En la tercera edad es más necesario una buena provisión de nutrientes para fortalecer la memoria y mantener el correcto funcionamiento del cerebro. Foto: Getty images.
Los adultos que son más activos físicamente tienden a tener una mayor función del hipocampo. Foto: Getty images. | Foto: Foto: Getty images.

Vida moderna

Memoria: esta es la cantidad de ejercicio físico que se debe realizar para estimularla

El ejercicio físico optimiza la capacidad de memoria, sobre todo si esta actividad se realiza en un intervalo de tiempo específico.

12 de abril de 2022

Sin duda una parte inevitable del proceso de envejecimiento es la falta de memoria, sin embargo, algunos científicos aseguran que se puede reducir esta atenuación.

En concreto, el hipocampo, es una zona vital para el aprendizaje y la memoria, y es particularmente sensible al estrés; además, a medida que la gente va envejeciendo, esta es una de las primeras áreas que se ve afectada negativamente. En la enfermedad de Alzheimer, este empeoramiento es aún más evidente, según el portal La Vida Lúcida, en su sección de salud y bienestar.

Cabe recordar que en el pasado, los estudios han demostrado que el ejercicio físico puede mejorar ciertos aspectos de la capacidad cognitiva y mejorar el rendimiento de la memoria. Además, los adultos que son más activos físicamente tienden a tener una mayor función del hipocampo.

La edad no es impedimento para hacer ejercicio, tan solo hay que buscar la rutina deportiva adecuada. Foto: Getty images.
Un estudio encontró que quienes hacían ejercicio cuatro horas después de su sesión de aprendizaje conservaban mejor la información dos días más tarde. | Foto: Gettyimages

Un estudio llevado a cabo por Van Dongen, Kersten, Wagner, Morris y Fernández, en el 2016, citado por la Universidad ISEP, evaluó los efectos de una sola sesión de ejercicio físico en la consolidación de la memoria y la memoria a largo plazo luego de haber estudiado.

En la investigación participaron 72 sujetos que aprendieron 90 asociaciones entre imágenes y localizaciones durante 40 minutos antes de ser asignados aleatoriamente a uno de tres grupos: uno hizo ejercicio de inmediato; el segundo, cuatro horas más tarde, y el tercero no realizó deporte alguno, según la Revista de Neurología.

El ejercicio físico consistió en 35 minutos de entrenamiento a intervalos en bicicleta a una intensidad de hasta el 80 % de la frecuencia cardíaca máxima. Luego de 48 horas, los participantes del estudio regresaron para demostrar lo que recordaban mientras se sometían a una resonancia magnética cerebral, según Revista de Neurología.

Los investigadores encontraron que quienes hacían ejercicio cuatro horas después de su sesión de aprendizaje conservaban mejor la información dos días más tarde que aquellos que hacían ejercicio inmediatamente o que aquellos que permanecían sedentarios.

Además, “las imágenes cerebrales mostraron que el ejercicio después de un período de tiempo se asociaba con representaciones más precisas en el hipocampo, un área relevante para el aprendizaje y la memoria”, según el estudio.

A partir de estos resultados, los investigadores concluyeron que el ejercicio físico optimiza la capacidad de memoria, sobre todo si esta actividad se realiza en un intervalo de tiempo específico y no inmediatamente después del aprendizaje.

Otro estudio de un equipo de la Universidad de California, Irvine y la Universidad de Tsukuba en Japón, realizó algunos experimentos para ver si el ejercicio podría mejorar la memoria en un tiempo más corto: minutos en lugar de días o semanas.

Los investigadores explican que es posible que el crecimiento de las células cerebrales se active con el ejercicio, pero puede haber un mecanismo más corto involucrado en el proceso. Si bien, querían identificar cualquier mejora medible en la actividad cerebral en relación con la memoria en los primeros minutos después del ejercicio suave.

Sus hallazgos fueron publicados en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias. donde 36 participantes adultos jóvenes sanos hicieron ejercicio durante solo 10 minutos (ejercicio de intensidad ligera). Luego, el equipo usó una resonancia magnética de alta resolución para detectar cualquier cambio en la actividad cerebral.

Las neuroimágenes mostraron una mejor conectividad entre la circunvolución dentada, que es parte del hipocampo y se cree que juega un papel en el almacenamiento de la memoria episódica, y las áreas de la corteza involucradas en el procesamiento detallado de la memoria.

Además, cuando los investigadores administraron una prueba de recuerdo de la memoria a los participantes, el aumento de la conectividad se asoció con un mejor rendimiento de la memoria. El período de ejercicio de 10 minutos mostró resultados inmediatamente después de su finalización.