Economía
Ya se siente en el bolsillo: la inflación bajará menos justo cuando los colombianos más necesitan comprar
El Banco de la República subió su pronóstico de los precios al consumidor para 2025. El Dane revelará el comportamiento del indicador de octubre el lunes 10 de noviembre.
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En el fin de año, cuando tradicionalmente las familias compran productos, renuevan los arreglos navideños o sacan recursos para pintar la casa para esperar la celebración de la Navidad y el Año Nuevo, puede hacerse más visible el fantasma de la inflación y, ojalá, no termine aguando la fiesta.
Muchos colombianos tendrán que apretarse el cinturón pese a que, si trabajan en la formalidad, recibirán sus primas y bonificaciones, o si se dedican al comercio y al rebusque, aumentarán sus ingresos por mayor demanda de productos.
Pero el panorama no está despejado para que se den las buenas nuevas que trae consigo la temporada decembrina. Los precios, en vez de estar bajando, se incrementan, porque la desaceleración de los mismos es más lenta de lo previsto. Ya lo sienten así los hogares cuando acuden a los sitios de expendio de alimentos y demás productos de la canasta básica y la plata cada vez les alcanza menos.
El Banco de la República, tras destapar su informe de Política Monetaria, el cual es realizado por el equipo técnico del Emisor, confirmó lo que temían los integrantes de la junta directiva de la entidad: que no ha cambiado su posición de dejar las tasas de interés de referencia quietas, el riesgo de una ‘destorcida’ de la inflación.

Los riesgos parecen materializarse, puesto que en el informe, el Banco de la República proyectó una inflación de 5,1 % para el cierre del año, cifra ligeramente más alta de la que se tenía en la medición anterior, que era de 4,7 %.
Implica que a los colombianos les resultará más caro preparar la natilla, comprar el vino del brindis de medianoche en el Año Nuevo, y ni qué decir de los tiquetes aéreos y los hospedajes para disfrutar de las vacaciones.
Y el apretón no será tan pasajero, puesto que para 2026 tampoco habrá una baja tan rápida de la inflación, que es el peor impuesto para los hogares y el gran freno para la economía.
El nuevo pronóstico del Emisor apunta a una cifra de 3,6 % en el otro año, luego de que se tuviera en 3,2 % en la anterior medición.
Con ello, se completaría cinco años sin que se logre llegar a la ambiciosa meta de una inflación del 3 %, como la que tiene el Banco de la República.

Ola de efectos
Cuando la inflación no baja con la suficiente rapidez, los efectos salpican a todo lo que esté cerca, pero el foco del impacto es la economía, por lo que la junta del Emisor es mencionada con frecuencia por el Gobierno, para que baje las tasas de interés de referencia y, por esa vía, se ponga ‘gasolina’ al crecimiento.
Por ahora, aunque algunos analistas, como los del Banco Itaú, consideran que los expertos en política monetaria del Banco de la República probablemente no reducirán las tasas hasta el segundo semestre del próximo año —una postura que a menudo se interpreta como un freno al crecimiento de la producción—, los pronósticos del mercado indican que en el tercer trimestre de este año, según los datos que el Dane divulgará este mes, se habría registrado suficiente dinamismo, con lo que el PIB (producto interno bruto) habría crecido a un ritmo del 3 %.
Según los análisis de los expertos del Emisor, expresados en las minutas, dicho crecimiento obedece a “la demanda interna, con aumentos sostenidos en el consumo privado, incrementos en el consumo público y crecimientos en la inversión, especialmente en maquinaria y equipo, y en obras civiles. Acorde con esto, el equipo técnico proyecta un crecimiento económico del 2,6 % para 2025 (antes el pronóstico era de 2,7 %)″.

Pero la amenaza de que el fantasma de la inflación se haga más nítido sigue, pues el país entrará pronto al debate sobre alza en salario mínimo para el próximo año, lo que podría impulsar más los precios si la cifra se va por encima de dos dígitos, al igual que los ajustes en tarifas de energía y gas, y el horizonte de incertidumbre con las elecciones locales y los aranceles de Estados Unidos.
La estadística que destapará el Dane el lunes 10 de noviembre, sobre el comportamiento de la inflación en octubre, dará nuevas luces de cómo estará el costo de vida para los hogares en el fin de año.
