Rinitis es una de las afecciones que se pueden desarrollar por el uso prolongago del aire acondicionado. Foto: Thinkstock

Vida moderna

Las enfermedades que causa a la salud el uso prolongado del aire acondicionado

Es importante regular el uso de este aparato.

9 de agosto de 2022

El aire acondicionado es un electrodoméstico que es muy frecuente en los hogares (y otros lugares) especialmente donde es frecuente que se presenten temperaturas elevadas. Este aparato funciona como una solución para mantener los espacios frescos y evitar el calor.

Sin embargo, es importante saber que su uso incorrecto puede ser perjudicial para la salud. “Lo primero que hay que tener en cuenta es que todas las recomendaciones de expertos determinan que la temperatura más adecuada a la que se deben regular no debe ser inferior a los 24-25 grados. También que no debe incidir de forma directa sobre el cuerpo y que una exposición continuada al mismo puede derivar en afecciones musculares e incluso óseas”, explica la entidad de salud Sanitas.

Algunas de las afecciones que puede causar el uso prolongado del aire acondicionado incluyen:

Ojos secos

Los ojos necesitan lágrimas para mantenerse humectados. Cuando las personas tienen ojos secos significa que el ojo no tiene la capacidad de mantener una capa saludable de lágrimas. Esto puede ocurrir por factores hormonales que provocan que los ojos disminuyan su producción.

Esta afección puede presentarse en uno o ambos ojos, explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación. Algunos de los síntomas incluyen:

  • Una sensación de pinchazo, ardor o picazón en los ojos.
  • Mucosidad viscosa en los ojos o alrededor de estos.
  • Sensibilidad a la luz.
  • Enrojecimiento de los ojos.
  • La sensación de que tienes algo en los ojos.
  • Dificultad para usar lentes de contacto.
  • Dificultad para conducir de noche
  • Ojos llorosos, que es la respuesta del cuerpo a la irritación de la sequedad ocular.
  • Visión borrosa o fatiga ocular.

De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, además del uso prolongado del aire acondicionado, existen otras causas del ojo seco:

  • Exposición al sol.
  • Tabaquismo o ser fumador pasivo.
  • Medicamentos para el resfriado o las alergias.
  • Usar lentes de contacto.
  • Calor o quemaduras químicas.
  • Cirugía previa del ojo.
  • Uso de gotas para los ojos para otras enfermedades oculares.
  • Síndrome de Sjögren.

Afecciones respiratorias

Al estar en una temperatura menor y luego salir a la calle y experimentar una temperatura más elevada se pueden desarrollar afecciones de salud como resfriados, faringitis, rinitis, tos y dolores de cabeza.

Según explica Sanitas “también la sequedad ambiental que generan estos sistemas de climatización interior puede favorecer aún más la aparición de estas afecciones o intensificar las ya existentes, al secar el epitelio bronquial y nasofaríngeo. Y aún más si no se realiza un mantenimiento adecuado de las instalaciones, limpiando filtros y conductos de forma regular”.

Dermatitis

La sequedad ambiental, causada por el uso prolongado del aire acondicionado, puede afectar la piel y provocar irritaciones dérmicas o empeorar afecciones ya existentes, como la dermatitis.

Esta es una afección cutánea que puede presentarse de diferentes formas. “Generalmente, implica piel seca y con comezón o con sarpullido, o puede hacer que la piel se ampolle, exude, forme costras o se descame. Tres tipos comunes de esta afección son la dermatitis atópica (eccema), la dermatitis seborreica y la dermatitis por contacto”, explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Existen diferentes tipos de dermatitis:

  • Dermatitis atópica (eccema)
  • Dermatitis de contacto
  • Dermatitis del pañal
  • Dermatitis seborreica
  • Dermatitis seborreica infantil

Es importante prestar atención a los siguientes síntomas y consultar a un médico inmediatamente en caso de presentarlos:

  • Demasiada molestia en la piel, la cual dificulta dormir o realizar las acciones de la rutina diaria.
  • La piel se vuelve muy sensible y con demasiado dolor.
  • Se sospecha que la piel puede estar infectada.
  • Los síntomas persisten.