Nación
Habla el ‘hacker’ Andrés Sepúlveda y dice que “Fiscalía de turno” fue responsable de presiones en su contra
Andrés Fernando Sepúlveda aseguró en entrevista con SEMANA que aceptó cargos “presionado” por la Fiscalía.

Seis años y ocho meses de cárcel pagó el llamado hacker Sepúlveda por cuenta de una condena a 10 años que lo dejó como el responsable de las interceptaciones ilegales a los negociadores de paz durante el Gobierno del ex presidente Juan Manuel Santos.
Su salida de la cárcel fue un largo proceso, aún después de cumplir con los requisitos para acceder a la libertad condicional. Completó las tres quintas partes de la condena, su conducta fue excelente en la cárcel, según el Inpec, y además estudió durante su reclusión. Pero nada le alcanzó: la juez 15 de ejecución de penas le negó ese derecho a la libertad.

Finalmente y después de una tutela, un habeas corpus y un llamado de atención a la juez, le concedieron la libertad. Pero ni con la boleta de libertad y sus familiares esperándolo fuera de la cárcel, logró zafarse de los barrotes: hasta el candado que abriría el patio de la cárcel se atascó y debieron romperlo para que al fin quedara en libertad.
Pasó su primera noche en casa de sus padres, después de casi siete años de ausencia y desde su habitación ofreció una entrevista a SEMANA para contar lo que él considera es la “verdad” en el escándalo de “chuzadas” al proceso de paz.
Sepúlveda respondió con evasivas y dejaba en su abogado la responsabilidad de explicar los detalles del proceso y lo qué viene en su futuro judicial y hasta profesional.
Al preguntarle si le quedó pendiente contar algo en su proceso en estos siete años de lío judicial, se remitió a señalar que habló mucho del tema y que en este nuevo capítulo de su vida lo que quiere es pensar en su futuro. ”De ese tema se encargan los abogados, yo pienso en lo de hoy y en lo que viene, porque vienen cosas grandes“, dijo Sepúlveda.
Además, cuando se le preguntó sobre posibles presiones políticas que habrían frenado su salida de la cárcel, la respuesta fue la misma: con mis abogados. “En mi caso personal ya de política no hablo, porque ya pase la página; ahora estoy acá, estoy libre y muy feliz, que de esos tema hablen otros, yo pase la página”, aseguró Sepúlveda manteniendo la posición de no revelar mayores detalles de su proceso.
Lo que sí aceptó el llamado hacker fue que la aceptación de cargos, que derivó en su condena, fue consecuencia de presiones de la “Fiscalía de turno”, que para la fecha de los hechos estaba a cargo de Eduardo Montealegre. “Imagínese usted sin abogado, hacen con usted lo que quieran... Claro, nadie en sus cinco sentidos acepta un concierto para delinquir de una sola persona, esas presiones vinieron de la Fiscalía de turno, de quienes estaban al mando”, dijo Sepúlveda.
Sepúlveda habló de su futuro y de las posibilidades laborales que tiene, según él, con empresas en tecnología que estarían interesadas en sus servicios. ”Son propuestas muy interesantes. Además de ser mi día para compartir en familia, también fue un día de trabajo: tuve varias reuniones con algunas personas, sobre todo para plantear un proyecto de inteligencia artificial. Son propuestas muy serias, muy interesantes, y curiosamente ahora tenemos es que elegir”, aseguró Sepúlveda en entrevista con SEMANA sólo unas horas después de quedar en libertad.
Andrés Fernando Sepúlveda habló también de una propuesta para llevar su vida y su experiencia en todo este proceso judicial a una serie de televisión. ”Incluso mientras proyectábamos esta entrevista nos llegó una propuesta bien interesante que estamos evaluando: concretar un proyecto de una serie que habíamos pensado desde prisión; pero era una propuesta que esperábamos estudiar en libertad, así que estamos en contacto con varios productoras”, dijo Sepúlveda al explicar los proyectos para su futuro.
El Hacker fue prudente en las respuestas, pero dejó abiertas las preguntas para que su equipo de defensa asuma la responsabilidad de contestarlas. En conclusión, parecen tener en agenda un recurso de revisión de la condena.