Nace una estrella

GABRIELA CORREA GRISALES PUEDE SER LA única artista en el mundo que nace con un contrato debajo del brazo. Eso se debe a que su tía, la actriz Amparo Grisales, está tan embelesada con su sobrina que no sólo la ha llenado de mimos y costosos regalos, como un aderezo de diamantes que le obsequió por su nacimiento, sino también con la promesa de una carrera en televisión. Gracias a Amparo la pequeña, de un mes de nacida, firmará por intermedio de su madre, Patricia Grisales, un contrato con Caracol para actuar en La Sombra del deseo v su nombre aparecerá en los créditos de la novela. Las condiciones del contrato son, entre otras, que la niña sólo podrá ser llamada a grabación tres veces al mes, únicamente en el horario de 10 de la mañana a 3 de la tarde, y para los ensayos el equipo de grabación deberá usar un muñeco. La programadora le pagará por cada aparición una cifra que oscila entre 200.000 y 300.000 pesos al mes. Con el dinero, la madre de Gabriela abrirá una cuenta bancaria a nombre de la pequeña estrella.