Deforestación en la Serranía de Chiribiquete. Foto: Fiscalía General de la Nación.
Deforestación en la Serranía de Chiribiquete. la Fiscalía General informó de la recuperación de 22 mil hectáreas de bosque en 2021. | Foto: Fiscalía General de la Nación.

Medioambiente

Colombia ha recuperado más de 22 mil hectáreas de bosque en 2021

La Fiscalía informó que se han logrado 228 capturas asociadas a deforestación, minería, entre otros delitos.

18 de diciembre de 2021

Luego de que en 2020 se perdieran más de 75 mil hectáreas de bosque en la Amazonia colombiana, el ministro de ambiente, Carlos Eduardo Correa, en conjunto con otros funcionarios, anunció que en medio de la lucha contra la deforestación en el país, tras las operaciones de las autoridades se habría logrado recuperar más de 22 mil hectáreas de bosque este año.

Los resultados en el avance contra la deforestación del país se presentaron durante la séptima sesión del Consejo Nacional de Lucha Contra la Deforestación (Conaldef), en el que se les hizo seguimiento a las diferentes estrategias que adelanta el Gobierno nacional para la protección de los ecosistemas, liderada por el jefe de cartera, el viceministro Francisco Cruz, la Fiscalía, el Ministerio de Defensa, entre otros.

Tenemos unos resultados maravillosos: comparado con 2020, hemos logrado un 34 % de disminución de la deforestación en el primer semestre de 2021 y eso obedece a un trabajo integral. Vamos a dejar una tendencia de disminución de la deforestación muy significativa. Queremos que el Estado siga teniendo capacidades para continuar protegiendo los ecosistemas colombianos”, explicó el ministro, haciendo referencia a una de las cifras más importantes que en esta materia se han alcanzado en el país.

Cabe resaltar que en noviembre, luego de la Cumbre Climática en Glasgow, Reino Unido, el Gobierno obtuvo una donación de 33,5 millones de dólares para reforzar su política de Estado contra la deforestación, entre otros temas. Incluso, se recuerda que uno de los compromisos internacionales que el país adquirió en la cumbre es la deforestación cero para 2030, así como la reducción de 51 % de la emisión de gases de efecto invernadero.

La directora nacional especializada de Derechos Humanos, Deisy Jaramillo, perteneciente a la Fiscalía General, quien también estaba presente en la conferencia, presentó los resultados en lo que tiene que ver con las capturas de quienes degradan los ecosistemas con respecto a este 2021.

“Ya tenemos identificados más de 100 operativos. En 2021 realizamos 68 operaciones y 228 capturas asociadas a deforestación, minería y delitos contra los recursos naturales, un aumento de 30 % con respecto a 2020″, resaltó la funcionaria, haciendo la comparación con cifras del año pasado.

Estos logros se habrían logrado por la campaña Artemisa, en medio de la cual se habría logrado la recuperación de las 22.628 hectáreas de bosque que estaban siendo degradadas, esto luego de un trabajo de 13 fases, enmarcadas en dicha operación.

En ese mismo sentido, la viceministra de defensa, Sandra Alzate, informó que desde ese ministerio se habría logrado sembrar más de cinco millones de árboles, dentro de la misma campaña Artemisa. Se resalta que para octubre el Ministerio de Ambiente informó de la plantación de 7.251.155 árboles en más de 500 actividades diferentes en todo el territorio nacional, bajo la meta del Gobierno que busca sembrar 180 millones de árboles para 2022.

En medio de la conferencia, se informó que había algunos territorios priorizados para controlar la deforestación en los bosques colombianos, entre las que se encuentran el Marginal de la Selva-Yaguará II, Calamar-Miraflores, Mapiripán, Catatumbo, Nukak, Parque Nacional Natural Chiribiquete, Paramillo, Macarena Norte, Yarí Sur, Putumayo Norte, Serranía de San Lucas, Pacífico Norte y Pacífico Sur.

“Estamos trabajando de manera articulada para recuperar estas áreas degradadas. Las priorizamos basados en la persistencia, verificación, importancia ecológica, entre otros criterios”, explicó el viceministro Francisco Cruz, con respecto a la necesidad de dar prioridad a los territorios en estados críticos.