Estados Unidos
El secreto mejor guardado de California: un pequeño pueblo ofrece casas casi regaladas a nuevos residentes
En un estado donde los precios de la vivienda superan el alcance de la mayoría, un rincón escondido sorprende al ofrecer casas baratas y una calidad de vida que rompe con la norma en California.
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Ferndale, un rincón de California donde la arquitectura victoriana florece entre colinas y bosques, se perfila como una alternativa accesible en un estado famoso por sus precios inalcanzables.
A unos 420 kilómetros al norte de San Francisco, este pueblo de poco más de 1.400 habitantes conserva un encanto singular y un mercado inmobiliario sorprendentemente asequible para los estándares del Golden State.
Mientras que en ciudades como San Francisco o Los Ángeles el valor promedio de una vivienda supera fácilmente el millón de dólares, Ferndale ofrece viviendas cuyo precio medio se sitúa entre los $650.000 y los $800.000 dólares.

Según datos de Realtor, en abril de 2025 el precio medio de venta en el pueblo fue de $649.500 dólares, con una tendencia al alza del 4,1 % interanual. En comparación, Zillow reportaba en mayo que el valor promedio de una vivienda en todo California alcanzaba los $796.255 dólares.
Esta diferencia sustancial ha ubicado a Ferndale en el radar de quienes desean estabilidad sin renunciar al estilo de vida californiano. Además, ha sido reconocida por World Atlas como una de las mejores ciudades del norte del estado para jubilarse, lo que refuerza su atractivo entre adultos mayores y familias que buscan un entorno más tranquilo.
El paisaje natural y la arquitectura histórica complementan este atractivo. Sus calles evocan una postal con sus edificaciones victorianas bien conservadas, cafés acogedores y casco histórico lleno de detalles y calidez. A solo minutos en automóvil, se encuentra Centerville Beach, una playa aislada rodeada de acantilados y vida silvestre, ideal para quienes disfrutan del aire libre sin multitudes.
A nivel nacional, iniciativas similares en otras localidades dan cuenta del creciente interés por relocalizarse en zonas menos pobladas.

Ciudades del Medio Oeste como Lincoln, Kansas, ofrecen terrenos gratuitos o muy económicos a quienes construyan allí; en Mankato y Curtis, Nebraska, también existen programas para atraer nuevos residentes mediante lotes gratuitos o incluso apoyo económico. Incluso algunas urbes grandes como Buffalo permiten adquirir propiedades abandonadas por precios irrisorios, siempre que se realicen renovaciones.
Sin embargo, estos modelos presentan desafíos. Pues los costos de construcción o renovación pueden superar el valor real de la propiedad en el mercado local, complicando procesos hipotecarios y la viabilidad financiera de los nuevos residentes.
En contraste, Ferndale ofrece ya viviendas listas para habitar, lo que simplifica la transición y reduce barreras de entrada para quienes desean mudarse.
En plena crisis inmobiliaria, esta ciudad emerge como una propuesta realista para quienes buscan calidad de vida, belleza histórica y costos más accesibles, sin alejarse demasiado del corazón de California.