enviado allí tras tensiones internas con el gobierno de Maduro. Luego fue destituido y rompió definitivamente con el madurismo.
Con Maduro, la relación se deterioró. En 2017, este lo destituyó y poco después el Ministerio Público lo acusó de corrupción. Desde entonces, ha sido crítico del gobierno. Actualmente, vive en Italia, donde ha pedido protección internacional.