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Concierto

Plan de viernes en la noche: presenciar a la OFB con Santiago Cañón-Valencia y el director Emil Tabakov de Bulgaria

Con boletas desde 40.000 pesos, el espectáculo reúne verdaderas potencias en una noche que promete ser memorable en el Teatro Mayor.

27 de agosto de 2021

Conmemorando los 100 años de fallecido del compositor Camille Saint-Saëns, la Orquesta Filarmónica de Bogotá, interpretará el “Cello concerto Nº 1 en la menor, Op. 33” junto al reconocido violonchelista colombiano Santiago Cañón-Valencia, que más que niño prodigio es ya un prodigio y punto. La Orquesta estará dirigida por el maestro Emil Tabakov de Bulgaria, e interpretará un repertorio con distintas obras de compositores como Rossini, con la obertura de “L’Italiana in Algeri”, Edward Elgar con “Salut d’amour” y Gabriel Fauré con “Pavane” y “Masques et Bergamasques”.

Sobre el programa

Las notas de Carolina Conti sobre el programa de esta noche y Camille Saint-Saëns.

En 1829 Gioachino Rossini tenía 37 años, había compuesto unas cuarenta óperas y era uno de los músicos más aclamados e influyentes en Europa. Fue cuando decidió retirarse. De las óperas que compuso solo algunas se siguen representando hoy, pero sus oberturas sí se interpretan con frecuencia. La obertura era una pieza orquestal que abría el espectáculo y recogía algunos de los temas más importantes de la ópera. Con sus oberturas Rossini hizo un aporte importante al desarrollo de la orquesta, pues la utilizó no solo como acompañamiento de los cantantes sino como un elemento dramático fundamental e independiente. La italiana en Argel fue una de las óperas más exitosas de Rossini en su época hasta que fue opacada por El barbero de Sevilla. Su obertura, sin embargo, es una de las más interpretadas en conciertos sinfónicos.

Compositor multifacético, Camille Saint-Saëns contribuyó prácticamente a todos los géneros musicales franceses. Organista, escritor, crítico, tenía además serias aficiones en otros campos como la arqueología, las ciencias naturales, la filosofía, el arte y la astronomía. Saint-Saëns fue uno de los fundadores de la Sociedad Nacional de Música creada en 1871 como un espacio para promover la creación musical y reavivar el patriotismo tras la derrota de Francia por parte de Prusia. Con ese propósito se crearon orquestas, se organizaron conciertos y se comisionaron obras. Para nutrir el repertorio de la sociedad Saint Säens compuso en 1782 el Concierto para violonchelo n˚ 1 en la menor Op. 33. La obra está dedicada al violonchelista belga Auguste Tolbecque, profesor del Conservatorio de Marsella, quien la estrenó en París en 1873. El concierto inicia con un acorde solo en la orquesta y enseguida el violonchelo presenta los temas principales. El primero, apasionado y virtuoso. aparecerá como hilo conductor de toda la obra. La construcción del concierto en tres movimientos que se interpretan sin pausa, resultó toda una novedad.

Gracias a Edward Elgar, la música inglesa tuvo un importante renacimiento en la transición del siglo XIX al XX. En su obra se destacan sus oratorios, su concierto para violonchelo, las Variaciones Enigma y la famosísima marcha Pompa y circunstancia, entre otras. En 1886 Elgar aceptó dar clases de piano a Caroline Alice Roberts, una fascinante mujer, ocho años mayor que él, que tenía una excelente educación. Interpretaba el piano, dominaba varios idiomas y escribía poesía y prosa. El maestro y la alumna se enamoraron y, a pesar de todos los obstáculos que tuvieron que sortear, se comprometieron en 1888. Como regalo de compromiso, ella le regaló a Elgar el poema Love’s Grace de su autoría. Por su parte él compuso para la misma ocasión la pieza Liebesgrüss para piano y violín que poco después fue publicada como Salut d’amour Op. 12. Elgar también realizó una versión para piano solo y otra para orquesta. Elgar y Alice se casaron discretamente en Londres el 8 de mayo de 1889 y tuvieron un matrimonio feliz. Salut d’amour se convirtió en una de las piezas más interpretadas del compositor por su encanto, su dulzura y su sencillez. Alumno y amigo de Saint-Säens, Gabriel Fauré fue uno de los músicos más influyentes en Francia a finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX. Compositor, pianista, organista y profesor, supo crear un estilo que nace del lenguaje romántico y se adentra en el modernismo. Sus mayores aportes los hizo en la música de cámara, en el género de la canción y en el repertorio para piano.

Sin embargo, cuenta con obras corales, orquestales y para la escena, pero en ellas domina el carácter íntimo. El estilo de Fauré se caracteriza por una sorprendente belleza melódica y por atmósferas serenas y profundamente emotivas. El mejor ejemplo de esto es su Pavana Op. 50 que está inspirada en una danza de ritmo tranquilo y coreografía sencilla que fue muy popular en las cortes europeas de los siglos XVI y XVII. El compositor francés la escribió para pequeña orquesta y un año más tarde escribió una parte opcional para coro con texto del conde de Montesquiou-Fezensac. Por su belleza melódica, elegancia y emocionante melancolía, esta es una de las obras más populares del compositor francés.

En 1918, por sugerencia de Saint Saëns, el príncipe Alberto de Mónaco le comisionó a Fauré la música para una obra escénica que evocara la atmósfera de la Commedia dell’arte, es decir, del teatro profano italiano del siglo XVI. Fauré tenía entonces 73 años y pensó en Las Fiestas Galantes, un género pictórico desarrollado por el pintor barroco francés Antoine Watteau, que muestra escenas bucólicas de cortejos amorosos o de juegos campestres, muchas veces tomados de las situaciones de la comedia italiana. E. H. Gombrich en su libro La historia del arte describe así la obra de Watteau: “Empezó a pintar sus propias visiones de la vida divorciadas de todo lo obligado y trivial, un ensueño de alegres excursiones por y de parques maravillosos, en los que no llueve nunca, de reuniones musicales donde son bellas todas las damas y graciosos todos los galanes, una sociedad en la que todos están vestidos con sedas rutilantes sin que parezcan llamativas y donde la vida de pastores y pastoras se diría una sucesión de minuetos”. En estas pinturas también se inspiró Paul Verlaine quien escribió una colección de poemas con el mismo nombre de Las fiestas galantes. El nombre de Masques et Bergamasques lo tomó Fauré de uno de los poemas de esa colección. La obra contó con el director de teatro Raoul Gunsbourg y el libretista René Fauchois Se trata de un divertimento en un acto que muestra a Arlequín, Pantalón y Colombina, típicos personajes de la Commedia dell’arte, que aparecen ahora como espectadores en un entorno habitual de fiesta galante de Watteau en la isla de Citera, donde las damas y los caballeros que antes los han aplaudido ahora los entretienen con sus comportamientos. Fauré utilizó obras que había compuesto antes y organizó ocho movimientos que incluyen números orquestales, corales y vocales, incluida la hermosísima Pavana que acabamos de escuchar. A partir de esa música, Fauré arregló una suite de cuatro movimientos que es la que cierra el concierto de hoy.

*Hoy, viernes 27 de agosto, el concierto tendrá lugar a las 8 de la noche en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, con boletería disponible en TuBoleta.com o en las taquillas del teatro.