COMERCIO ELECTRÓNICO
Linio no le tiene miedo a la competencia
Linio apuesta duro por Colombia: la idea es avanzar de tú a tú con los grandes del comercio electrónico, como Amazon y Alibabá. Así será la estrategia.
Encuentra aquí lo último en Semana
Andrés Robatel, Country Manager de Linio en Colombia, dice que no le teme a la competencia. Por el contrario, se muestra optimista por la llegada de más actores. La compañía durante la pandemia no solo aumentó su nivel de ventas, sino que incorporó más tecnología e incrementó sus capacidades.
Tendencias
“En Colombia ya tenemos 560 empleados. Gran parte del crecimiento en la nómina se dio en los últimos meses y tiene que ver con que Linio le apostó al país como centro para abrir sus operaciones regionales de atención al cliente”, señala.
Y esa apuesta va en serio: “La consolidación de bodegas de Linio y Falabella nos permite avanzar en un concepto de centro de distribución totalmente tecnificado, con la tecnología más avanzada. Así, no tenemos nada que envidiarle a Alibaba o a Amazon”.
Es claro que la pandemia fue un apalancador de este proceso. Antes de la llegada del virus, Linio crecía 70 por ciento. Con la pandemia lo duplicaron. Por eso, vieron que era posible aumentar sus capacidades, y en 2021 las instalaciones para almacenamiento y logística se ampliarán de 1.200 a 12.000 metros cuadrados.
Según Robatel, hay dos factores clave para explicar esta decisión: primero, cada vez hay más consumidores nuevos que ganan confianza en el canal y empiezan a volcarse a las transacciones online. Segundo, la recurrencia: “El que tiene una buena experiencia online vuelve”. Entonces, es necesario prepararse para responder.
Tanto los consumidores como los empresarios le perdieron el miedo a transar por internet. Actualmente, Linio cuenta con 3.300 compañías activas en el sitio, y lo interesante es que no hay patrón en cuanto al sector o los productos que ofrecen: desde todas partes de la economía aparecen unidades productivas interesadas en el canal virtual.
Hasta los grandes del comercio físico se le están midiendo. “En los últimos meses, tuvimos un incremento de empresas interesadas en nuestros servicios. Ese es el caso de Miniso, una firma que en su modelo de negocio tradicional depende mucho de la locación del comercio físico. Allá entendieron la necesidad de reconvertirse rápido y, por eso, adelantamos con ellos un modelo en el que les ofrecimos toda la logística de sus inventarios para tenerlos disponibles para su propia tienda online exitosa”, dice el gerente de Linio; y precisa que en la pandemia muchas pymes también buscaron este tipo de soluciones.
Linio forma parte del grupo empresarial Falabella desde 2018 y esto también le ha dado posibilidades de crecimiento, porque a través de los establecimientos Falabella y Homecenter –parte del mismo grupo empresarial– se desarrolla el concepto de click and collect: comprar online y recoger en tienda física.
En resumen, la apuesta fuerte por Colombia se da en cuatro frentes. Primero, el fortalecimiento de la oferta de productos con el reclutamiento de más empresas con su portafolio en el market place. En segunda instancia, Linio ha hecho y seguirá haciendo inversiones en tecnología. La estrategia también apunta, en tercer lugar, a una oferta más amplia de pagos y financiamiento tanto al vendedor como al comprador. Finalmente, como cuarto punto, una de las principales inversiones es en el frente de atención al cliente: prácticamente se triplicó en siete meses la cantidad de personas a cargo de estas tareas.
Robatel concluye: “La industria maduró mucho en esta pandemia. Todo lo que aprendimos en Colombia sobre e-commerce se refleja en números excepcionales y en crecimiento de las ventas. Pero el principal aprendizaje es que mucha gente nos tomó como un canal serio y aprendieron a comprar online. Eso es algo que vale oro y que no se va a borrar con unos meses de recesión o de dificultad económica”.