Equitación, el deporte en el que Colombia puede dar el gran salto en Tokio 2020

La equitación es la única disciplina olímpica en la que los deportistas dependen de otro ser viviente para cumplir los resultados. Jinete y caballo se combinan como uno solo para lograr superar los obstáculos de las pistas en las diferentes modalidades.

Esta disciplina requiere de un gran presupuesto, teniendo en cuenta el alto costo de los caballos, su manutención y movilización para los torneos. Los competidores que suelen destacarse son los europeos y los estadounidenses.

En los Juegos Ecuestres Mundiales 2018 llevados a cabo en Tryon (Estados Unidos), que son como el Mundial de Rusia para el fútbol, Colombia dio la sorpresa teniendo una brillante participación y dando la pelea a los mejores jinetes y caballos del mundo.

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El bogotano Carlos López se destacó en la modalidad de salto quedando en la quinta posición, de lejos el mejor resultado de un jinete colombiano en un evento de esta categoría. El jinetede 53 años dominó a su caballo Capón Admara 2 para estar en el top 5 de la prueba que fue ganada por la alemana Simone Blum.

Una participación que no tiene precedentes y que demuestra el progreso de López que fue 86 en los Juegos Mundiales Aachen 2006 y 18 en Caen 2014.

López comenzó su carrera montando los caballos de los socios del club Bacatá en los años 70s y 80s.

Su talento se hizo popular en las competiciones locales y cuando dio el salto a nivel internacional para los Juegos Panamericanos de Caracas de 1983, el entrenador del equipo se dio cuenta de su potencial y le ayudó para que se fuera a Francia en donde ha desarrollado gran parte de su carrera.

En Francia, López ha tenido una importante trayectoria en la que ha tenido la oportunidad de cabalgar los mejores caballos del mundo de salto. Además ha podido ayudar a su hermano René, quien estuvo en los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro ocupando la posición 55 en esta misma prueba.

Su actual patrocinador es Haras Des Grillons, que se encarga de financiarlo a él y a su caballo en esta exigente modalidad ecuestre que requiere una intensa preparación para poder brillar entre los más destacados del mundo.

De acuerdo a Nicolás Barragán, diseñador de Pistas de Equitación nivel 2 FEI, un equino de este nivel puede llegar a costar hasta un millón de euros: “Los caballos de alto nivel en Europa pueden costar entre 300.000 y 800.000 eurps y los campeones olímpicos pueden superar el millón de euros". 

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Ahora el objetivo de Carlos López es lograr un cupo en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. El colombiano buscará esta clasificación en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 en donde será favorito teniendo en cuenta que en los Juegos Mundiales, el único competidor del continente que lo superó fue el estadounidense McLain Ward.

Diego Vallejo, presidente de la Federación Ecuestre de Colombia (FEC), explica que en este momento, López incluso puede aspirar a conseguir medallas en las justas de Tokio: “Esperamos llegar con un equipo de salto muy fuerte y con la expectativa de que Carlos mantenga las condiciones actuales porque si es así tiene posibilidades de medalla”.

En cuanto al crecimiento de Carlos, el presidente de la FEC, considera que este avance se debe al apoyo que ha recibido de sus patrocinadores en Francia. “Carlos lleva muchos años preparándose. Solo que ahora tiene condiciones muy buenas para desarrollar la profesión porque siempre ha sido un jinete de talla mundial”.

A pesar de la gran labor de López, la Federación no logró el apoyo estatal para el Mundial en Tryon en la modalidad de salto y ha tenido que buscar respaldo de la empresa privada para asegurar la participación del grupo de salto en los eventos.

Otro logro importante en los Juegos Ecuestres de Tryon 2018 fue el quinto lugar de Juan Martín Clavijo en ‘Vaulting’. Esta modalidad consiste en hacer una rutina de gimnasia y danza arriba del caballo mientras da vueltas en un círculo de aproximadamente 15 metros de diámetro controlado por un conductor de cuerda.

Clavijo venía de ser doble campeón de ‘vaulting’ en la categoría juvenil (2015 y 2017) y en su primera incursión en mayores tuvo un excelente resultado terminando quinto en su primera prueba en la categoría donde están los corredores de élite.

El colombiano montó a Freeke. Tuvo una gran calificación en la prueba técnica en la que fue segundo solo por detrás del francés Lambert Leclezio.

Aunque el ‘Vaulting’ no hace parte del ciclo olímpico, se trata de una brillante participación de este joven en una modalidad que es muy admirada teniendo en cuenta la cercanía que hay que desarrollar en el caballo y la belleza de la combinación entre danza y gimnasia artística.

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Dos resultados que reflejan cómo se puede llegar a la élite mundial a pesar de la falta de recursos y solo a punta de dedicación y esfuerzo.