El departamento del Valle del Cauca, además de ser reconocido como cuna de cultura y arte, está tomando protagonismo como uno de los destinos imperdibles de Colombia para quienes buscan vivir experiencias extremas y emocionantes.

Tal como sucede con San Gil, en Santander, llamado popularmente como la capital de la aventura, en el Valle hay un municipio que también llama la atención de los viajeros, especialmente de los amantes de los deportes extremos, gracias a su oferta de aventura y naturaleza.

Este lugar es el municipio de Florida, el único pueblo del Valle que tiene dos iglesias en su plaza principal, considerado un destino ideal para vivir experiencias extremas, como volar con “Los guardianes del páramo” en el primer club de parapente indígena de Colombia: Villa Aventura Extrema.

Dicho club se encuentra ubicado en el kilómetro 8 vía a la vereda la Diana en el pueblo, ofreciendo a sus visitantes otras actividades interesantes para hacer como caminatas ecológicas o disfrutar una zona de camping.

Villa Aventura Extrema | Foto: Créditos: Florida Valle Del Cauca, Municipio PDET / API

Según datos registrados en la página de la Alcaldía Municipal, en Villa Aventura Extrema también se encuentra un excelente mirador y servicio de restaurante para complementar la experiencia, abriendo la posibilidad de degustar la exquisita gastronomía local con platos como, una deliciosa trucha o un sancocho de gallina, entre otras recetas típicas de la región.

Otros encantos de Florida que cautivan a los turistas

Este municipio se distingue por su riqueza pluriétnica y multicultural, ya que es un territorio donde conviven comunidades indígenas y afrodescendientes que aportan tradiciones, sabores y expresiones únicas.

Su geografía es igualmente diversa: con alturas que van desde los 1.088 metros sobre el nivel del mar en las zonas planas, hasta los 4.120 metros sobre el nivel del mar en los imponentes páramos, permitiendo disfrutar de paisajes únicos.

Las temperaturas también varían a lo largo del territorio, pasando de climas cálidos de 24 grados centígrados en las áreas más bajas, a frescos 4 grados centígrados en las alturas, lo que invita a vivir diferentes experiencias en un mismo destino.

El casco urbano, ubicado a 1.088 metros sobre el nivel de mar. y con una extensión de 28,22 kilómetros cuadrados, ofrece un punto de partida ideal para explorar esta tierra llena de contrastes naturales y riqueza cultural.

Al caminar por sus calles, los visitantes tienen la posibilidad de probar un delicioso “champus”, una bebida refrescante, tradicional y hecha a base de maíz, acompañado de una famosa torta que lleva preparando por más de 45 años una de las mujeres más nombradas de la zona que tiene su propio local llamado “Bizcochuelos Doña Leo”, destaca la Gobernación del Valle del Cauca en su página web.