Pero y gato
Perro y gato | Foto: Getty Images

VIDA MODERNA

¿Pueden gatos y perros contagiarse de la variante delta del coronavirus?

La recomendación de los expertos es evitar que las mascotas estén cerca de personas infectadas.

29 de julio de 2021

En medio de lo que ha sido una tragedia producida por la llegada de la pandemia para miles de personas alrededor del mundo, también los animales se han visto afectados por este letal virus.

Por este motivo, luego de darse aviso del surgimiento de la variante delta del coronavirus, que ya está presente en 105 países del mundo, esta se ha convertido en un factor de preocupación entre las autoridades gubernamentales a nivel global debido a que su alta contagiosidad podría también afectar a gatos y perros, tal como sucedió con la variante alfa, conocida comúnmente como variante británica, esto debido a que se originó en el Reino Unido.

Es así que, teniendo en cuenta que al igual que otras virosis respiratorias, la covid y sus cepas pueden llegar a afectar a los animales, es importante que los duelos de los animales de compañía eviten que los mismos tengan contacto con un humano infectado o con animales que pudieran estar expuestos a secreciones respiratorias contaminadas o permanezcan en lugares con por ventilación.

Asimismo, y pese a que la comunidad científica ha señalado en reiteradas ocasiones que los animales pueden contraer la enfermedad, pero no son propagadores de la misma, es fundamental que en caso de detectar síntomas en la misma, además de prestarle los cuidados necesarios con ayuda de un experto, se mantenga aislada mientras se recupera.

“Debido a que este virus puede propagarse de personas a animales, es importante que las personas con covid-19 se mantengan alejadas de las mascotas y otros animales, al igual que lo hacen con otras personas, para evitar contagiar a los animales”, explicó el doctor Casey Barton Behravesh, director de One Health Office de los Centros para el Control y la Prevención de enfermedades de EE. UU. (CDC).

Por su parte, la Dra. Sarah Hamer, epidemióloga veterinaria de la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencias Biomédicas de Texas A&M (CVMBS), indicó por medio de un comunicado que “la vigilancia del SARS-CoV-2 en animales dentro y alrededor de los hogares, y las investigaciones genéticas del virus de las mascotas infectadas son de vital importancia para comprender la transmisión y evolución del virus, así como para predecir lo que puede suceder en el futuro”.

Cabe recordar que, aunque en varios países también se está trabajando en el desarrollo de vacunas anticoronavirus para animales, fue Rusia la primera en aprobar una vacuna para los mismos, denominada Carnivac-Cov.

Es así como desde el pasado mes de mayo este país comenzó a aplicar en varias regiones el inmunizante según informó la asesora del jefe del Servicio Federal de Vigilancia Veterinaria y Fitosanitaria (Rosseljoznadzor), Yulia Melano.

Señaló a la agencia oficial RIA Nóvosti que el proceso se inició tras la evaluación de los efectos de la vacuna en los animales que resultaron positivos en la protección contra el virus.

De acuerdo con la asesora, el mayor interés en la vacunación lo tienen dueños de mascotas que viajan con frecuencia y personas que suelen pasear a sus perros sin correa.

Rusia autorizó la vacuna en marzo pasado, asegurando que se trata del primer fármaco registrado en el mundo contra la covid-19 para animales.

Los análisis preclínicos de la vacuna comenzaron en agosto pasado y en el proceso de evaluación se tuvieron en cuenta varios animales como visones, gatos, perros y hurones: 130 de cada especie.

“El éxito de la primera etapa hizo posible en octubre del año pasado pasar a ensayos clínicos de la vacuna en animales en condiciones industriales”, indicó el regulador recientemente.

Rusia señaló que no se requieren requisitos especiales para la preparación de animales sanos para la vacunación, pero sí recomienda que los animales preñados, enfermos, así como aquellos que no hayan alcanzado los dos meses de vida y hembras que recién hayan parido (un mes atrás), no deberían ser vacunados.