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Quiénes eran Brenda, Morena y Lara, las tres mujeres que fueron torturadas y asesinadas en el caso que estremece Argentina
El asesinato de las mujeres, que fue transmitido en redes sociales, provocó una ola de indignación en el país.
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Argentina sigue conmocionada por el brutal asesinato de Brenda del Castillo (20 años), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15), tres jóvenes que desaparecieron en La Matanza y cuyos cuerpos fueron encontrados mutilados en Florencio Varela, al sur del Gran Buenos Aires.
Su secuestro, tortura y homicidio, que fue transmitido en directo por redes sociales, ha expuesto la violencia despiadada de las redes de narcotráfico y desató una ola de indignación en todo el país.
Brenda era madre de un niño de apenas un año y, según su familia, dedicaba todos sus esfuerzos a criarlo. Vivía en Ciudad Evita, junto a su madre y sus hermanos, y trabajaba en lo que podía para sostener a su familia: vendía ropa en redes sociales y atendía en un quiosco de 24 horas de su barrio.
“Era una nena buena y ninguna de las tres se merecía terminar como terminaron”, lamentó su madre al conocerse la noticia. Su padre, Leonel, aseguró que Brenda “hacía todo por el hijo. El nene todavía la está esperando. Lamentablemente, no está más”.
Morena, prima de Brenda, también tenía 20 años y vivía en Ciudad Evita con su madre y sus dos hermanos menores. Cercanas en la vida cotidiana, ambas solían acompañarse en sus actividades y compartían un mismo entorno familiar y barrial. La prensa argentina la describe como una joven alegre, que ayudaba a su madre en la crianza de sus hermanos pequeños.

Lara era la menor del grupo. Con solo 15 años, vivía con su abuela y participaba con frecuencia en actividades religiosas junto a su familia en una iglesia evangélica.
Según Infobae, los domingos eran para ella un espacio de reunión familiar y espiritual. Su corta edad y las circunstancias de su asesinato han causado un especial impacto entre los argentinos, que ven en su caso el rostro más cruel de la violencia criminal.
Las tres jóvenes fueron vistas por última vez el 20 de septiembre al subir a una camioneta blanca en La Matanza. Les habían ofrecido asistir a una supuesta ‘fiesta’ en Florencio Varela, con una promesa de dinero, según la investigación. En realidad, cayeron en una emboscada organizada por una banda narcocriminal.
Cámaras de seguridad y el rastreo de sus celulares llevaron a la policía hasta la casa donde fueron encontradas. Allí, las autoridades detuvieron a dos personas limpiando sangre y localizaron los cuerpos enterrados en el jardín.
En total, 12 personas han sido arrestadas hasta ahora, y el principal sospechoso es un joven de 23 años conocido como Pequeño J, señalado como líder de la organización.
Según la pesquisa preliminar, la orden habría surgido tras el robo de droga, presuntamente cocaína, que el grupo atribuyó a las víctimas o a quienes debían custodiarla.
“Pasó algo, vieron algo, ocurrió algo, fueron utilizadas por otros para hacer determinación. No sabemos todavía eso. Lo tenemos que esclarecer porque esto es reciente”, afirmó Alonso sobre las líneas de investigación abiertas.

El triple crimen desató marchas multitudinarias en Buenos Aires y otras ciudades. El colectivo Ni Una Menos convocó movilizaciones bajo el grito de “Justicia para Brenda, Morena y Lara”, denunciando además que “el antifeminismo de Estado y el ajuste son letales”. Miles de personas se movilizaron en plazas y calles con fotos de las tres víctimas, exigiendo justicia.
El gobernador bonaerense Axel Kicillof también se pronunció. “El narcotráfico no conoce de fronteras ni jurisdicciones, y ejerce además todas las formas de la violencia machista”, escribió en X.