El jugo de naranja aporta una gran cantidad de vitamina C al organismo
Sus propiedades antioxidantes son ideales, además de para prevenir enfermedades relacionadas con el hígado, para evitar la aparición de tumores y patologías similares. | Foto: getty Images / Flashpop

Vida moderna

Beneficios de comer media naranja en la noche

La naranja destaca por ser un potente depurativo natural y favorecer la eliminación de radicales libres, potenciando así las funciones hepáticas y limpiando el hígado.

1 de marzo de 2023

El hígado graso es una acumulación de grasa en las células del hígado, que causa procesos inflamatorios y lleva a la fase más avanzada de la enfermedad.

En concreto, se presenta cuando se acumula mucha grasa en las células hepáticas. Aunque es normal tener una pequeña cantidad de grasa en estas células, se considera que es graso cuando está conformado por más de 5 % de grasa, según el magacín especializado en salud Healthline.

En la mayoría de los casos, la causa de la enfermedad del hígado graso es la obesidad y un estilo de vida poco saludable, así como inactividad física. Además, según los especialistas de la Clínica Mayo, se puede convertir en una enfermedad hepática más seria, hasta llegar al trasplante de hígado, a la cirrosis, e incluso, al cáncer de hígado.

Foto referencia sobre hígado
El hígado graso (no por consumo de alcohol) es la enfermedad hepática más frecuente en el mundo, | Foto: Getty Images/iStockphoto

Naranja para limpiar el hígado

En la línea de los cítricos, la naranja destaca por ser un potente depurativo natural y favorecer la eliminación de radicales libres, potenciando así las funciones hepáticas y limpiando el hígado.

Sus propiedades antioxidantes son ideales, además de para prevenir enfermedades relacionadas con el hígado, para evitar la aparición de tumores y patologías similares.

¿Cómo tomar naranja por la noche?

La infusión de manzanilla tiene efectos carminativos que ayudan a reducir el malestar estomacal. Foto: GettyImages.
La infusión de naranja es ideal para limpiar el hígado. | Foto: Foto Gettyimages
  • Infusión con naranja, miel, canela y menta. Para elaborarla, solo se necesita jugo de una naranja, media taza de agua bien caliente, una pizca de polvo de canela, cuatro hojas de menta y una cucharada de miel. Se mezcla todo y listo.
A pesar del dato, sí es posible tomar jugo de naranja, eso sí, no en gran cantidad
Exprimir todos los ingredientes dentro de la licuadora y mezclar. | Foto: getty Images / Burke/Triolo Productions

Jugo de naranja con toronja

Ingredientes:

  • 2 toronjas.
  • 2 limones.
  • 1 naranja.
  • 1 cucharada de aceite de oliva.

Preparación:

  • Pelar las frutas, córtalas por la mitad y retirar las semillas.
  • Exprimir todos los ingredientes dentro de la licuadora y mezclar.
  • Si se desea endulzar un poco, se puede agregar media cucharada de miel.

Causas del hígado graso

Causas

  • Consumo de bebidas azucaradas: las bebidas azucaradas como las gaseosas y las bebidas energéticas son altas en fructosa, que han mostrado ser la causa de acumulación de grasa en el hígado en niños y adultos.
  • Deterioro de la salud intestinal: investigaciones recientes sugieren que tener un desbalance en las bacterias intestinales, problemas en la función de la barrera intestinal (“intestino permeable”) u otro problema de salud en esta zona puede contribuir para desarrollar hígado graso.
  • Obesidad: la obesidad causa inflamación de grado bajo que puede promover la acumulación de grasa en el hígado. Se estima que del 30 % al 90 % de los adultos con sobrepeso tienen hígado graso y la afección está aumentando en niños.
Obesidad - Imagen de referencia
La obesidad causa inflamación de grado bajo que puede promover la acumulación de grasa en el hígado. | Foto: Getty Images
  • Exceso de grasa abdominal: las personas con un peso normal pueden desarrollar hígado graso si tienen “obesidad visceral”, esto quiere decir que tienen mucha grasa alrededor de la cintura.
  • Resistencia a la insulina: se ha demostrado que la resistencia a la insulina y los niveles altos de insulina aumentan la acumulación de grasa en el hígado en personas con diabetes tipo 2 y síndrome metabólico.
  • Ingesta elevada de carbohidratos refinados: la ingesta de carbohidratos refinados promueve la acumulación de grasa en el hígado, especialmente cuando personas con sobrepeso o resistentes a la insulina los consumen en cantidades elevadas.