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Sumergible Titán: tras expedición que acabó en tragedia, esto investigará la Guardia Costera de Estados Unidos; ¿habrá sanciones penales?
El jueves 22 de junio se confirmó que no había sobrevivientes de la expedición al Titanic.
La Guardia Costera de Estados Unidos anunció que abrirá una investigación para indagar en detalles sobre cómo se desencadenó la implosión que destruyó al sumergible Titán y acabó con la vida de sus cinco tripulantes. Los decesos se confirmaron el jueves de la semana pasada, tras varios días de búsqueda.
Las autoridades informaron que se coordinó una junta de investigación marina (MBI) por la tragedia en el Atlántico norte, que captó la atención internacional desde que se confirmó la pérdida de contacto con el vehículo marítimo.
“Mi objetivo principal es evitar un incidente similar, haciendo las recomendaciones necesarias para mejorar la seguridad del dominio marítimo en todo el mundo”, dijo Jason Neubauer, jefe de investigación de la Guardia Costera.
“El MBI ya está en su fase inicial de recolección de pruebas, incluyendo operaciones de rescate de escombros en el lugar del incidente”, añadió. New York Post, tras citar a CNN, señaló que se espera examinar grabaciones de voz y “otros sistemas del barco que contienen información útil”
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Neubauer aseguró que la pesquisa estadounidense podría llevar a sugerencias sobre la posible búsqueda de sanciones civiles o penales “si fuera necesario”. Titán fue reportado como desaparecido el domingo 18 de junio en la madrugada, cinco días antes de que se hallaran rastros de la nave.
Un campo de escombros fue encontrado en las profundidades, a 500 metros de la proa del Titanic, que se encuentra a casi 4 kilómetros de la superficie del océano y a unos 600 kilómetros de la costa de Terranova, Canadá.
El buque de carga Polar Prince, con bandera canadiense, remolcó el Titán hacia el mar, pero perdió contacto menos de dos horas luego de que el sumergible se aventurara al icónico barco naufragado en 1912. El anuncio de la implosión puso fin a una operación multinacional.
“Un campo de restos”
“Estimamos que nuestro jefe Stockton Rush, Shahzada Dawood y su hijo Suleman, Hamish Harding y Paul-Henri Nargeolet desafortunadamente están muertos”, lamentó en un comunicado la empresa OceanGate Expeditions.
“Un campo de restos” hallado por robots de búsqueda cerca del pecio del mítico transatlántico, a casi 4.000 metros de profundidad, “son consistentes con una implosión” del sumergible, anunció por su parte el contraalmirante del servicio de Guardacostas estadounidense John Mauger.
Mencionó también una “pérdida catastrófica de presión” en el navío como probable causa del accidente. Poco después de confirmarse la tragedia, el diario Wall Street Journal reveló que la Marina estadounidense había detectado una señal que apuntaba a lo ocurrido con el sumergible, poco después de su desaparición.
“Estos hombres eran verdaderos exploradores que compartían un marcado espíritu aventurero y una profunda pasión por explorar y proteger los océanos del mundo”, dijo en el comunicado OceanGate, al lamentar la muerte de los tripulantes.
Una búsqueda hasta el final
Con aviones C-130 así como P3 y naves dotadas de robots submarinos, Estados Unidos y Canadá habían puesto en marcha hasta la mañana del jueves los últimos esfuerzos para continuar la búsqueda en sus costas, donde se encontraba el Polar Prince, barco nodriza del sumergible de turismo.
En la superficie, la zona de búsqueda abarcaba unos 20.000 kilómetros cuadrados. Desde Francia partió también el Atalante, una nave del Instituto de investigación para la explotación del mar (Ifremer), con un robot capaz de llegar hasta el recóndito lugar donde está el Titanic.
En medio de las búsquedas durante la semana, surgieron informaciones que comprometían a Oceangate sobre posibles negligencias técnicas del sumergible. Una demanda civil en Estados Unidos en 2018 muestra que un exdirectivo de la empresa, David Lochridge, habría sido despedido luego de expresar dudas sobre la seguridad del vehículo marítimo.
*Con información de AFP.