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La jugada estratégica que podría cambiar el futuro de la palma en Colombia

Líderes de Indonesia, Malasia y países de la región ven en Colombia un socio clave para integrar una estrategia global de producción de aceite de palma.

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29 de septiembre de 2025, 10:38 p. m.
Intervención del Consejo de Países Productores de Aceite de Palma (CPOPC) durante la conferencia en Cartagena, en la que se discutió la integración de Latinoamérica a la palmicultura mundial.
Intervención del Consejo de Países Productores de Aceite de Palma (CPOPC) durante la conferencia en Cartagena, en la que se discutió la integración de Latinoamérica a la palmicultura mundial. | Foto: Fedepalma

Cartagena fue escenario esta semana de un movimiento diplomático y empresarial que podría marcar un punto de inflexión en la agroindustria colombiana. El Consejo de Países Productores de Aceite de Palma (CPOPC, por sus siglas en inglés) -liderado por Indonesia y Malasia, que concentran entre el 84 % y el 85 % de la producción mundial- manifestó su interés en fortalecer lazos con Colombia y otros países latinoamericanos para impulsar una palmicultura de alcance global.

Actualmente, el CPOPC está integrado por Indonesia y Malasia como fundadores, junto a Honduras, Papúa Nueva Guinea y la República Democrática del Congo como miembros plenos. En calidad de observadores participan Colombia, Ghana y Nigeria. La reciente visita a Bogotá y Cartagena incluyó reuniones con la Cancillería, el Ministerio de Agricultura y encuentros con representantes empresariales, así como actividades paralelas en el marco de la 21ª Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite organizada por Fedepalma.

Durante los encuentros, Allan Maradiaga Espinal, directivo hondureño y consultor para programas de CPOPC en Latinoamérica, subrayó que la palma de aceite “con su inigualable eficiencia en el uso de la tierra, está destinada a ser pilar ineludible de la demanda global de aceites vegetales y biocombustibles”, aunque advirtió que el desafío pasa por garantizar que la expansión del cultivo no implique deforestación.

Tatag Budie Utama Razak, embajador de Indonesia en Colombia.
Tatag Budie Utama Razak, embajador de Indonesia en Colombia. | Foto: Fedepalma

El debate no es menor: solo en 2024, Indonesia produjo 48,5 millones de toneladas de aceite de palma, equivalente a más del 58 % de la oferta mundial. Malasia, por su parte, generó cerca de 19 millones de toneladas, un 26 % del mercado. Frente a esos volúmenes, América Latina aparece como un actor emergente que busca aprovechar sus condiciones climáticas y de suelo, pero también asegurar que el desarrollo del sector tenga un enfoque sostenible.

En Cartagena, representantes del CPOPC destacaron la “enorme contribución de la palma al crecimiento económico y a la creación de empleo, así como al abastecimiento de alimentos y materiales industriales”. Además, el organismo organizó espacios de networking y diálogo estratégico que reunieron a asociaciones latinoamericanas, actores globales como RSPO y Solidaridad Network, con el objetivo de construir una narrativa común para enfrentar los retos de sostenibilidad, regulación y mercado.

El mensaje central de la visita fue claro: “El futuro del aceite de palma debe construirse junto con los países productores de América Latina”, expresó el embajador de Indonesia en Colombia. Para Colombia, el reto será decidir hasta qué punto se integra a una estrategia global dominada por Asia, en un momento en el que el país busca equilibrar crecimiento agrícola, atracción de inversión y compromisos ambientales.