Sí es posible controlar la dermatitis atópica.
Sí es posible controlar la dermatitis atópica. Foto: Getty Images | Foto: Getty Images/iStockphoto

Vida Moderna

Este es el tipo de manchas que salen en la piel por estrés

El estrés puede desarrollar enfermedades graves si no es controlado.

1 de agosto de 2022

La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, define el estrés como “la forma” en que el cuerpo da respuesta a una situación, es decir, cómo reacciona ante un hecho que puede ser retador o requiere exigencia.

Durante el estrés, el cuerpo libera hormonas enviando una señal para actuar en un momento determinado. Sin embargo, la glucosa en la sangre y la presión arterial se pueden ver altamente afectadas.

Cabe señalar que no se considera que el estrés sea malo, ya que puede ayudar en la reacción ante situaciones que coloquen en riesgo la vida de una persona. No obstante, convivir con él puede desarrollar graves afecciones sobre la salud.

Además, un estrés crónico puede ser perjudicial para quien lo padece, causado, en algunas ocasiones, por:

  • Vivir situaciones en donde se corre un alto riesgo de perder la vida, como eventos naturales, catastróficos, o accidentes de tránsito, por ejemplo.
  • Además de afrontar episodios de la vida que causen un impacto, como una enfermedad, o una ruptura matrimonial.
  • Aunque no es lo que más importa, MedlinePlus asegura que las rutinas diarias pueden causar estrés, aquellas en las que las responsabilidades del trabajo son abrumadoras o los problemas financieros.
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Foto referencia sobre estrés. | Foto: Getty Images

Enfermedades por estrés

El estrés puede provocar otras dificultades en las rutinas diarias, como por ejemplo:

  • En el sueño: las preocupaciones del día a día pueden impedir conciliar el sueño, una actividad tan importante para la restauración del cuerpo y la renovación del cerebro.
  • Dolores de cabeza: tal y como lo señala la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, la migraña es un dolor de cabeza que se debe a la función irregular del cerebro, que provoca síntomas como vómito o una alta sensibilidad a los rayos de luz.
  • Cambios de humor: esta señal es más notoria porque una persona estresada se puede ver invadida por el enojo, o quizá, la tristeza.
  • Con lo anterior, la ansiedad y la depresión se pueden ver involucradas, entendidas como trastornos que afectan el comportamiento y los pensamientos de una persona porque sus miedos y preocupaciones son agobiantes.

Todo lo anterior puede también ocasionar problemas físicos como manchas en la piel, acné e inflamaciones, precisa Mejor con Salud, en una publicación escrita por Bernardo Peña, donde señala que el estrés también puede producir enfermedades mucho más graves como la psoriasis.

¿Qué es la psoriasis?

De acuerdo con la Clínica Mayo, esta es una enfermedad que se produce sobre la piel, causando eccema y manchas que provocan comezón. Adicional a ello, no solo puede aparecer en el rostro, sino en otras partes del cuerpo, como en las rodillas, los codos, o en el cuero cabelludo.

La entidad explica que esta enfermedad se le categoriza como crónica, que aunque puede haber tratamientos, no tiene cura, y no solo influye en la parte externa del organismo, sino en la interna.

Cabe recalcar, que se conocen varios tipos de psoriasis como: en las uñas, en placas, la pustulosa, la inversa eritrodermia, entre otras.

Sarampión - imagen de referencia
Foto referencia sobre dermatitis. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Aunque como se mencionó anteriormente, la psoriasis no es la única enfermedad que es causada por el estrés, otras tantas como la dermatitis seborreica pueden generar inflamación en la piel.

Sin embargo, el estrés no es el único en esta condición, los climas extremos, la obesidad, los trastornos en el sistema nervioso, o tal vez, el consumo de alcohol, pueden ser causas de su aparición. Adicional a ello, se le atribuye un factor genético que la puede desarrollar.

Los primeros signos de la dermatitis seborreica son: manchas, en la cara, detrás de las orejas, el pecho, y axilas.