Estados Unidos
La Navidad más vigilada del país: así se consigue entrar al tour navideño de la Casa Blanca
La residencia presidencial exhibe más de medio centenar de árboles, miles de luces y una ruta rediseñada.
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Con el Ala Este demolida y un nuevo recorrido que obliga a entrar por el Pórtico Norte, el tradicional tour navideño de la Casa Blanca vuelve a abrirse al público entre cupos limitados, luces doradas y el sello inconfundible de Melania Trump, que este año impone el lema Home Is Where the Heart Is (El hogar está donde reside el corazón).
La tradicional visita navideña por la Casa Blanca
De acuerdo con lo que se registra en La Nación, en diciembre de 2025, la Casa Blanca, también conocida como la Casa del Pueblo, vuelve a abrir sus puertas al público con un motivo especial: la tradicional visita navideña, redecorada bajo la mirada de la primera dama Melania Trump.
Este año, con el lema Home Is Where the Heart Is (El hogar está donde reside el corazón), el emblemático edificio revive su espíritu festivo, adaptando sus espacios y su recorrido a los cambios recientes en su estructura.
Los visitantes ya pueden solicitar su ingreso, pero el acceso no es directo, pues quienes desean conocer las decoraciones deben hacerlo a través de un congresista, representante o senador de Estados Unidos, contactando la centralita del Capitolio o consultando su portal oficial.
Aquellos que provienen del extranjero, en tanto, deben comunicarse a través de su embajada en Washington D. C.

¿Qué ver en el tour por la Casa Blanca en Navidad?
Según White House Christmas Tours, la ornamentación supera lo habitual y este año se colocaron 75 coronas con lazos rojos, 51 árboles de Navidad, generosas guirnaldas, más de 2.000 tiras de luces, casi 7.620 metros de cinta y miles de estrellas doradas.
Por su parte, el tradicional Árbol de Navidad oficial, un abeto con color proveniente de Michigan, adorna la Sala Azul, decorado con detalles que homenajean a las familias Gold Star y los símbolos florales y aviares de los estados.
La duración estimada del recorrido es de unos 45 minutos, en condiciones normales, y suele realizarse entre martes y sábado. Pero, como advierte la administración, las fechas pueden cambiar por clima, motivos de seguridad o eventos oficiales imprevistos.
Más allá de la experiencia visual, el tour de este año funciona como un gesto simbólico: la Casa Blanca se presenta renovada, en lo físico y en lo ceremonial, con decoraciones que combinan tradición, patriotismo y un mensaje de hogar, unidad y patriotismo.
La reciente demolición del Ala Este para dar paso a la construcción de un nuevo salón de baile oficial bajo la administración de Donald J. Trump obligó a redefinir el recorrido de la visita.
Ahora, el acceso y la salida se realizan por el Pórtico Norte, con un trayecto que incluye la Sala Azul, la Sala Verde, la Sala Roja y el Comedor de Estado.
Para quienes logran conseguir un cupo, la visita promete ser tanto una postal navideña como una ocasión para reflexionar sobre historia, nación y pertenencia.


