Vida moderna
¿Cómo limpiar correctamente sus zapatos de gamuza en casa?
Existen productos fabricados especialmente para usarse sobre este material sin dañarlo.
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La gamuza es un material comúnmente presente en la fabricación de zapatos y otros productos como carteras o ropa, pero requiere de un cuidado muy específico en su limpieza, de lo contrario puede arruinarse con facilidad debido a que es bastante delicado.
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El calzado fabricado en gamuza suele considerarse elegante y adecuado para casi cualquier ocasión, esa es una de las razones por las que es un material tan ampliamente utilizado en los zapatos. A pesar de que este material es muy delicado, es posible limpiar los zapatos de gamuza sin pagar altas sumas de dinero e incluso sin salir de casa.
En el mercado existen diversos aerosoles protectores específicamente para calzado de gamuza, los cuales sirven para impermeabilizar el material y así evitar que se manche fácilmente. Se recomienda rociar los zapatos con uno de estos antes de usarlos por primera vez y no después, porque el uso tardío puede fijar la suciedad que ya esté presente.
Otra ventaja de los aerosoles protectores es que ayuda a mantener el color original del material e impide que la suciedad y las manchas se adentren en el tejido.
Los zapatos de gamuza no deben limpiarse con cualquier cepillo. En el mercado existen a la venta unos específicamente diseñados para utilizarse en este material y tienen cerdas particularmente suaves para no causar daño.
Algunos fabricantes de estos cepillos especiales incluyen recomendaciones propias, es muy importante leerlas para no hacer un mal uso que termine arruinando los zapatos.
Antes de limpiar el calzado, resulta necesario asegurarse de que la superficie esté completamente seca para que el cepillo elimine mejor cualquier suciedad o polvo acumulado en la gamuza.
El cepillo debe pasarse siguiendo la misma dirección que tiene la gamuza y manteniendo cierto cuidado. De esta manera, si los zapatos están apenas un poco sucios, recuperarán la apariencia que tenían cuando nuevos.
Solo en caso de que los zapatos ya están desgastados, se recomienda pasar el cepillo con un poco más de intensidad.
Es importante lavar el cepillo después de cada uso para obtener mejores resultados cuando sea necesario volver a utilizarlo sobre los zapatos, especialmente si la gamuza es de un color claro.
En caso de que alguna mancha caiga sobre el calzado y todavía esté fresca, lo más recomendable es usar papel absorbente para limpiarla y así evitar que se expanda al resto del zapato.
Si la mancha ya está seca, en lugar del papel absorbente puede usarse un borrador blanco para frotar suavemente hasta quitar la salpicadura. Luego se recomienda emplear un paño seco para peinar toda la gamuza en la misma dirección, siempre con delicadeza para no causar daños.
Posiblemente en un caso extremo la mancha no desaparecerá, entonces resulta necesario humedecer ligeramente un trapo limpio con un poco de vinagre blanco y presionarlo con suavidad sobre la zona que esté salpicada. Sin frotar, solo presión con movimientos suaves.
Otro producto que puede ayudar si hay una mancha seca es el bicarbonato de sodio. Las instrucciones con este producto son esparcir un poco sobre la salpicadura y luego esperar un par de horas mientras actúa. Pasado ese tiempo, el cepillo especial para gamuza funciona para eliminar lo que quede del líquido.
Algunos trucos para limpiar los zapatos
1. Mantenimiento diario: Con una toalla o esponja humedecida, pero no en exceso, se debe escurrir antes. Puede usarse jabón para prendas delicadas y la recomendación es frotar suavemente.
2. Limpieza superficial con el cepillo especial para gamuza: Frotar siempre en la dirección de la gamuza.
3. Manchas complicadas: Si la salpicadura es de grasa, por ejemplo, unas gotas de amoniaco mezcladas con agua pueden frotarse con un cepillo de dientes y siempre en la misma dirección del material.
4. Tiempo de secado: Luego de la limpieza es necesario dejar pasar al menos ocho horas antes de volver a usar los zapatos, aunque también es importante señalar que durante este tiempo no deben estar expuestos directamente a la luz del sol o a aire caliente.