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| Foto: Harold Abueta

JUSTICIA

Si Mancuso quiere declarar en el caso Uribe, ¿por qué no ha podido?

A pesar de que el 27 de septiembre estaba todo dispuesto para que el exjefe paramilitar fuera escuchado, la diligencia no se realizó. Esta declaración y otras evidencias solicitadas a Estados Unidos provocaron un pulso epistolar entre la Corte Suprema de Justicia de Colombia y el Departamento de Justicia gringo.

22 de octubre de 2019

El pasado 27 de septiembre el país se quedó con los crespos hechos con el anunciado desfile que el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso iba a protagonizar ante el estrado en Colombia. El excomandante fue citado a declarar ante la Corte Suprema de Justicia dentro de la investigación que se le adelanta por presunta manipulación de testigos al expresidente Álvaro Uribe Vélez. La conexión entre la Sala de Instrucción de la corte en Bogotá y la prisión federal de Atlanta fue programada para las dos de la tarde, pero por razones que se desconocen la diligencia no se realizó y su reprogramación está en veremos. 

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SEMANA reveló la tensión que se desató entre ambas autoridades y que tiene como trasfondo la toma de esta evidencia y de otras pruebas que pidió la corte colombiana. Comunicaciones del departamento de justicia de Estados Unidos le piden a los magistrados que expliquen la pertinencia y conducencia de las evidencias solicitadas por el magistrado instructor César Reyes con el caso en cuestión. "Ya se torna irrespetuosa su solicitud en la medida en que la Corte Suprema de Justicia, acatando los parámetros legales previstos y acordados ha formulado una comedida petición de asistencia judicial, sin que tenga por qué entrar a realizar una argumentación en torno a la pertinencia y conducencia de la prueba que estima es necesaria”, respondió el magistrado César Reyes a la insistencia de Estados Unidos de conocer los pormenores.

El documento se niega a ampliar información frente a la razón por la que los magistrados creen que cartas enviadas por Mancuso, el Tuso Sierra y otros extraditados “hablan de Uribe” o “por qué creen que (Diego) Cadena intervino en la elaboración de estos escritos". En cambio, le recuerda a la justicia estadounidense que es "su cargo dar trámite oportuno a la petición de asistencia judicial respetuosa, clara y legalmente formulada”.

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Una muestra más de este tire y afloje se registró este martes, al conocerse las versiones que entregaron Mancuso y voceros de la corte sobre la frustrada diligencia. El abogado Jaime Paeres, quien defiende los intereses del extraditado paramilitar, envió una comunicación a la Corte Suprema de Justicia el 10 de octubre en donde le pide a los magistrados que cuando requieran a Mancuso le copien la notificación con el fin de acompañarlo en la defensa. Precisa que como abogado se ha enterado de las citaciones por cuenta de los medios de comunicación.

Lo clave del documento es que puntualiza que "recientemente lo han sacado (a Mancuso) para audiencias por videoconferencia por aparente requerimiento de la honorable Corte Suprema de Justicia, y finalmente se han cancelado las mismas". Frente a esta explicación que no da detalles, voceros de la corte aseguran que aunque el 27 de septiembre la señal se estableció y los magistrados que tomarían la versión estaban listos esperando el pitazo, finalmente la penitenciaría de Atlanta no se conectó a la diligencia.

Mancuso hace parte de un programa especial de colaboración que facilita a los postulados de Justicia y Paz su comparecencia en los procesos. Aunque el exjefe paramilitar ha tenido tropiezos por lo que considera falta de garantías en su caso, no ve ello como un obstáculo para declarar en el caso contra Uribe. De hecho, Paeres señala que está listo para comparecer ante la corte colombiana.

La defensa del expresidente Uribe solicitó los testimonios de dos exparamilitares para que ampliaran su versión de la visita que en 2009 les hicieron los senadores Piedad Córdoba, Rodrigo Lara e Iván Cepeda. El encuentro, según escribieron los extraditados en cartas que le mandaron a la corte, tenía el objetivo de ofrecerles protección a sus familias –incluyendo desplazamientos a Suiza– para que a cambio dieran información sobre Álvaro Uribe Vélez.

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Además, la corte le ha pedido sin éxito al Departamento de Justicia y al buró de prisiones federales que envíe, entre otros documentos, los registros de visitas de Diego Cadena, el abogado del expresidente Uribe, a las prisiones de Estados Unidos. La solicitud busca precisar si Cadena gestionó los ingresos a las cárceles con aval de alguna autoridad (diplomática, consular o de cualquier naturaleza) y si el abogado hizo sus visitas acompañado de algún funcionario. En concreto, el magistrado Reyes pide especificar las condiciones en que Cadena se entrevistó con Juan Carlos ‘el Tuso’ Sierra, Salvatore Mancuso, Diego Fernando Murillo Bejarano (alias Don Berna), Ramón Quintero Sanclemente (alias RQ) y Diego Pérez Henao (alias Diego Rastrojo).

La queja de la corte se radicó ante el Ministerio de Justicia, canal oficial para estas comunicaciones. SEMANA intentó comunicarse con la ministra Margarita Cabello Blanco para que confirme si el documento fue o no enviado y para conocer una posición oficial del gobierno colombiano pero no se obtuvo respuesta.

De otro lado, del episodio lo único que queda claro por ahora es que tanto la corte en Colombia como Mancuso en Estados Unidos se citaron, se alistaron pero no se encontraron. Y las razones del por qué son un misterio.