Home

Nación

Artículo

De izquierda a derecha: Temístocles Ortega, gobernador del Cauca; Jaime Armando, secretario de gobierno de Nariño; Álvaro Cruz, gobernador de Cundinamarca; Rodrigo Guerrero, alcalde de Cali. | Foto: Diana Sánchez

TERRITORIO

La descentralización real: un factor clave para reconciliarse

Cinco departamentos reclaman más autonomía como condición para avanzar hacia la paz.

26 de febrero de 2014

Con un categórico llamado a que desde Bogotá se tengan en cuenta a las regiones y se generen mecanismos reales de descentralización y autonomía para los territorios, empezó el segundo encuentro de Reconciliación Colombia en Cali, con participación de los departamentos de Valle, Cauca, Nariño, Boyacá y Cundinamarca. 

El gobernador del Cauca, Temístocles Ortega, aseguró que la construcción del país se ha hecho a partir de unos pocos. 

“El Estado tiene que entender que hay regiones. Y que uno de los problemas de este país es el centralismo. Hay una enorme potencialidad en las regiones, pero está cercenada. No es cierto que haya descentralización. Hay unos batallones de gente que viene de Bogotá a ejecutar unos programas que no tienen nada que ver con la región”, expresó. Además, sostuvo que quienes más tengan son los que más deben aportar a la construcción de paz y la reconciliación. 

En esa misma línea se pronunció el alcalde de Cali, Rodrigo Guerrero, quien utilizó el ejemplo de la gallina y el cerdo que querían hacer huevos con tocineta: uno aportaba mientras el otro se comprometía hasta con su vida misma. 

“Si lo vamos a hacer, implica recursos, y recursos importantes. Los empresarios privados tienen que participar activa y dolorosamente. La sociedad colombiana tenemos que dar todos hasta que nos duela”, indicó Guerrero. 

El alcalde de Cali agregó que de firmarse del proceso de paz en La Habana, será en las regiones donde se logre realmente. Así mismo, Óscar Quiroga, alcalde de Viotá (Cundinarmaca) expresó que “los acuerdos se van a dar en Cuba, pero la paz se construye en los pequeños territorios como Viotá, que han sido azotados por la violencia del conflicto armado”.

En el primer encuentro de Reconciliación Colombia, entre seis departamentos tan distintos como Antioquia y Putumayo o Chocó y Tolima se planteó que la reconciliación era deber de toda la sociedad y no sólo de las víctimas y victimarios.

Esa misma idea resurgió en el segundo encuentro. Jaime Armando Rodríguez, secretario de gobierno de Nariño, opinó que “es necesario reconciliar al país. Una nación que se construyó con un modelo centralista, que dejó por fuera a muchas regiones requiere reconstruirse para no repetir la tragedia de 200 años”.

Así mismo, Álvaro Cruz, gobernador de Cundinamarca, aseguró que “mientras no perdonemos no podemos estar tranquilos y no podemos irradiar tranquilidad y paz”.

Feliciano Valencia, representante de los cabildos indígenas del norte del Cauca, enfatizó en otro aspecto de la reconciliación. “Para reconciliarnos hay que conocer la verdad. Y nosotros sí queremos saber quiénes son los autores materiales e intelectuales de las masacres, los asesinatos, el desplazamiento”.