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Noemí Sanín, excanciller de Colombia.

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“Con el pueblo de Venezuela todo; con el narcodictador, nada”: Noemí Sanín

La excanciller criticó que hayan otras personas interesadas en interferir con el poder del presidente Duque sobre relaciones internacionales.

23 de octubre de 2021

Después de la polémica sobre el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con el Gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela, varias figuras de la política nacional han salido a opinar sobre el tema en cuestión, entre ellas la excanciller y excandadita presidencial, Noemí Sanín.

En su cuenta de Twitter, la política conservadora criticó que, según ella, se esté intentando interferir con las facultades que tiene el presidente Duque en el manejo de las relaciones internacionales.

“Resulta increíble que se pretenda interferir las facultades constitucionales al presidente @IvanDuque en el manejo de las relaciones Internacionales con Venezuela”, dijo Sanín.

La exembajadora también agregó que “ni se puede, ni conviene! Con el pueblo de Venezuela todo, con el narco dictador nada!”.

Cabe mencionar que el viernes, el propio jefe de Estado desautorizó al Congreso por pretender avanzar en el mejoramiento de las relaciones con Venezuela.

Aunque el presidente del Senado, Juan Diego Gómez, invitó a su homólogo Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Bolivariana, a entablar una comisión y avanzar en un posible diálogo, el presidente Iván Duque lo desautorizó. “Mientras sea presidente no reconoceré la dictadura corrupta y narcotraficante de Nicolás Maduro”, dijo el mandatario.

La senadora María Fernanda Cabal dijo que al mismo tiempo que habían engañado a los senadores.

“Inaudito, después de cuatro horas de debates sobre el proyecto de Ley de Presupuesto se camufla una propuesta para volver a activar las relaciones con Venezuela con la ilegítima Asamblea del chavismo de Maduro. Resulta que esas facultades son exclusivas del Ejecutivo, pero lo hicieron a escondidas porque ni siquiera fue voto uninominal, las camuflaron entre otras dos proposiciones y nadie se dio cuenta”, manifestó Cabal.

La senadora, visiblemente molesta, añadió: “Así no es. Además es inconstitucional, ¿hasta cuándo van a seguir usurpando las facultades del ejecutivo?”.

La senadora, visiblemente molesta, añadió: “Así no es. Además es inconstitucional, ¿hasta cuándo van a seguir usurpando las facultades del ejecutivo?”.

Lo ocurrido demostró una desconexión entre el Congreso y la Casa de Nariño, porque, a juzgar por el cruce de comunicaciones entre los parlamentos de ambas naciones, el de Colombia había definido hasta la hoja de ruta o los temas puntuales que empezaría a abordar: normalización de las relaciones diplomáticas, relaciones comerciales y verificación de las buenas prácticas comerciales entre nuestros países”.

Generó, además, tanta expectativa la carta del Congreso en Colombia que hasta el propio Nicolás Maduro celebró la comunicación desde este país. “Desde esta montaña (…) le damos un aplauso a esta iniciativa tomada por el poder legislativo en Colombia (…) tenemos que regularizar y normalizar las relaciones comerciales, productivas y económicas, normalizar las relaciones consulares, las relaciones diplomáticas”, manifestó el líder bolivariano.

Pese al entusiasmo de Maduro y la desmentida de Iván Duque, el presidente del Senado, Juan Diego Gómez, no tuvo otra alternativa que recular. “Debo informar a los ciudadanos que la proposición 34 aprobada en la plenaria del Senado de ninguna manera sustituye las facultades constitucionales del manejo de las relaciones internacionales en cabeza del presidente Iván Duque, quien ha sido categórico en afirmar que el Estado colombiano no reconoce el gobierno de Nicolás Maduro. Cualquier avance en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas es facultad exclusiva del presidente a través de la Cancillería”, aclaró.

Cabe recordar que las relaciones entre Colombia y Venezuela llevan varios años rotas, pues aunque el presidente Santos intentó arreglarlas con Hugo Chávez, recién se posesionó en 2010, luego sufrieron varios choques entre ambos países, principalmente cuando Nicolás Maduro asumió el poder y tensó la cuerda con Colombia, lo cual ha ocurrido con mayor intensidad desde que Duque es el presidente.