Vida Moderna
La fruta que previene el alzhéimer, la demencia y detiene la caída del cabello
Este poderoso alimento contiene polifenoles, fibras, vitamina A y C y betacaroteno, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Una de las patologías que suele aparecer con el pasar de los años es el alzhéimer, un tipo de demencia que es causada por problemas con la memoria, el pensamiento y el comportamiento, donde se pueden llegar a perder las habilidades cognitivas.
De acuerdo con Alzheimer’s Association, esta enfermedad es responsable de un 60 a un 80% de los casos de demencia y, aunque muchas personas la relacionan solamente con el envejecimiento, también puede aparecer en personas menores de los 65 años. De hecho, la organización en mención señala que aproximadamente 200.000 estadounidenses menores de 65 años tienen enfermedad de Alzheimer de inicio precoz.
En cuanto a la sintomatología que se puede presentar, la señal más temprana que puede alertar sobre esta enfermedad es la dificultad para recordar información recién aprendida, pues los cambios ocasionados por el alzhéimer generalmente inician en la parte del cerebro que afecta el aprendizaje. De esta manera, a medida que esta patología avanza, se agravan los síntomas y pueden surgir los siguientes:
- Desorientación.
- Cambios en el humor y el comportamiento.
- Confusión cada vez más grave en relación con eventos, horas y lugares.
- Sospechas infundadas sobre familiares, amigos y cuidadores profesionales.
- Pérdida de memoria y cambios en el comportamiento más graves.
- Dificultad para hablar, tragar y caminar.
Ante estos síntomas, es importante acudir al médico para diagnosticar el tipo de alzhéimer que se padece y el tratamiento a seguir. Adicional a ello, los expertos en salud aconsejan mitigar esta afección con el consumo de ciertos alimentos como las frutas; de hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el consumo de 400 gramos de frutas y verduras para mantener una buena calidad de vida.
Por lo anterior, el portal web Tua Saúde, aconseja consumir cereza, un poderoso fruto rico en polifenoles, fibras, vitamina A y C y betacaroteno, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que ayudan a combatir el alzhéimer.
Frente a esto, varios estudios señalan que los polifenoles logran reducir la pérdida de la memoria, así como mejorar la función de las neuronas cerebrales, lo cual beneficia la comunicación entre el cerebro y el resto del cuerpo.
De otro lado, un beneficio que otorga el consumo de este alimento es su aporte de vitamina C y antioxidantes que ayudan a mantener un cabello sano y evitar su caída.
Asimismo, el portal web El Español detalla que este alimento favorece como tal el fortalecimiento de los folículos. De hecho, un estudio publicado en International Journal of Trichology, indica que la falta de antioxidantes influye en el cabello de la misma forma que lo hace en la piel, por lo que tomar este tipo de alimentos supone una barrera contra la caída.
¿Cómo consumir este superalimento?
Este fruto se puede consumir de forma natural o se puede adicionar en alimentos como postres, mermeladas e infusiones.
En cuanto a la cantidad indicada, los expertos del Tua Sáude recomiendan consumir alrededor de 20 cerezas al día, lo cual equivale a una taza de este alimento. A continuación, se da a conocer algunas recetas saludables para aprovechar los nutrientes de las cerezas:
Jugo de cerezas
Ingredientes
- 500 g de cerezas sin semilla.
- 500 mL de agua.
- Azúcar o edulcorante al gusto.
- Hielo al gusto.
Preparación:
En primer lugar, se deben lavar correctamente las cerezas y quitarles el tallo. Enseguida, adicionar en la licuadora una porción de agua junto con las cerezas, el hielo y el azúcar al gusto. Dejar procesar por un par de minutos para su posterior consumo.
Mousse de cereza
Ingredientes
- 1 taza de cerezas.
- 300 g de yogur griego.
- 1 sobre u hoja de gelatina sin sabor.
- 3 cucharadas de agua.
Preparación:
Lo primero que se debe hacer es retirar las semillas de las cerezas y luego licuar con el yogur. Enseguida, disolver la gelatina en el agua y adicionar la mezcla, revolviendo hasta que esta quede homogénea. Luego, llevar a la nevera hasta que quede firme para su posterior consumo.