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EL ELEGIDO

Cuando menos lo esperaba el gobierno sufrió un revés con la escogencia de Alvaro Tafur <BR>como nuevo magistrado de la Corte Constitucional.

21 de junio de 1999

Algunas veces la aplanadora de la Gran Alianza en el Congreso también falla. Así ocurrió el
martes de la semana pasada cuando los senadores de la República eligieron como nuevo magistrado de la
Corte Constitucional al abogado Alvaro Tafur Galvis. Aunque la terna había sido enviada por la Presidencia de
la República para nadie es un secreto que el candidato de mayores afectos del presidente Andrés Pastrana
era el secretario jurídico del despacho, Jaime Arrubla, quien a la postre sería el gran derrotado de la
noche. Tafur obtuvo 45 votos de los senadores mientras que Arrubla sólo logró 29. La derrota de Arrubla se
convirtió en el segundo revés del gobierno desde que Pastrana asumió la Presidencia. El primero fue la
escogencia de Carlos Ossa Escobar como contralor general pese a que no contaba con el respaldo de los
parlamentarios miembros de la Gran Alianza. Ossa Escobar había sido candidatizado a la Contraloría
General por la mayoría de los magistrados de la Corte Constitucional. La elección de Tafur el martes como
nuevo magistrado de la Corte Constitucional tampoco hacía parte de los planes de los altos
funcionarios del gobierno que se encargaron de aceitar la maquinaria en favor de Arrubla. "Es que no
siempre el atropello funciona. Nosotros estudiamos muy bien las hojas de vida de los candidatos y
decidimos que el mejor de todos era el doctor Tafur", dijo a SEMANA el senador independiente Jaime
Dussán. Alvaro Tafur Galvis es un prestigioso abogado de la Universidad del Rosario, donde se destacó
durante toda su carrera como un estudiante brillante. Ello le permitió ser secretario de la facultad de
derecho mientras era uno de sus alumnos. Una vez culminados sus estudios de especialización en
derecho público y administrativo fue decano de la misma facultad. En 1978 fue elegido rector de la
Universidad por un período de cuatro años, el cual, gracias a su desempeño, se prolongó hasta el año de
1986. Cuando era rector de la Universidad del Rosario le entregó personalmente el diploma de abogado al
hoy presidente Pastrana. Pese a ser distinguido como conservador, quienes lo conocen no lo matriculan
dentro de las filas del pastranismo. Es considerado un conservador independiente, alejado de los
tejemanejes del partido y ajeno a las posiciones sectarias. Tafur reemplaza al ex magistrado liberal
Hernando Herrera Vergara, quien desde hace varios meses se retiró de la corporación. Pero el reto
del nuevo magistrado no será el de hacerle peso al Partido Liberal dentro de la Corte Constitucional. Es
mucho más que eso. Está llamado a tender puentes que permitan un acercamiento entre sus ocho
colegas de sala. En los últimos meses ha hecho carrera en la Corte Constitucional una hipótesis según la
cual un grupo de cinco magistrados ha constituido una especie de bloque para imponer su mayoría a la hora
de tomar decisiones en temas especialmente difíciles. Así ocurrió, por ejemplo, con la votación de la
extradición sin retroactividad. La prueba de fuego para Tafur será en los próximos meses cuando la Corte
Constitucional entre a decidir la suerte de las Unidades de Poder Adquisitivo Constante (Upac) y el futuro de
la distribución de las regalías petroleras. Sólo hasta ese momento se sabrá si él hace parte de los cinco o
si prefiere pertenecer al grupo de los cuatro, contribuyendo a modificar con ello, de manera radical, la
política que ha seguido hasta hoy la Corte Constitucional.