Home

Mundo

Artículo

| Foto: AFP

MUNDO

Una vez más justicia suspende veto de Trump a seis países musulmanes

Cuando faltaban pocas horas para que el nuevo bloqueo migratorio entrara en vigor, un juez federal de Hawái congeló la medida.

15 de marzo de 2017

Un juez federal de Estados Unidos bloqueó hoy temporalmente el nuevo veto migratorio del presidente Donald Trump, horas antes de su entrada en vigor prevista para la medianoche de este jueves.

El nuevo decreto -firmado por el presidente lejos de las cámaras de televisión hace ocho días- cerraba las fronteras a los refugiados por 120 días y congelaba la entrega de visas a ciudadanos de Irán, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen por 90 días.

Le puede interesar: Trump firma una nueva versión de su decreto migratorio

La orden del magistrado, Derrick K. Watson, con sede en Honolulu (Hawái), deja por el momento sin efecto la medida con la que Trump pretendía suspender la entrada al país de inmigrantes de seis países de mayoría musulmana y de todos los refugiados.

La decisión de Watson supone un segundo revés legal para el Gobierno de Trump, que ya vio como la Justicia bloqueaba a principios de febrero su primer veto.

De acuerdo con la mecánica judicial estadounidense, un juez federal puede suspender parcial o completamente la aplicación de un decreto, en una decisión que tiene alcance nacional.


Tras una breve pero infructuosa batalla legal, Trump presentó el 6 de marzo una versión revisada del veto, en la que corrigió aspectos poco claros de la anterior. Confiaba que sería prácticamente imposible que una corte lo suspendiera.

Sin embargo, Watson optó por volverla a bloquear a instancias de una demanda interpuesta por el Fiscal General del estado de Hawái, el demócrata Doug Chin, quien alegó que el nuevo veto es, como el primero, inconstitucional.

Contexto: Trump defiende su dura política migratoria ante el Congreso

La de Watson era una de las tres cortes que estudiaban hoy el futuro de la orden presidencial, con otras dos audiencias pendientes en tribunales de Maryland y del estado de Washington, este último el mismo que bloqueó el primer veto.

De acuerdo con la mecánica judicial estadounidense, un juez federal puede suspender parcial o completamente la aplicación de un decreto, en una decisión que tiene alcance nacional.

El nuevo veto migratorio suspendía durante 120 días el programa de acogida a refugiados y durante 90 la entrada de ciudadanos procedentes de Irán, Somalia, Sudán, Siria, Yemen y Libia.

A diferencia de la primera orden, la medida dejaba fuera a los ciudadanos de Irak y modifica la provisión sobre los refugiados sirios, que tendrán prohibida su entrada al país durante 120 días y no de manera indefinida, como establecía el veto original.

Puede leer: Juez suspende el veto migratorio de Trump

La defensa de Trump

El presidente estadounidense Donald Trump condenó la "defectuosa" decisión judicial que bloqueó su polémico decreto anti-migratorio en Hawái y prometió defenderlo hasta la última instancia judicial, la Corte Suprema, si fuera necesario.

"Este fallo nos hace ver débiles, que por cierto, ya no lo somos", dijo el mandatario en un acto político en Nashville, Tennessee.

"Vamos a pelear este fallo terrible, vamos a llevar este caso tan lejos sea posible, incluyendo todo el camino hasta la Corte Suprema. Vamos a ganar", siguió.

Como era de esperarse, la reacción de la Casa Blanca frente a un nuevo bloqueo de una orden ejecutiva no se hizo esperar. De inmediato, la legión de abogados del Departamento de Justicia presentó argumentos para recorrer tribunales en defensa de la decisión presidencial de cerrar las fronteras del país a refugiados e inmigrantes de los seis estados afectados por el decreto.

El gobierno envió una carta al juez federal de Hawái, tierra natal del expresidente Barack Obama y un bastión de su partido demócrata, en la que presentó su defensa.

Le recomendamos: Trump removió de su cargo a fiscal que cuestionó decreto sobre refugiados

"La política de Estados Unidos es proteger a sus ciudadanos de los ataques terroristas, incluidos los cometidos por ciudadanos extranjeros", señalaba el documento firmado por Trump el 6 de marzo.

La decisión de restringir el acceso de ciertos extranjeros, argumentó, se apoya en "el ejercicio válido de la autoridad presidencial, conforme a la ley" y ha reiterado que el decreto no tiene motivación religiosa.

Pero Watson escribió en su fallo que la "ilógica" del argumento era "palpable".

E indicó que no estaría errado "concluir que poner estos países en la mira es lo mismo que poner en la mira al Islam" pues su población musulmana sobrepasa el 90%.

*Con información de AFP y EFE