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Dom Phillips de 57 años se encuentra desparecido en Brasil. Foto: Joao LAET / AFP
Dom Phillips, de 57 años, se encuentra desaparecido en Brasil. | Foto: AFP

Amazonas

Crece la preocupación internacional por investigadores desaparecidos en el Amazonas

Los dos periodistas desaparecieron mientras buscaban entrevistarse con representantes indígenas de la región. Uno de ellos había sido amenazado por grupos armados.

8 de junio de 2022

Aumenta la preocupación por la suerte de un periodista británico y un experto en asuntos indígenas desaparecidos el domingo en la selva amazónica mientras realizaban, según el presidente Jair Bolsonaro, una “aventura no recomendable”.

Luego de unas primeras búsquedas infructuosas, la Policía Federal (PF), el Ejército y la Marina reanudaron el martes las operaciones para hallar a Dom Phillips, de 57 años y colaborador del diario británico The Guardian, desaparecido junto al experto Bruno Pereira, de 41 años, mientras realizaban una investigación para un libro en el Valle Javari, en el estado de Amazonas (norte).

Se trata de una tierra indígena de difícil acceso, cercana a la frontera con Perú y Colombia, y golpeada por la presencia de mineros y madereros ilegales que intentan invadir tierras para explotarlas.

Tres grupos de la región defensores de los derechos indígenas aseguraron en una nota conjunta que solo estaban actuando seis policías del estado, pidiendo al gobierno más recursos, como helicópteros.

Bolsonaro critica la “aventura”

Bolsonaro calificó de “aventura no recomendable” a la expedición. “Dos personas en una embarcación, en una región como aquella, completamente salvaje, es una aventura que no es recomendable hacer. Puede pasar cualquier cosa”, señaló en una entrevista con la cadena SBT News.

“Puede ser un accidente, puede que hayan sido ejecutados”, añadió, y dijo esperar “que sean hallados” pronto.

Para WWF Brasil, el Gobierno “tardó mucho en actuar” a la hora de movilizar las fuerzas. “La Amazonía se está volviendo una tierra sin ley”, deploró la organización en un comunicado.

Phillips y Pereira habían viajado en barca al lago Jaburu y debían volver a la ciudad de Atalaia do Norte la mañana del domingo.

Ambos buscaban entrevistar a pobladores indígenas, para lo que llegaron al lago Jaburu el viernes de noche. Comenzaron su viaje de regreso la madrugada del domingo, deteniéndose en la comunidad de Sao Rafael, donde debían encontrar a un líder local.

Como este no llegó, los dos hombres continuaron hasta Atalaia do Norte. La última vez que se les vio fue en Sao Gabriel, cerca de Sao Rafael.

“Estoy entrando en el bosque mañana. Dentro de unos 15 días o menos, incluso, estoy por Atalaia do Norte”, dijo el experto indigenista en un audio sin fecha publicado el martes por O Globo.

Phillips y Pereira viajaban en una embarcación nueva con 70 litros de gasolina y usaban equipos de comunicación satelital. La policía tomó declaración el lunes a dos personas, aparentemente las últimas en verlos, confirmó una fuente de la Policía Federal a la AFP.

Pereira, experto de la agencia gubernamental de asuntos indígenas de Brasil (Funai), ha sido amenazado antes por madereros y mineros ilegales.

Pedidos desesperados

La brasileña Alessandra Sampaio, esposa del periodista, pidió entre lágrimas “intensificar las búsquedas”, en un video divulgado por TV Bahia. “Aunque no encuentre al amor de mi vida vivo, tienen que ser hallados”, imploró.

La hermana del periodista, Sian Phillips, solicitó en un video en redes sociales a las autoridades “que hagan todo lo posible (...). El tiempo es crucial”.

La familia de Pereira también destacó con angustia que “el tiempo es clave (...), especialmente si están heridos”.

Además, unos 40 corresponsales y amigos de Phillips, quien también ha publicado en The New York Times y The Washington Post, expresaron en una carta en O Globo que se niegan “a pensar lo peor” y pidieron ampliar “inmediatamente” los esfuerzos.

En esta tierra indígena, a la que Phillips ya había viajado con Pereira en 2018, viven 6.300 individuos de 26 grupos diferentes, 19 de ellos aislados, según la ONG Instituto Socioambiental.

La violencia escaló en los últimos años. La base local de la Funai, para proteger y asistir a los indígenas, sufrió varios ataques desde 2018, incluyendo el asesinato en 2019 de un empleado.

Para Fiona Watson, directora de investigaciones del grupo Survival International, la operación de rescate en esta zona de selva tropical densa es “inmensamente desafiante”.

*Con información de AFP.