| Foto: Salud Hernández-Mora

EXPEDIENTE URIBE

Finca de los Monsalve se compró en $54 millones y se vende por $460 millones

En una grabación, Óscar Monsalve cuenta cómo son los pormenores de la venta del predio, que ahora será objeto de investigación por parte de la Fiscalía General de la Nación.

7 de septiembre de 2020

En medio de la polémica que ha suscitado la finca de la familia de Juan Guillermo Monsalve, el testigo estrella de la Corte Suprema de Justicia contra el expresidente Álvaro Uribe, las periodistas Vicky Dávila y Salud Hernández-Mora, directoras del canal digital de SEMANA y del programa Al Ataque, respectivamente, dieron a conocer la conversación de Óscar Monsalve, padre de Juan Guillermo Monsalve, con un eventual comprador. La finca La Veranera, en el departamento de Risaralda, está en venta por 460 millones de pesos. Y fue comprada por 54 millones de pesos.

Ahora bien, será objeto de investigación de la Fiscalía que la familia haya comprado un predio por 54 millones de pesos: 27 millones de pesos que llegaron de Deyanira Gómez, esposa de Monsalve, y los otros 27 millones de la madre de Monsalve, una mujer que se supone que no tenía recursos económicos. Además, la esposa del testigo omitió esa información ante la Corte Suprema de Justicia y dijo que los llevó allí para que no pagaran arriendo. 

De acuerdo con el testimonio que le dio al Alto Tribunal el 25 de abril de 2018, ante la magistrada Sandra Yepes, la familia de su esposo Juan Guillermo Monsalve vivía en una finca de su propiedad, sin mencionar que su suegra también era propietaria de la finca. “Ellos (sus suegros, los padres de Juan Guillermo Monsalve) se desplazaron a una parte rural, a una finca que es mía. Los dos señores, Luz Marina (Luz Marina Pineda de Monsalve) y Óscar (Óscar Monsalve) se encuentran en esta finca, en un municipio cerca a Pereira. Ellos viven en la finca, que es mía. Y el señor pues hace labores de campo en esa finca y mi suegra vive con él ahí. Ellos se desplazaron porque tuvimos la forma de que estuvieran ahí, darles garantía de vivienda y que tuvieran el trabajo porque antes, cuando vivían el el otro municipio, el papá de Juan hacía actividades agrícolas y trabajaba con el carbón. Buscando estabilidad, que no tuvieran que pagar arriendo, que no tuvieran que desplazarse, que tuvieran un hogar que lo sintieran como de ellos, fue que ahora viven en la finca que es de mi propiedad”. 

La esposa de Monsalve argumentó que el dinero de su parte de la compra salió de una herencia, mientras que los otros 27 millones de pesos, los de Luz Marina Pineda, siguen siendo un misterio de cómo los obtuvo y será parte de las pesquisas del ente acusador. Sobre la finca, la Corte Suprema de Justicia tenía razón de su existencia, pero no investigó. El 22 de febrero de 2018 llegó la denuncia del senador Iván Cepeda, a través de su abogado Reynaldo Villalba, a la Corte Suprema de Justicia contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por supuesta manipulación de testigos. Un día después tomó la declaración la magistrada Sandra Yepes en la cárcel La Picota, en Bogotá a Juan Guillermo Monsalve, y después, el 25 de abril de 2018, Deyanira Gómez habló de la misma ante la misma magistrada Sandra Yepes. 

En la llamada, Óscar Monsalve dice que Óscar Monsalve hijo es el "patrón", la persona a la que debían marcarle si quieren comprarle la finca, que consta de 20 hectáreas y 6.000 metros cuadrados.

Óscar Monsalve: Aló

Interlocutor: Buenos días.

O. M.: Buenos días.

I: ¿Hablo con don Óscar?

O.M.: Sí, con él.

I: ¿Qué más, don Óscar? Estoy interesado en la finca.

O.M.: Ah, usted vino de por allá arriba.

I: Sí señor.

O.M.: Que subimos de por allá arriba donde los limones.

I: ¿Cuántas cuadras son, don Óscar?

O.M.: Son 31 y media y en hectáreas son veinte hectáreas, 600 metros.

I: ¿Qué sembrados tiene?

O.M.: ¿Usted no la conoce?

I: Pues señor, para poderla mirar tengo que pedirle a usted que me diga a ver qué hay y cuánto pide por ella y todo.

O.M.: Ah ya, vea todo está en café y en plátano, lo que pasa es que está muy muy, cómo le digo yo, zoqueando el café, zoqueándolo, hay un tajo sembrado de café.

I: Sí.

O.M.: Aquí tengo yo lo que es para un tajo sembrado, tengo café y plátano, por ahí unas tres hectáreas sembradas, digamos que si es para zoquearlo están ya.

I: Sí señor, pero ¿tienen café nuevo o todo está para zoquearlo de una vez?

O.M.: No, no, no, todo está para zoquearlo. Tengo un tajo, un tajo que hay café y el café tiene cuatro años de sembrado.

I: ¿Cuánto está pidiendo por la finca, don Óscar?

O.M.: La verdad, la verdad fue que el señor que me llamó ya acaba de pagar y la finca valió 460 de contado.

I: ¿460?

O.M.: 460 de contado, entonces el rollo era que el patrón no la quería vender. Entonces hablamos de nuevo con él y sí, me dijo que le dijera que porque el otro, el patrón pidió 460, entonces el hombre dijo que en 450 quedaba debiendo 10, entonces ni el uno quiso rebajar ni el otro tampoco.

Yo, yo voy a llamar a un cliente para que hable con usted ya, para que hable con usted, o le mando el número a usted para que lo llame a él, pero déjeme que yo hable con él. Entonces usted le va a decir, le va a decir eso: “yo se lo juro que el patrón viene para acá”.

I: ¿Cómo se llama?

O.M.: Se llama Óscar, entonces espere yo voy, es que estoy aquí en la casa para adentrico y yo voy y lo saco para llamarlo a él, para darle el número a usted para que lo llame a él.

I: ¿Óscar qué?, a ver si lo conozco.

O.M.: El muchacho se llama Óscar Monsalve.