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| Foto: Esteban Vega

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En imágenes: Las lágrimas de emoción del niño que logró llegar hasta James en la cancha

Al final del partido de despedida de la Selección Colombia, un audaz niño corrió con la ilusión de abrazar a su ídolo. Se fue con el saludo y la camiseta del 10.

26 de mayo de 2018

Muchos cumplieron el sueño de ver a sus ídolos en el partido de despedida de la Selección Colombia en Bogotá pero nadie como un niño que se arriesgó a entrar en la cancha en la búsqueda de cumplir su sueño que James le autografiara su camiseta.

Cuando terminó el partido y mientras Catherine Ibargüen se preparaba para entregar la bandera de Colombia al capitán Radamel Falcao García, un intrépido niño saltó a la cancha aprovechando la confusión.

Fotos de Esteba Vega/Fotógrafo Semana

Desde su aparición a toda velocidad tenía un objetivo claro pues tenía un marcador en su mano con el que esperaba que el 10 le firmara la camiseta de la Tricolor que llevaba puesta.

Al llegar al centro del campo en donde estaban los jugadores a la espera de la ceremonia el niño no dudó y su único objetivo fue llegar a James, sin importarle los demás integrantes de la Selección, que también estaban alrededor y  que reaccionaron con risas por la valentía del pequeño.

Fotos de Esteba Vega/Fotógrafo Semana

En ese momento James se estaba quitando la camiseta y al verlo romper en llanto por la emoción no dudó en darle un abrazo, sabiendo que este era un momento que nunca iba a olvidar en su vida.

Fotos de Esteba Vega/Fotógrafo Semana

Lo arropó en sus brazos y sabiendo que el tiempo era corto porque se acercaba el personal de seguridad, el jugador estelar de la Selección le entregó la camiseta con la que había disputado el encuentro, se la puso y se la firmó, en un acto que demuestra la humildad del zurdo del Bayern Múnich.

Fotos de Esteba Vega/Fotógrafo Semana

Fotos de Esteba Vega/Fotógrafo Semana

Tras el llamado del cuerpo de seguridad y con el objetivo cumplido, el niño se alejó de la escena acompañado del personal de logística del evento con el puño arriba como gesto de celebración de quién cumple un sueño.

Fotos de Esteba Vega/Fotógrafo Semana