¿En dónde queda y qué hacer en Guadalupe, pueblo antioqueño con una de las cascadas más altas del país?

Antioquia es para muchas personas una de las regiones más atractivas para visitar, ya sea en unas vacaciones o para pasar un fin de semana, pues es de esas zonas del país en las que los viajeros encuentran diversidad de planes para realizar.

En este departamento se encuentran pueblos llenos de encanto y que destacan por su arquitectura colonial, con calles empedradas, plazas vibrantes, balcones y fachadas coloridas y mucho que mostrar desde el punto de vista histórico y cultural.

Antioquia destaca por ser una zona con mucha belleza natural y con una riqueza gastronómica que atrae tanto a propios como a quienes llegan de otras regiones. Los visitantes tienen la posibilidad de disfrutar de una explosión de sabores auténticos que reflejan la diversidad cultural de la región.

Muchos son los pueblos que llaman la atención para visitar en Antioquia y uno ellos es Guadalupe, reconocido por su impresionante Salto, una cascada que adorna el paisaje y ofrece un espectáculo para quienes lo visitan, precisa el portal Antioquia Turismo. Sin embargo, no es lo único, allí los visitantes también tienen la posibilidad de disfrutar de parques naturales y sitios históricos, lo que garantiza que hay atracciones para todos los gustos.

Ubicado el norte de Antioquia, sus mayores atractivos están en la zona rural, donde se encuentran paisajes verdes y mucha riqueza hídrica, que forma balnearios y piscinas naturales que son muy frecuentadas. Estas son algunas de ellas.

El Salto de Guadalupe

Esta es considerada la principal atracción de este pueblo antioqueño. Tiene una altura de más de 200 metros y en este punto se pueden realizar caminatas por senderos rodeados de vegetación y llegar hasta la base de la cascada. Allí es posible admirar la fuerza del agua cayendo al vacío. Es un buen sitio para conectarse con la naturaleza.

Otro atractivo natural es el Monte del Tesoro, una reserva que cautiva con su belleza y en la que también se puede efectuar senderismo por medio de árboles centenarios, en donde es posible hacer avistamiento de aves. También está la Cascada de Cheo, que tiene una caída de agua de aproximadamente 80 metros, especial para los amantes de la naturaleza y los aventureros. Allí es posible bañarse en sus aguas cristalinas y disfrutar en familia o con amigos.

Los Charcos del Cañal y las Vegas del Río son otros de los encantos naturales. El primero es un lugar para nadar y relajarse en un entorno tranquilo y rodeado de hermosa vegetación; mientras, al segundo, se le reconoce por una serie de playas fluviales que ofrecen un ambiente tranquilo y relajado. Aquí los visitantes pueden disfrutar de un día de picnic, realizar actividades acuáticas y de la naturaleza en un espacio tranquilo.