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"Con la paz podemos tener recursos para invertir más en educación, en salud, en los programas sociales", dijo el presidente. | Foto: EFE

POLÍTICA

Otra advertencia presidencial: si no hay paz, habría más impuestos

El presidente Juan Manuel Santos aclaró, eso sí, que los tributos no serán incrementados para financiar el posconflicto.

20 de junio de 2016

Toda una polvareda se armó el pasado jueves cuando el presidente Juan Manuel Santos aseguró, en pleno Foro Económico Mundial, en Medellín, que “tenía información amplísima” de que las FARC “están preparadas para volver a la guerra, y a la guerra urbana”.

Si bien el mandatario debió salir a aclarar que sólo se trataba de recordar que cuando se rompe un proceso de paz se recrudece la violencia y que históricamente las FARC han hablado de llevar su guerra de guerrillas a las urbes, los ánimos no se han tranquilizado del todo, sobre todo entre sus contradictores.

Este lunes, el mandatario dio otra seria advertencia y, en entrevista con el canal Señal Institucional, de RTVC, anunció que se subirían los impuestos en caso de que fracase el proceso de paz y se deba seguir financiando la guerra.

Santos Calderón manifestó que, sin embargo, una subida de los tributos no será necesaria para financiar los proyectos que se vengan con el posconflicto, tras la firma de un Acuerdo final en La Habana.

“Se ha dicho que vamos a subir los impuestos para pagar la paz; todo lo contrario, si llega a continuar la guerra, entonces sí tenemos que subir los impuestos para financiar la guerra, las guerras son muy costosas”, dijo al periodista John Jairo Ocampo en el programa Hablemos de Economía.

Agregó el jefe de Estado que “con la paz podemos tener recursos para invertir más en educación, en salud, en los programas sociales, y eso es lo que realmente va a suceder con la paz”.

Así mismo, el presidente reiteró que el país en paz será capaz de tener una economía que crezca dos puntos adicionales del PIB.

Lo cierto es que lo más posible es que, con paz o sin ella, los impuestos suban. Una reforma tributaria ya asomó las orejas en la primera parte del 2016, pero con la agenda legislativa concentrada en el tema de la paz, el tema se dejó para el segundo semestre. Entonces, verdaderamente, los colombianos sabremos si deberemos poner más o no.