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Charles Chaplin, el inmortal

Con la proyección de ‘Candilejas’, Cine Colombia cierra un ciclo de clásicos del gran símbolo de la época muda del cine. Estas son siete claves que explican su importancia para la historia del séptimo arte.

16 de julio de 2018

Lo mejor de Charles Chaplin es que sus películas no pasan de moda. A pesar del paso del tiempo y de ser tesoros del cine mudo (y de una época en la que lo audiovisual se entendía de otra forma), muchas de sus historias siguen vigentes y llenas de actualidad. Así como El gran dictador y su crítica al fascismo es clave para un mundo en el que crecen los gobiernos autoritarios y populistas, El inmigrante -que muestra cómo se estigmatiza a los extranjeros que buscan nuevas oportunidades- lo es en una época en la que muchos quieren cerrar las fronteras. Lo mismo se puede decir de El niño o de casi todas las historias del vagabundo, su gran personaje, y la pobreza, que no termina.

Pero a pesar de ser tan popular y de que casi todo el mundo ha oído su nombre, pocos han visto sus películas y solo algunos saben con exactitud por qué es tan importante para el mundo del cine. Esta semana, precisamente, termina un ciclo que  Cine Colombia preparo con varias de sus películas y que llevó a las pantallas grandes clásicos como El gran dictador, Una mujer de París, Un rey en Nueva York y Monsieur Verdoux.

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El cierre es con Candilejas, una película que muchos califican como una de las más “perfectas” y personales de su filmografía. No solo porque tiene un gran contenido autobiográfico, sino porque mezcla la comedia que lo caracteriza con mucha melancolía (incluso incluye un suicidio). La historia de un hombre mayor que se enamora de una joven, además, tiene unos detalles que la hacen especial: fue la última película que Chaplin produjo en Estados Unidos, pues luego le prohibieron la entrada a ese país por supuestos lazos con el comunismo, y su melodía (compuesta por el propio Chaplin) es reconocida en todo el mundo y le significó su único Óscar no honorífico.

Candilejas solo tendrá dos funciones: el martes 17 de julio (a las 8:30 p.m.) y el domingo 22 de julio (a las 12 del día) en 21 salas seleccionadas de 13 ciudades del país.

Para terminar el ciclo, SEMANA presenta 10 claves de la vida de Charles Chaplin:

1. Multifacético: Charles Spencer Chaplin no solo fue un gran actor. Más allá de su personaje icónico lo que lo hace especial e inolvidable era que tenía múltiples habilidades. Fue director, actor, escritor,  compositor y -más adelante- productor. Muchas de sus películas, y sobre todo las más importantes, fueron financiadas, escritas, actuadas y dirigidas por él. Incluso ganó un Óscar por una de sus composiciones. En ese sentido, su aporte al cine supera lo actoral.

2. Actor desde niño: Nació en Londres, Inglaterra, el 16 de abril de 1889. Sus padres eran bailarines del music-hall y muchas veces vivieron en medio de la pobreza. El pequeño Chaplin comenzó a actuar a los 9 años junto con ellos. Así comenzó una carrera que a sus 20, ya lo tenía recorriendo el mundo con compañías teatrales. Cuando llegó a Estados Unidos, consiguió un contrato para trabajar con Keystone Studios y en 1914 apareció en la película Ganándose el pan con su famoso personaje del vagabundo. A partir de ahí comenzó a aparecer en cortometrajes y largometrajes. Al terminar la Primera Guerra Mundial ya era uno de los personajes más reconocidos del mundo del cine.

3. Marcó una época: Chaplin se convirtió en el símbolo del cine sin sonido, tanto que hoy, cualquiera que piense en esa época de la cinematografía piensa en él y en su personaje icónico. A pesar de eso, también hizo cine sonoro: Tiempos modernos y El gran dictador, dos de sus películas más conocidas, tuvieron parlamento. Y no fueron las únicas.

4. Su personaje: El personaje más reconocido de Chaplin es Charlot, el vagabundo bigotudo con sombrero y bastón, un poco torpe pero buena persona, que se metía en múltiples aventuras. Ese mismo fue el protagonista de la mayoría de sus películas. A pesar de ser vagabundo, siempre va bien vestido y tiene buenos modales.

5. Mensajes para la sociedad: Su fuerza era la comedia, pero más allá de hacer reír sus historias dejaban mensajes profundos. El gran dictador, por ejemplo, que se estrenó en 1940 al tiempo que comenzaba la Segunda Guerra Mundial, es una crítica al fascismo, al antisemitismo y a Adolf Hitler, a pesar de que Estados Unidos aún no estaba en guerra contra Alemania.

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6. Perseguido: Lo persiguieron por sus lazos con el comunismo después de la Segunda Guerra Mundial, una época en la que muchos cineastas sufrieron persecuciones y ataques del Comité de Actividades Antiamericanas y por el senador Joseph McCarthy. Decían que su cine “destruía la moral americana” y que “menospreciaba y atacaba el país en el que se había enriquecido”. Finalmente fue vetado en 1952, cuando estaba en Londres para asistir al estreno de Candilejas. Se fue a vivir a Suiza.

7. El regreso y la muerte: En 1972, veinte años después de su exilio, volvió a Estados Unidos pues la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas le otorgó un premio Óscar honorífico por su aporte a la industria. La ovación de toda la audiencia cuando Chaplin entró a recibir la estatuilla es uno de los momentos más emocionantes de la historia de los premios. Sin embargo, siguió viviendo en Suiza hasta su muerte, el 25 de diciembre de 1977. En los últimos años sufrió de demencia senil y tuvo problemas de movilidad.