Ismael Cala, escritor y coach colombiano. | Foto: Alexandra Ruiz-semana

Entrevista

¿Cómo lograr las metas y mejorar su vida? El coach Ismael Cala cuenta sus secretos

El coach cubano Ismael Cala habló en SEMANA de su reciente libro Fluir para no sufrir. A través de una larga investigación, cuenta cómo mejorar la vida diaria a partir de ciertos principios.

16 de julio de 2022

Ismael Cala hace algunos años era el periodista estrella de CNN en Español. Sin embargo, decidió dejar el mundo de los medios de comunicación y se dedicó al coaching y a la asesoría para personas y empresas en el continente.

SEMANA: ¿Qué lo trae de nuevo a Bogotá y a Colombia?

Ismael Cala: Vengo por Incubadora de Mentores. Es un proyecto y un evento que realizamos el año pasado por tres días, un concepto de Vilma Núñez, experta en mercadeo digital, mentoría, dueña de una agencia que se llama Convierte Más y una aliada estratégica del grupo Cala Enterprises. En 2019 lanzamos nuestra escuela online Cala Academy, que es una escuela de formación del ser. Yo digo que es la escuela de vida para toda la vida. Luego, Vilma nos invitó a que formáramos mentores. Está muy vigente en el mundo de las corporaciones por la volatilidad que hay en la fuga de talentos, la inestabilidad de la gente y generaciones diversas en los puestos de trabajo. Hoy el tema de la mentoría también se está utilizando como estrategia de fidelización para crear un programa de carrera de largo plazo. Tenemos un grupo diverso en el que han llegado personas desde Argentina, Uruguay, Puerto Rico, Perú y México. También de Estados Unidos han venido algunos, y, por supuesto, la mitad de la sala son colombianos. Además, aproveché para tener contacto con mis lectores a propósito de mi libro Fluir para no sufrir.

Ismael Cala, coach y escritor cubano.
Ismael Cala, coach y escritor cubano. | Foto: Semana

SEMANA: ¿Qué es lo que caracteriza el proceso del coaching que usted realiza?

I.C.: Siento que el liderazgo es lo que define al mundo, lo que define un país, lo que define a una persona, lo que define una familia. Ni siquiera son los recursos o la infraestructura lo que hace verdaderamente próspera y abundante a una nación o a una organización. Tiene que ver con valores, con principios, con alta conciencia, y el liderazgo que nosotros le proponemos al mundo, tanto en coaching como en mentoría, tiene principios, porque cuando los hay se sabe cuál es el fin. Cuando no hay principios, cualquier fin conviene con tal de satisfacer una necesidad, así somos los seres humanos. Entonces, nuestro programa de mentoría y de coaching, tanto para individuos como para organizaciones, es un programa que está basado primero en la formación del ser.

Si no hay ser con conciencia, el hacer es algo que va y viene, y la gente no sabe cómo ubicarlo en un propósito de vida. Hoy tenemos que entender que los jóvenes no están buscando solo una carrera, están buscando una conexión con un propósito, una trascendencia, un legado: cómo puedo ser un agente de cambio en el mundo y de dejarlo un poco mejor de como lo encontré. Descubrimos eso, es una necesidad. También es una necesidad, después de la pandemia, el tema de dar herramientas a los ejecutivos y a los colaboradores en las empresas para lidiar con el cambio. ¿Por qué? Porque el cambio lo decimos fácil, es constante, sí, pero cómo entreno mi cerebro a que tiene que ser un aprendiz constante, a que no me puede boicotear el hecho de que cada seis meses yo tenga que reentrenarme en algo. Ese es el entrenamiento en el cual nosotros hoy estamos colaborando con personas de alto impacto, que, por ejemplo, se dan cuenta de que, aunque son muy efectivos y productivos, están perdiendo salud mental, están perdiendo paz, están perdiendo equilibrio y sienten que se les va de las manos el controlar y gestionar sus emociones y las emociones y expectativas de otros. Es cambiar el paradigma con el que la educación hasta hoy forma al individuo, nos forman hacia afuera y muy poco hacia adentro.

