| Foto: Kelley Nicole Knap

ENTREVISTA

“En todo el mundo hay personas muy conservadoras”

Semana.com habló con la profesora que fue despedida del Colegio San Carlos por posar semidesnuda para una revista.

17 de junio de 2016

Hace poco la profesora estadounidense Kelley Nicole Knapp, de 27 años, publicó una carta en la que explicaba las razones por las cuales ya no daría clases de inglés en el Colegio San Carlos. Todo se resume en que el rector, Juan Fernando Corral, tomó la decisión unilateral de no renovar su contrato por la publicación de 2014 en Vice Colombia en la que ella aparece posando semidesnuda.

Semana.com: ¿Por qué decidió venir a Colombia?

Kelley Knapp (K.K.): Por amor. Cuando vivía en Estados Unidos tuve un novio que era bogotano, y cuando él se devolvió en 2012 yo vine detrás de él y empecé a trabajar en el San Carlos.

Semana.com: ¿Por qué decidió hacer esta fotografía?

K.K.: Yo he leído Vice desde que tengo 18 años así que cuando me propusieron hacer la fotografía acepté. Creo que es un medio internacional que hace un trabajo serio y diferente.

Semana.com: ¿Alguna vez sintió que los estudiantes o los padres se quejaran o hicieran comentarios por su fotografía?

K.K.: Nunca. De hecho, cuando le pregunté al rector si alguien se había quejado me dijo que no.

Semana.com: En 2014 cuando salió la publicación, ¿tuvo algún problema con las directivas del colegio?

K.K. No, cuando el vicerrector, Jorge Celis, se enteró de la publicación hablamos y le dije que no aparecería ninguna foto que yo no aprobara. Él me dijo que pensara si era conveniente que me hiciera esas fotos para el ejercicio de la docencia. Pero todo terminó allí. Luego me renovaron el contrato para el año 2014 – 2015.

Semana.com: ¿Si pudiera retroceder el tiempo volvería a hacerse esa fotografía?

K.K.: Después de hablar con el vicerrector en 2014, también hablé con el director de Vice para ver si era posible que la fotografía no saliera porque quería seguir en el colegio, pero ya era demasiado tarde. Yo hubiera entendido mi salida del colegio en 2014, nunca trato de negar mis errores o mis responsabilidades.

Semana.com: ¿Por qué decidió publicar la carta?

K.K.: No me estoy vengando, simplemente quería que mis estudiantes conocieran las verdaderas razones de mi salida. Hasta entonces me habían dicho que hacía bien mi trabajo… Me molestó la falta de coherencia de la institución porque yo pensé que todo había quedado arreglado en 2014 cuando hablé con Jorge Celis, pero dos años después me despiden por un incidente que a mi parecer ya estaba solucionado.

Semana.com: ¿Cómo la afectó la decisión del rector?

K.K.: Como dije en la carta, yo le pregunté al rector el 10 de junio si renovaría mi contrato; necesitaba conocer esa información porque el 30 de junio expira mi visa laboral. Me dijo que no tenía suficiente información. Cuatro días después me dijo que había decidido, sin consultar con nadie, no renovar mi contrato por la fotografía.

Aunque mi contrato iba hasta el 30 de junio me dijo que ya no debía volver. Supongo que no me quería más en el colegio.  

Semana.com: ¿Había tenido algún inconveniente antes con el rector?

K.K.: No, lo único que me molestaba era que él me decía que era “la profesora más linda del colegio” y que los estudiantes estarían felices de tenerme de profesora de inglés. Tampoco me gustaba como me miraba. Me hacía sentir incómoda.  

Semana.com: Varias personas le han aconsejado por redes sociales demandar al rector o a la institución, ¿ha pensado en tomar alguna medida legal?

K.K.: No, lo más importante es el bienestar del colegio como institución y de los estudiantes. No quiero hacer nada que pueda afectarlos. Ellos son más importantes que yo.   

Semana.com: ¿Piensa que la sociedad colombiana es muy conservadora y por eso suceden cosas como esta?

K.K.: No quiero generalizar. En todo el mundo hay personas muy conservadoras. Aquí también he conocido a muchos liberales.   

Semana.com: ¿Cuáles son sus planes?

K.K.: Aun no lo tengo claro. Amo a Colombia. He conocido las personas más maravillosas, amables y apasionadas. El país me encanta, pero aun no sé si voy a quedarme.