Home

Nación

Artículo

Lara y Benedetti juntaron sus proyectos para sacar esta iniciativa adelante.

POLÍTICA

Lara y Benedetti se unen en un proyecto que busca regular las encuestas

Los congresistas radicaron una iniciativa para fijar reglas claras con los estudios de opinión pública. Se plantea una comisión técnica que vigile el cumplimiento de unos requisitos y se garantice transparencia.

18 de agosto de 2020

Cada cierto tiempo se publican encuestas, sondeos o estudios de opinión pública que sirven para evidenciar el panorama político, social y económico del país. En campañas electorales, las encuestas miden la favorabilidad y la intención de votos de los protagonistas y se ha determinado que los resultados inciden en la toma de decisión de las personas. 

Por eso desde hace tiempo se ha discutido, y la misma ciudadanía se pregunta, qué tan confiables son las encuestas y qué intereses realmente puede haber detrás de ellas. También, los mismos políticos han alimentado sus prevenciones, principalmente cuando las cifras no les convienen.

Por esa razón, los senadores Rodrigo Lara y Armando Benedetti unieron dos proyectos que cada uno tenía por su lado para buscar regular la forma en la que se hacen las encuestas y los sondeos en el país. El objetivo es que haya reglas claras en calidad, rigurosidad, realización y financiación de las muestras, y sobre todo, evidenciar cuáles pueden ser más confliables y cuáles no. 

Lara explicó que el principal objetivo del proyecto es establecer tres categorías. La primera hace referencia a los sondeos, que son consultas de opinión que no cumplen con determinadas características y ante los cuales se debe hacer claridad que no son de carácter científico.

La segunda categoría es la encuesta, la cual es una investigación de carácter científico que tiene una cuantificación estadística que se ve reflejada en la percepción de una parte de la población.

Y por último está la gran encuesta, que es un muestreo más grande de la percepción del país y que según el proyecto debe contar con menos del 2 por ciento de margen de error y una confianza del 95 por ciento.

En el caso de la gran encuesta, esta tendría requisitos adicionales. Por ejemplo, cuando sean investigaciones de preferencias políticas relacionadas con mecanismos de participación ciudadana, la muestra deberá incluir municipios o distritos iguales o superiores a una población de 800.000 habitantes y municipios, pequeños, medianos y grandes de todas las regiones del país.

Cuando se trate de investigaciones de carácter regional o departamental, la muestra deberá incluir a la capital del departamento y como mínimo al 20 por ciento de los municipios. En el caso de Bogotá, se debe garantizar que en la distribución de la muestra participen personas de todas las localidades.

Así mismo, se establece que todas las encuestas deberán ir acompañadas de información con relación a las metodologías empleadas, el número de personas consultadas, la técnica de recolección, el área geográfica, el margen de error, el muestreo y las contraprestaciones que hayan sido necesarias.

Por otro lado, se pide que se estipule el propósito de la muestra, la persona jurídica que la hizo, la persona natural que la encargó, la tasa de rechazo y la tasa de respuesta.

Según los congresistas, para nadie es un secreto que muchas encuestas están influenciadas por personas o grupos interesados en generar cierta opinión, por lo que se quiere dar transparencia.

Un punto fundamental del proyecto es que se creará una comisión técnica que se encargue de hacer el debido control y vigilancia de estos requisitos previo a la publicación de la encuesta.

La comisión estará conformada por un miembro delegado del Gobierno Nacional, uno de la Registraduría, otro del CNE, un miembro de los partidos de oposición, tres miembros delegados por decanos de universidades con programas de estadística y dos miembros de los medios de comunicación, uno en representación de los nacionales y otro de los regionales.

Lara dice que la idea es que las encuestas dejen de ser un instrumento de manipulación de la intención del voto. "En los últimos años, ha existido una verdadera indignación por la imprecisión de los instrumentos estadísticos utilizados para conocer las preferencias políticas del electorado. Esto ha sembrado sospechas sobre la transparencia y fiabilidad de estos estudios en los que se basan muchas personas a la hora de decidir su voto. Por eso tenemos el imperativo de garantizar la calidad de la información, que muchos ciudadanos utilizan para tomar sus decisiones políticas", dijo el senador de Cambio Radical.

Por su parte, Benedetti menciona que otro de los problemas de las encuestadoras es que muchas de estas empresas se crean con meses de anterioridad a las elecciones para influir en los resultados y muchas veces están llegan a ser financiadas por intereses particulares. Por eso, el proyecto busca combatir esta informalidad y dar más transparencia.

“Hay una cantidad de firmas o empresas que se crean cinco meses antes de las elecciones, solamente con el objetivo de distorsionar o dar una cantidad de datos sin ninguna revisión técnica o científica de lo que se está haciendo. Si hay algo que nos ha enseñado la democracia, es que una firma o una encuesta mal hecha puede distorsionar cualquier resultado para las elecciones”, aseguró el senador del partido de La U.

Benedetti también propone que se puedan entregar a la comisión técnica los datos de la entrevista 24 horas antes. Esto ha generado cierta duda sobre las empresas encuestadoras previniendo que se filtre alguna información. Sin embargo, los senadores dicen que esta junta tendrá todas las garantías y vigilancia para brindar transparencia y evitar que esto ocurra.

Con el proyecto, los senadores dicen que atacan a las empresas que realizan encuestas de mala calidad y que hoy en día no tienen una regulación clara, sino que simplemente deben enviar al CNE una información requerida fundamental.

Según establece el organismo electoral, “solo podrán publicar las encuestas de aquellas firmas que estén debidamente inscritas ante el CNE, las cuales deberán demostrar, al momento de su registro, la experiencia mínima de un año, representación legal y tres constancias de empresas o usuarios que certifiquen la idoneidad de su trabajo”.

Por ello, el principal cambio será la comisión técnica que se creará en la cual participarán los directos implicados e interesados en estas muestras y quienes deberán velar porque la información presentada sea lo más fiel a la realidad. Y que así la ciudadanía pueda confiar más en estas encuestas que influyen en la preferencia de voto en elecciones principalmente.

¿Qué es lo más sorprendente de la encuesta? ¿Qué pasa con la imagen de Uribe? | El poder