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La guía definitiva para limpiar y desinfectar su nevera y prevenir la presencia de bacterias peligrosas

Cometer errores al limpiar la nevera no solo reduce la vida útil del electrodoméstico, sino que también puede favorecer la proliferación de bacterias.

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5 de noviembre de 2025, 4:52 p. m.
La desinfección es lo que diferencia una limpieza estética de una higiénica.
La desinfección es lo que diferencia una limpieza estética de una higiénica. | Foto: Getty Images

Limpiar la nevera, en principio, no parece complicado: basta con sacar los alimentos, pasar una esponja con jabón y volver a acomodarlo todo. Sin embargo, este procedimiento no siempre elimina los microorganismos que se acumulan en su interior.

Según explica la ingeniera de alimentos Mariana Zapién, en los refrigeradores domésticos pueden proliferar bacterias patógenas como E. coli, listeria o salmonella, capaces de sobrevivir en paredes, cajones y repisas incluso después de una limpieza superficial.

La especialista advierte que estos microorganismos pueden causar enfermedades alimentarias si entran en contacto con los alimentos frescos almacenados. Por eso, además de retirar restos de comida y limpiar las superficies, es fundamental desinfectar correctamente el interior del frigorífico, un paso que muchas personas pasan por alto y que marca la diferencia entre una limpieza estética y una higiénica.

La nevera puede sufrir daños su no se cuida correctamente.
Muchas personas limpian, pero no desinfectan su nevera. | Foto: Getty Images

Paso a paso para desinfectar la nevera de forma correcta

Lo primero es vaciar por completo el frigorífico, desechando los productos caducados o en mal estado. Luego, se recomienda usar una esponja suave destinada exclusivamente para esta tarea, junto con jabón neutro o limpiador doméstico. Se deben frotar paredes, repisas y cajones para eliminar restos visibles de comida o líquidos.

En caso de manchas difíciles, Zapién sugiere emplear una fibra más firme y, posteriormente, enjuagar con agua limpia. Después, es importante pasar una bayeta o microfibra húmeda para retirar los residuos de jabón, ya que estos pueden alterar el olor o el sabor de los alimentos una vez que se vuelvan a guardar.

Cuando el frigorífico está limpio, llega el paso clave: la desinfección. La ingeniera recomienda preparar una solución casera mezclando una cucharada de hipoclorito de sodio por cada litro de agua y aplicarla con un pulverizador sobre todas las superficies. Estas deben quedar visiblemente húmedas durante aproximadamente seis minutos, el tiempo necesario para que el desinfectante actúe y elimine los microorganismos.

La nevera puede presentar fallas que se pueden solucionar a tiempo.
Se deben sacar todos los alimentos y desechar productos caducados o en mal estado. | Foto: Getty Images

Finalizado el tiempo de contacto, se retira la solución con una microfibra limpia y húmeda, y se deja que el interior seque completamente al aire antes de volver a introducir los alimentos. Este sencillo paso puede reducir de manera notable la presencia de bacterias como listeria o salmonella, capaces de multiplicarse incluso a bajas temperaturas.

La experta insiste en que la limpieza y desinfección del frigorífico debe hacerse con frecuencia, y no solo cuando hay derrames o mal olor. Mantener una buena higiene interior ayuda a conservar mejor los alimentos, evitar contaminaciones cruzadas y reducir el riesgo de intoxicaciones alimentarias.

Asimismo, recomienda mantener la temperatura entre 3 y 5 °C, no sobrecargar las bandejas y revisar las juntas de la puerta, medidas que contribuyen a evitar la humedad y la proliferación de microorganismos.

*Con información de Europa Press