En medio de la celebración que se ha desencadenado este martes en la ciudad de Buenos Aires para festejar el título mundial obtenido el pasado fin de semana por la Selección de Argentina en el Mundial de Qatar, y luego de que el presidente Alberto Fernández decretara, este martes como día feriado nacional, también se escucharon voces críticas a su decisión.

Mientras que en Buenos Aires se realizaba quizá la celebración y recibimiento más concurrido en la historia del fútbol a sus jugadores campeones, a través de las redes sociales, se conoció un pronunciamiento del expresidente argentino Mauricio Macri, en el que cuestionó la decisión de decretar el feriado nacional, señándola como “incoherente y antifederal”.

En el pronunciamiento expresado por Macri, a través de sus redes sociales, el político de ideología contraria a la del presidente actual, cuestionó que se afectara la productividad de todo el país por un evento que ni siquiera iba a torpedear la totalidad del territorio de Buenos Aires.

“Coherencia por favor”, sentenció Macri en un mensaje en el que empleó un mapa de Argentina para evidenciar el tamaño del país, frente al espacio real que iba a resultar afectado por las celebraciones, entendiendo que una de las razones por las que su predecesor decretó el feriado fue por el furor de la celebración, y las consecuencias y que ello iba a representar en términos de movilidad y orden público.

Esta observación de Macri despertó una ola de opiniones encontradas, pues, mientras que algunos de sus seguidores le hallaron la razón a la observación, reconociendo que en medio de la situación económica actual que atraviesa Argentina y gran parte del mundo es necesario trabajar, otros la cuestionaron, advirtiendo que es justo que el país pueda vivir una alegría.

La reacción de Macri ha despertado controversia en tanto el expresidente, tal y cómo lo captaron las cámaras de televisión, estuvo en Qatar durante la celebración del Mundial, por lo que los internautas le cuestionan que se oponga a que quienes no pudieron viajar, puedan hacer propia la celebración y parte de la emoción que se vivió en el estadio.

Durante el transcurso del Mundial, Macri fue catalogado como parte de la población argentina como una ‘mufa’ o factor de mala suerte para la Selección, luego de que se conociera que el pasado 22 de noviembre, fecha del debut mundialista de Argentina, cuando fue derrotada por Arabia Saudita, el expresidente se encontraba en las graderías del estadio.

Incluso, a través de las redes sociales y la plataforma charge.org, un grupo de hinchas argentinos adelantó una petición pública para que Macri dejara de asistir a los estadios, considerándolo mal augurio para los dirigidos por Scaloni.

No obstante, Macri siguió alentando a la Selección desde la grada, y celebrando los triunfos a través de las redes sociales; pese a que ahora ha tomado una posición que algunos califican de ‘Grinch’ al negarse al escenario de celebración, y volver a referirse a los problemas sociales y económicos que vive Argentina.

Pese al tinte político que tomó esta situación entre Macri y Fernández, la AFA tomó una posición neutral, y simplemente se dedicó a la celebración con la hinchada, descartando así un eventual encuentro entre políticos y futbolistas.