SEMANA: ¿Cuáles son los principios que trae su libro Fluir para no sufrir?

I.C.: Estoy feliz porque este libro lleva cinco años, cinco años desde el 2018 hasta que salió en enero del 2022. Cinco años de preparación de una investigación. No es Ismael Cala solo; me gusta tener un equipo de investigadores multidisciplinarios que avalen y me ayuden en la curaduría de todo el contenido de lo que uno puede incluir en un libro como este y que nos ayuden. Son 11 principios que tienen mucho que ver con algo que se llama biomímesis o biopatía, que es que el ser humano extrae, de las leyes orgánicas universales de la naturaleza y de los principios con los que la naturaleza se maneja, las enseñanzas y las extrapola al ser humano. Uno de los principios es la exponencialidad, que quiere decir que uno puede crecer en constante evolución si tiene la mentalidad correcta.

Colaboración, integridad, espiritualidad, fuerza serena. Cuando hablamos de fuerza serena, es, por ejemplo, cómo el bambú resiste las tempestades, los vientos los doblan, pero luego que el viento se va él vuelve y busca erguido la luz. Los seres humanos tenemos que tener esa fuerza serena, no reaccionar, sino responder. Flexibilidad es otro. Una mente que no es flexible y no está abierta como un paracaídas no funciona bien, y esa es la flexibilidad que invitamos a la gente a tener. Versatilidad es otro de los principios. Otro de ellos es conciencia y elevación, porque sin conciencia los líderes usan el poder para sí mismos; con conciencia, los líderes crean poder para servir a otros. Son 11 principios.

Ismael Cala, coach y escritor cubano.
Ismael Cala, coach y escritor cubano. | Foto: Semana

SEMANA: ¿Por qué decide salirse del periodismo y reconstruir su carrera?

I.C.: Tiene que ver con mi interés de no solo reportar, sino aportar. Muchas veces yo sentía que el periodismo reportaba, pero le faltaba aportar más. Entonces dije: ¿cómo puedo aportar más? Ya con las herramientas que tengo como periodista, teniendo la posibilidad de haber hecho un estudio sociológico como el que me permitió trabajar por 15 años en CNN en Español y casi seis al frente de ese programa de entrevistas en el prime time, para mí esa fue mi mayor maestría sociológica. Era preguntar a diversos tipos de personas, no importa de dónde venían o los títulos, o la fama, o el reconocimiento, o supervivientes de algo, sobrevivientes de una enfermedad, o de un accidente aéreo, a todos les preguntaba no solo sobre los hechos, sino sobre sus conceptos de vida, sus principios de vida: qué es el éxito para ti, la felicidad para ti, qué es bienestar, qué es igualdad, qué es justicia.

Y eso me permitió decir: Ismael, tómate una pausa en el periodismo, porque ya sabiendo, con haber reportado todo lo que pasa en el mundo, puedes hacer algo que pueda aportar a ser un antídoto a lo que estamos reportando, que siempre eran temas de violencia, guerras, calentamiento global. Fíjate por qué pienso que son un antídoto temas de liderazgo como este. Nosotros reportamos violencia, guerras y cambio climático. Yo no soy político y no me interesa la política, pero sí me interesa formar una conciencia como la de Gandhi, por ejemplo. Y lo que digo es: ¿quieres ver un cambio en el mundo? Sé tú el cambio, sé tú el cambio que quieres ver en el mundo. Y, realmente, eso es lo que yo hice con mi carrera y mi vida, yo quiero un mundo mejor, tengo un gran espacio, tengo una gran tribuna, pero creo que Ismael debe conocerse más, debe elevar más su conciencia, y el personaje le está ganando a Ismael. Y, cuando me di cuenta de que el personaje le estaba ganando a la persona, sentí incongruencia. Y digo: mejor me retiro, me estudio, veo quién soy, qué quiero, cuál es el legado que quiero dejar, y, si luego los medios me vuelven a abrir la puerta, ya estoy en el nivel de conciencia donde quiero estar para realizar el aporte que quiero hacer desde el periodismo.