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HABLAN LOS EXPERTOS

“Lo ideal sería tener los hijos entre los 20 y los 30 años”: Andrés Gutiérrez

Es falso que las mujeres hoy puedan postergar la maternidad hasta edades extremas sin problemas. Andrés Gutiérrez, ginecólogo experto en el tema, asegura que aún con ayuda de la medicina reproductiva la tasa de éxito es mucho más baja después de los 40. Esta es su visión sobre la dicotomía que tienen ellas entre ser mamás o ejecutivas.

10 de noviembre de 2018

Cada año en las noticias se escucha el anuncio de una actriz que a los 45 o 50 años está embarazada de su primer hijo. Rachel Weisz, es una de ellas. A comienzos de este año ella, de 48 años, y su esposo Daniel Craig anunciaron que tendrían su primogénito. También lo hizo la cantante Janet Jackson en 2017 cuando dio a luz una niña a los 50. Pero esas noticias pueden ser engañosas. Es cierto que detrás de esos felices relatos puede haber una historia anecdótica, fuera de lo común pues casos se dan de mujeres que a los 47 años quedan embarazadas espontáneamente.

Pero esa no es la realidad de lo que le sucede al promedio de mujeres. Según el medico Andrés Gutiérrez, ginecólogo y experto en medicina reproductiva, estos personajes famosos que consiguen embarazos en los extremos de su rango reproductivo casi siempre  “han requerido tratamiento médico de alta complejidad. Aún más, es posible que las pacientes por encima de los 42 años hayan accedido a tratamientos con óvulos, donados por una mujer más joven”.

Esos casos de modelos, actrices y otras mujeres famosas que tienen hijos tarde han hecho creer a las demás que esperar al máximo para tener hijos es posible, sin tener presente que la edad es el principal factor que impide conseguir un embarazo.  El índice de fecundabilidad es la tasa de embarazo que consigue la población general y en Colombia es del 23 por ciento, que según Gutiérrez es buena. Quiere decir que de las parejas que van a buscar un embarazo 23 por ciento lo consiguen en el primer mes. “Esa misma tasa a los 40 años es del 7 por ciento lo cual es muy bajo. Quiere decir que de 100 mujeres de 40 años que buscan un embarazo solo 7 lo consigue en un año. Es un número real e impactante”.

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El reloj biológico en las mujeres ha sido un factor crucial pero hoy se sabe que la edad también afecta a los hombres, aunque en ellos el deterioro es menos rápido. Los hombres de 20 años tienen un conteo de 400 millones en un espermograma y a los 40 ese conteo es de apenas 40 millones.  A ellos los afectan las variables de estilo de vida: el consumo de alcohol, el cigarrillo, la mala alimentación, así como el estrés.  “Son células que sufren de estrés oxidativo. Por eso hacer cambios en el estilo de vida es la intervención medica más eficiente para mejorar el espermograma”.

La edad ideal para tener hijos es entre los 20 y 30 años, dice Gutiérrez. A partir de los 35 se observa un deterioro en la calidad biológica de los huevos. Pero hoy existe una dicotomía entre lo biológico y lo cultural. Los requisitos de la sociedad en cuanto a retos personales y profesionales lleva a muchos a aplazar su fertilidad sin saber los riesgos que eso implica.  “Criar limita el desarrollo profesional y frena la autonomía e independencia.  La mayoría quieren ser independientes y prefieren llevar la carga de aplazar su fertilidad”, dice el experto. 

En sociedades más civilizadas procuran que los embarazos sucedan entre las parejas jóvenes y que luego persigan los retos profesionales. “En Francia, por ejemplo, las parejas tienen sus hijos jóvenes a través de subsidios de vivienda y educación que permiten formar familia en las edades tempranas cuando pueden tener hijos más tranquilos”. El mensaje final es que la medicina de reproducción ayuda a las parejas que tienen dificultades, pero el resultado final es que es más sano y eficiente tener embarazos en edades tempranas.

Como está demostrado que el deterioro del útero es más lento que el del óvulo estas mujeres pueden tener sus hijos hasta los 45 años

Hoy está en boga la preservación de la fertilidad: muchas mujeres que no visualizan una pareja en el corto y mediano plazo deciden preservar los óvulos, una técnica que exige un esfuerzo técnico grande y que funciona más que aplazar la fertilidad. De hecho, las grandes  empresas tecnológicas están atrayendo mujeres a sus corporaciones y como parte del plan laboral les ofrecen preservar sus huevos para que cuando tengan 40 años puedan tener hijos y mientras tanto puedan ser productivas en sus trabajos. Como está demostrado que el deterioro del útero es más lento que el del óvulo estas mujeres pueden tener sus hijos hasta los 45 años. “Puede haber más restricciones, pero desde el punto de vista biológico y genético son gametos de una mujer de 35 años”. 

Además de la baja tasa de embarazos tener hijos tarde genera otros riesgos. La mayoría de enfermedades benignas de la mujer empeoran con la edad. La endometriosis es una de ellas y cuando tienen este mal y aplazan la fertilidad puede alcanzar un estado severo.  También hay riesgos para los hijos. Hay una en 2000 posibilidades de tener bebe con síndrome de Down a los 20 años, pero a los 40 años es de una 1 en 100 podemos. “Hablamos de un incremento de 20 veces en  el riesgo de tener un bebé con afectación genética”, dice. Además de que solo tienen  una tasa del 7 por ciento de fecundabildad, la probabilidad de tener un embarazo y perderlo está cercana al 50 por ciento. “Lo que resulta al final es que una paciente de 40 años solo en un 3 o 4 por ciento termina con bebe sano en su casa. La mayoría tiene dificultades.

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El riesgo obstétrico es una tercera variable que la gente no considera y es que por el aplazamiento de la fertilidad la posibilidad de complicar su embarazo y el parto es mayor. Según el experto a los 20 años las pacientes tienen control prenatal sin dificultad y parto vaginal normal, pero a medida que avanza la edad hay más probabilidades de que desarrolle complicaciones asociadas al embarazo como diabetes del embarazo, hipertensión por embarazo. “Estas mujeres requieren por eso de un control mayor”.

El mensaje final es que la ventana de oportunidad es demasiado corta, y es importante conocerla para planear cuándo ser madre.  “Esa ventana es entre los 20 y los 30 años y empieza a cerrarse a los 35, lo que significa que es de apenas 20 años. La gente se gasta el 75 por ciento de ese periodo fértil en pensarlo”.