Colombia está atada de pies y manos para maniobrar el Presupuesto del 2022

Cuando al interior de un hogar colombiano hay dificultades económicas, los integrantes de la familia mueven fichas para sortear la situación, pero en el caso del Estado, el Presupuesto de gastos es inflexible en un 83%, según cuentas preliminares realizadas por el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, previo a la sesión que tendrá lugar este martes en las comisiones económicas del Congreso, donde se aprobará el monto de la carta financiera del país para el 2022.

De la cifra total, aforada en $350,4 billones, $78 billones se irán en el pago de la deuda pública. Esa cifra es el equivalente al 22,2% del total presupuestado para el próximo año, y es el pedazo del cual, más se pegan los parlamentarios para mover las asignaciones, de manera que puedan darle un poco más de recursos a otros sectores que requieren inversiones inaplazables.

En Colombia, del Presupuesto General, que es aportado en su mayoría por los contribuyentes, a través de los impuestos, se destinarán $51,9 billones, es decir, el 14,8% del total, para cubrir los gastos en pensiones, otro de los temas inflexibles, pues, constitucionalmente, no se pueden dejar de pagar las mesadas a los jubilados.

El aseguramiento en salud demandará recursos por $26,5 billones, gasto que es igualmente ‘impajaritable’.

El costo de la nómina pública

Para Colombia, tener un poco más de 1 millón de empleados en la nómina pública requerirá en 2022 de $37,8 billones, presupuesto que se va en pago de salarios, incrementos, prestaciones sociales y otras prebendas establecidas para el bienestar de los empleados públicos.

En la contienda electoral que se dará en el próximo año, para elegir los integrantes del Congreso y el sucesor del presidente Iván Duque, se destinará una suma de $1,6 billones.

Otros gastos inamovibles

De acuerdo con las cuentas que hasta ahora lleva el Presupuesto 2022, sin que aún haya tenido ni un solo debate en el Congreso, más allá de escuchar a todos los sectores que hacen parte de la torta de los recursos públicos, $20,9 billones se requerirán para cubrir las vigencias futuras; la reparación de víctimas tendrá una asignación de $16,4 billones, y gastos del magisterio, entre otros, a través del Fomag, demandarán $7,1 billones. También está prevista una asinganción de $2,7 billones para el Fepc (Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles).

No queda casi nada

En total, de los $350,4 billones que contiene el Presupuesto de 2022, $292,5 billones son gastos inflexibles, es decir, el 83% del presupuestos. Como si fuera poco, de los $57,9 billones restantes, que podrían considerarse como manejables para hacer gastos de inversión necesarios en un Estado, habrá que disponer de $11 billones que se requieren para los programas sociales, lo que implica que, en el fondo, también son inflexibles.

Esas son las cuentas que hacen parte del Presupuesto 2022, alrededor del cual, se hará en este martes la votación del monto, pues, según las normas de aprobación del presupuesto, dicha aprobación no puede ir más allá del 15 de septiembre.

Entre tanto, las comisiones económicas deberán darle el aval a la ponencia definitiva del proyecto de Presupuesto 2022, antes del 25 de septiembre.