Una sana alimentación es indispensable para mantener la salud del cerebro y evitar síntomas como irritabilidad, nerviosismo, cansancio, falta de atención, fallos de memoria y de concentración. Foto: Gettyimages.
Una sana alimentación es indispensable para mantener la salud del cerebro y evitar síntomas como irritabilidad, nerviosismo, cansancio, falta de atención, fallos de memoria y de concentración. Foto: Gettyimages. | Foto: Foto Gettyimages

Vida moderna

¿Cuál es la mejor hierba para mejorar la memoria y función cognitiva?

La memoria no funciona perfectamente todo el tiempo, por lo que es recomendable realizar ciertos ejercicios para estimularla.

6 de julio de 2022

De acuerdo con MedlinePlus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el cerebro humano es capaz de almacenar la información que aprende cada día mediante diversas experiencias, pero tiene que decidir entre qué detalles vale la pena recordar y cuáles no.

En ese sentido, explica que la memoria es el proceso de almacenamiento para luego recordar la información aprendida. Así mismo, detalla que existen diferentes tipos de memoria, como la de corto plazo, que almacena información por unos pocos segundos o minutos, o la memoria de largo plazo, la cual almacena por un período más largo.

No obstante, precisa que la memoria no siempre funciona a la perfección. Ciertos detalles pueden ser olvidados sin que ello necesariamente implique la existencia de un problema neurológico. Por supuesto, en caso de que los olvidos se vuelvan demasiado constantes o impliquen una importante cantidad de información, es recomendable acudir a un especialista médico para recibir un diagnóstico acertado.

Y es que a medida que se envejece, el recordar algunas cosas puede tomar más tiempo que antes. De hecho, es común que las personas olviden el nombre de uno que otro conocido, o incluso pequeños detalles como dónde dejó algún elemento en su casa, si pagó las facturas o si envió un informe.

MedlinePlus anota que si se trata de una persona mayor que olvida las cosas frecuentemente, es posible que padezca un deterioro cognitivo leve. Por otro lado, si los olvidos son reiterativos e incluyen factores como el camino a casa o su propio nombre, el problema puede estar asociado a enfermedades como el alzhéimer, demencia, lesiones en la cabeza o incluso coágulos y tumores en el cerebro. Es en este tipo de casos es donde resulta indispensable la atención médica especializada.

De igual manera, quienes padecen estas afecciones pueden consumir algunas plantas para mitigar sus efectos. Estas son: el romero, que de acuerdo con el portal Terra, posee aceites naturales mejoran el rendimiento mental.

Se puede consumir en infusión con sus hojas secas, a través de aromaterapia o como condimento en las preparaciones.

Otra opción es el ginseng, el cual mejora el transporte de oxígeno y nutrientes al cerebro, por lo que lo más recomendable es tomarlo a través de infusiones.

Finalmente, está como opción la salvia, la cual posee una amplia variedad de sustancias antioxidantes que contribuyen a la protección de las células cerebrales y a potenciar la memoria.

¿Cómo fortalecer la memoria naturalmente?

Según explicó la experta en neurociencia y profesora de psicología Amishi Jha al medio internacional CNBC, existen ejercicios útiles para fortalecer la memoria sin necesidad de acudir a medicamentos u otro tipo de sustancias.

Los consejos compartidos por la experta implican tres elementos fundamentales: el primero de ellos implica intentar recordar el nombre de una persona o repasar detalles de algún hecho que haya sucedido recientemente. La dinámica es similar a los ejercicios de memoria que hacen los estudiantes cuando intentan memorizar datos como capitales del mundo o fórmulas matemáticas, por ejemplo.

Una posibilidad para desarrollar este ejercicio es sentarse en la noche, antes de ir a dormir, y hacer un repaso por lo hecho durante el día, intentando recordar el máximo de detalles como sea posible. Es durante este proceso donde sugiere su segundo tip: la técnica denominada ‘elaboración’, la cual consiste en usar la total atención del cerebro para conectar nueva información con recuerdos que ya existen, lo cual hace que se vuelvan más complejos y detallados.

Finalmente, viene el proceso llamado ‘consolidación’, donde se busca guardar la información y los recuerdos a largo plazo. “Esto implica formar conexiones entre conjuntos específicos de neuronas que codifican elementos de la memoria, reproduciendo la actividad cerebral específica”, explica la experta.