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La alimentación influye en los síntomas de la depresión y la ansiedad. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Salud

Quienes sufren de depresión deben evitar consumir estos alimentos

Diferentes estudios muestran la relación entre lo que se consume y el funcionamiento del cuerpo.

5 de febrero de 2023

Tratar las afectaciones a la salud mental requiere de varios cambios en los hábitos. Desde asistencia médica, hasta acompañamiento familiar, son claves a la hora de buscar mejoría o curación de enfermedades como la depresión o ansiedad. Y tal vez algo que puede ser muy desconocido es que más allá de terapias, medicamentos o redes de apoyo, eso que cada día se come, puede afectar el funcionamiento del cuerpo y alterar los desequilibrios ya existentes.

En ese sentido, varios estudios científicos respaldan que ciertos tipos de comidas, acentúan los síntomas de estas enfermedades. Por eso recomiendan, disminuir o limitar su consumo.

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El azúcar y los carbohidratos refinados pueden alterar condiciones como la ansiedad y la depresión. | Foto: Getty Images

1. Azúcar y carbohidratos refinados

El portal Viva mi salud explica que “el consumo repetido de azúcar y carbohidratos refinado durante el día propiciará que tus niveles de azúcar en sangre estén subiendo y bajando abruptamente como en una montaña rusa, lo que a su vez puede acarrear alteración en el estado de ánimo y sensación de fatiga”.

Por eso hay que tener en cuenta que el azúcar no solo es el producto granoso y blanco que se compra por libras, sino que también está en otras sustancias como la dextrosa, fructosa, lactosa, maltosa, sacarosa, jarabe de maíz y azúcar invertido.

En lo relacionado con los carbohidratos refinados, estos se encuentran en alimentos como galletas industriales, tortas, cereales de caja, bollería industrial, pan blanco, dulces y gaseosas.

2. Aceites vegetales refinados

En ese caso, explican desde el portal que los aceites vegetales ricos en omega-6 pueden propiciar inflamación dentro del cuerpo, que influiría en la depresión, fatiga y en la efectividad de los tratamientos antidepresivos.

Por eso indican que algunos aceites altamente procesados, que normalmente traen cantidades elevadas de ácidos grasos omega 6 son el aceite de soya, aceite de algodón, aceite de colza, aceite de sésamo, aceite de semilla de uva, aceite de salvado de arroz, aceite de cártamo, aceite de maíz, aceite de girasol

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Los aceites vegetales ricos en omega-6 pueden propiciar inflamación dentro del cuerpo, que influiría en la depresión, fatiga y en la efectividad de los tratamientos antidepresivos. | Foto: Getty Images/iStockphoto

3. Alimentos ultraprocesados

Esta categoría de comida contiene otros ingredientes como el aspartame y algunos colorantes artificiales como la tartrazina, que se han relacionado con alteraciones en el estado de ánimo, sobre todo en personas especialmente sensibles.

“Aunque hacen falta más investigaciones para esclarecer estas conexiones, los alimentos ultraprocesados (con más de 5 ingredientes) no aportan beneficios desde el punto de vista nutricional que contrarresten los potenciales riesgos. Así que prueba disminuyéndolos y revisa cómo te sientes”, explica la plataforma.

4. Alcohol

Sostienen que se puede presentar una especie de comportamiento circular entre depresión, consumir alcohol y síntomas más profundos de la depresión.

“Es así como la coexistencia estos dos trastornos se asocia con una mayor gravedad y un peor pronóstico para ambos. La falta de alcohol no causa ningún problema de salud, así que definitivamente lo mejor que puedes hacer si padeces depresión es alejarte de este tipo de bebidas”, detallan.

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La ingerencia de alcohol afecta el control de enfermedades como la depresión y la ansiedad. | Foto: Getty Images / Spencer Platt / Fotógrafo de plantilla

5. Gluten (si hay sensibilidad)

Si bien, hay investigaciones en curso, ya hay estudios que demuestran que las personas sensibles (no celiacas) al gluten pueden presentar alternaciones extraintestinales como fatiga, dolor de cabeza, ansiedad y alteraciones en los estados de ánimo.

“El gluten está presente en el trigo, el centeno, la cebada y el triticale, y que un diagnóstico de sensibilidad al gluten se basa en los síntomas persistentes y se establece solo después de descartar celiaquía y alergia al trigo (mediante pruebas de laboratorio)”, explican.

Ahora, aunque estas son generalidades, es trascendental entender que por la composición genética cada cuerpo puede reaccionar de una forma diferente a los factores externos. Es decir, que para tratamientos de impacto real y exacto es necesaria el acompañamiento médico, que tenga en cuenta las particularidades de cada persona.