Diez colombianos, entre ellos el médico Juan Andrés Echeverri Cifuentes, recibieron un galardón por ser destacados colombianos en España y dejar en alto en nombre del país.
Echeverri Cifuentes tiene 43 años y desde hace 19 se desempeña como médico general, tras graduarse de la Facultad de Medicina de la Universidad CES de Medellín. En el 2008 se radicó en España y allí comenzó sus estudios en Cirugía General y del Aparato Digestivo. Actualmente es miembro de la Unidad de Trasplante y Cirugía Hepatobiliar del Hospital Marqués de Valdecilla en Santander-Cantabria.
Desde el 2004, la pasión ha llevado a este médico paisa a realizar importantes trabajos tanto prácticos como investigativos y, precisamente, fueron estos los que hicieron que su labor fuese reconocida por la Embajada de Colombia en ese país europeo.
“En el Consulado de Bilbao habían abierto una convocatoria para colombianos que estuvieran haciendo algún tipo de labor especial. En ese marco, alguien me postuló a mí para esta convocatoria. Fue a través de este procedimiento que se hizo en Bilbao que yo accedí a este reconocimiento que hace la Embajada de Colombia en España, en Madrid”, contó el doctor.
Este profesional de la salud recibió el galardón, en su séptima edición, por sus contribuciones e investigación en el desarrollo de la primera máquina de perfusión ex vivo en Norteamérica, una tecnología para prolongar la vida del órgano mientras es trasplantado a un paciente.
Dicha investigación se centra específicamente en órganos como el hígado y del riñón; los estudios a través de la máquina arrojaron que la tecnología adecuada hacen que el órgano se pueda preservar mucho más tiempo e incluso permite que pueda hacer una valoración objetiva del órgano antes del trasplante.
“Cuando uno saca los órganos de un donante, el método tradicional de preservación de órganos es en el hielo. Los órganos se bajan a cuatro grados y luego van a la nevera con hielo y así se transportan del sitio donde está el donante, al sitio donde se hace el trasplante, pero dependiendo de cuál órgano vayamos a trasplantar tienen un límite de tiempo: el hígado puede aguantar hasta 10, 12 horas, el riñón un poco más, hasta 24 horas. Pero ya a partir de ese tiempo el órgano se empieza a dañar. Nosotros pusimos a prueba una nueva tecnología para prolongar el tiempo de conservación del órgano”, agregó el doctor Echeverri Cifuentes.
Durante el tiempo de investigación, el profesional inicialmente hizo parte del grupo de investigación básica y luego, en una segunda etapa, perteneció al equipo de la clínica en Cirugía Hepatobiliar y Trasplante Abdominal multiórganico.
“En los primeros dos años hacíamos experimentos de trasplante hepático y renal en un modelo porcino y utilizábamos la máquina de perfusión ex vivo normotérmica para trasplantar el órgano en el cerdo y ver cómo se comportaba antes de pasar a una fase clínica”, detalló.
En cuanto a la máquina desarrollada aseguró que: “Hay una tecnología más o menos novedosa que se ha desarrollado últimamente el mundo científico del trasplante. Hay unas máquinas que simulan el cuerpo humano y que perfunden los órganos con sangre caliente. Hay unas que perfunden con unas perfusiones frías, pero otras con sangre a unas temperaturas subnormotérmicas, y hay unas que perfunden a 37 grados. Eso permite que el órgano se pueda preservar mucho más tiempo o que incluso pueda hacer una valoración objetiva del órgano antes del trasplante”.