La genética y el estilo de vida poco saludable, son algunos factores que pueden causar diabetes. Foto: Getty Images. Montaje SEMANA.
La genética y el estilo de vida poco saludable, son algunos factores que pueden causar diabetes. Foto: Getty Images. Montaje SEMANA. | Foto: Foto: Getty Images. Montaje SEMANA.

Vida Moderna

¿Cómo la diabetes se relaciona con el Alzheimer?

El exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas serios en el organismo.

8 de agosto de 2022

Es importante entender que la diabetes es una enfermedad en la que los niveles de glucosa (azúcar) de la sangre están muy altos. Además, la glucosa proviene de los alimentos que se consume.

Otro tema fundamental para conocer sobre la diabetes, es que “la insulina es una hormona que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles energía”, así lo explica el portal Medline plus.

El cuerpo no produce insulina en la diabetes tipo 1, por otra parte, en la diabetes tipo 2, el cuerpo no produce o no usa la insulina de manera adecuada, la glucosa permanece en la sangre cuando no hay insulina.

La diabetes es una enfermedad que puede causar daño en diferentes partes del organismo, además de enfermedades cardíacas y derrames cerebrales.

De acuerdo a algunas investigaciones que cita el portal Salud 180, “se ha descubierto que el Alzheimer puede deberse a una falta de insulina en el cerebro, de ahí que le llamen diabetes tipo 3 o diabetes cerebral”.

Relacionado con este tema, se tiene registro por los especialistas que los pacientes que sufren de diabetes tipo 2, “presentan pérdida gradual de la memoria”, así lo indican en el mencionado sitio web.

La revista La Ciencia y el Hombre indica que el Alzheimer también tiene cierta relación con el sobrepeso. Los expertos destacan que entre mayor sea el índice de masa corporal (IMC), aumenta la probabilidad de desarrollar la demencia.

“La deficiencia de insulina y la menor sensibilidad a esta hormona produce en el cerebro una serie de alteraciones que son muy similares al Alzheimer y la demencia”, afirma la doctora Suzanne de la Monte, investigadora del Hospital Rhode Island de Estados Unidos, en palabras que recoge Salud 180.

De acuerdo a los investigadores, los ratones que padecen diabetes tuvieron daños primero en la corteza y luego el hipocampo, las cuales son dos regiones cerebrales relacionadas con el aprendizaje y la memoria, así lo explican en el portal Sinc.

“Nos hemos centrado en analizar una relación que cada vez tiene más aceptación dentro de la comunidad científica, hemos analizado mucha bibliografía que muestra una relación muy estrecha entre diabetes y alzhéimer, y en la que se afirma que la diabetes es un factor de riesgo importante para alzhéimer u otro tipo de demencia vascular”, explica en palabras que recoge el sitio web Sinc, Mónica García-Alloza, quien fue una de las autoras del estudio.

La experta también señala que en la investigación encontraron más daños que los mencionados en la corteza y el hipocampo, pues, los ratones también tienen tuvieron limitaciones cognitivas muy importantes, una situación que es muy común en los pacientes que tienen alzhéimer.

La investigadores también destacaron que estos problemas van empeorando a medida que la enfermedad va avanzando. “Cuando la diabetes mellitus está muy cronificada, los problemas cognitivos son muy importantes”, destacó la doctora Monica García-Alloza.

Por otra parte, el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de los Estados Unidos afirma que “la concentración alta de glucosa en la sangre aumenta la posibilidad de desarrollar demencia”. Por esta razón es importante que los pacientes informen al médico si se les están olvidando las cosas, pues la demencia también puede dificultar el tratamiento de la diabetes.

Otra investigación citada por el portal Cuídate Plus, la cual fue realizada por la Universidad de Whasington y el Centro de Investigación Group Health, de Estados Unidos y publicada en la revista New England Journal of Medicine, concluye que los niveles altos de glucemia están asociados con un mayor riesgo de padecer demencia, incluso en personas que no tienen diabetes.