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IGLESIA CATÓLICA

Papa Francisco reaparece afónico después de tres días de ausencia

A pesar de que su resfriado se agravó el pasado miércoles por los fuertes vientos en la plaza de San Pedro durante la audiencia general, el Papa ha acudido hoy al rezo del Ángelus. Sin embargo, afirmó que no podrá hacer los ejercicios espirituales de la cuaresma con la Curia.

29 de febrero de 2020

El papa Francisco canceló su agenda oficial por tercer día consecutivo el sábado mientras lucha contra un aparente resfriado. El pontífice, de 83 años y que perdió parte de un pulmón a causa de una enfermedad respiratoria cuando era joven, nunca había cancelado tantas audiencias oficiales o compromisos en sus siete años de papado.

Francisco seguía trabajando en la Residencia Santa Marta, en el Vaticano, y mantuvo sus reuniones privadas, según la oficina de prensa de la Santa Sede. Su agenda del sábado incluía encuentros con el jefe de la oficina de obispos del Vaticano, con los nuncios de Líbano y Francia y con un arzobispo ucraniano.

Los actos cancelados eran dos audiencias oficiales, eventos formales que se celebran en el Palacio Apostólico, donde Francisco había ofrecido un discurso y saludado a un gran número de asistentes al final. Uno de ellos era un encuentro con una organización internacional de bioética y otro con miembros de la orden religiosa Legión de Cristo, salpicada por escándalos de abusos sexuales.

Se espera que el domingo Francisco deje el Vaticano acompañado por la plana mayor de la Santa Sede para participar en una semana de ejercicios espirituales cerca de Roma, un retiro que se repite cada año al inicio de la Cuaresma.

El papa apareció por última vez en público durante la misa del Miércoles de Ceniza, cuando fue visto tosiendo y sonándose la nariz. Al día siguiente canceló una misa en Roma con otros sacerdotes, y el viernes no acudió a una audiencia con los asistentes a una conferencia sobre inteligencia artificial.

El Vaticano enfatizó que Francisco celebra misa cada mañana y saluda a los asistentes, antes de continuar con su trabajo desde su casa.

El Vaticano no reveló la naturaleza de la enfermedad del pontífice y dijo únicamente que padece una “ligera indisposición”.

La enfermedad de Francisco coincide con un momento de alarma general en Italia por el brote de un coronavirus, que ha infectado a más de 800 personas, en su mayoría en el norte del país.

El papa reaparece afónico a rezar el Ángelus

A pesar de que su resfriado se agravó el pasado miércoles por las fuertes rachas de viento en la plaza de San Pedro durante la audiencia general, el Papa ha acudido hoy al rezo del Ángelus desde la ventana del palacio Apostólico a pesar del fuerte viento.

Con algo de tos y la voz afónica el Papa Francisco dirigió la plegaria mostrando su energía habitual y añadiendo comentarios al margen del texto escrito. Después de comentar el pasaje evangélico de las tentaciones de Jesús, el Papa ha manifestado su dolor por "las noticias que llegan de tantos refugiados, de tantos hombres, mujeres y niños forzados a huir de sus hogares a causa de la guerra; de tantos inmigrantes que piden refugio y ayuda. Recemos por ellos".

Al despedirse de los fieles, ha dedicado un saludo especial a los jóvenes de Formentera y ha pedido a todos que recen por él y los altos responsables de la Curia vaticana durante estos seis días de ejercicios espirituales en Ariccia, una localidad cercana a Castel Gandolfo, en las afueras de Roma.

Invitó a los fieles, además, a estar atentos porque “los mensajes llegan de muchos lugares invitando a la gente a ‘dejarse tentar’ para experimentar la intoxicación de la transgresión (...) La experiencia de Jesús nos enseña que la tentación es el intento de recorrer caminos alternativos a los de Dios, caminos que nos dan la sensación de autosuficiencia, de disfrute de la vida como un fin en sí mismo”.

“Todo esto es ilusorio: pronto nos damos cuenta de que cuanto más nos alejamos de Dios, más impotentes y desamparados nos sentimos ante los grandes problemas de la existencia”, concluyó.

El Papa explicó este domingo que el resfriado, que ha hecho que cancele toda su agenda pública desde hace cuatro días, también le impedirá seguir los ejercicios espirituales con la Curia en Ariccia, una localidad a unos 10 kilómetros de Roma a la que suele acudir en Cuaresma para concentrarse espiritualmente antes de Semana Santa.

*Con información de AFP.