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“A Aida Merlano querían secuestrarla, asesinarla y mostrar que había huido a Barbados”
SEMANA conoció detalles, en primicia, de la denuncia radicada por la excongresista en contra de la casa Char y los Gerlein.
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Aida Merlano sigue generando revuelo tras su versión ante la Corte Suprema. Por un lado, en un documento de 13 páginas, la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia compulsó copias ante la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes y ante la Fiscalía General para que se adelanten las respectivas investigaciones en contra de los aforados constitucionales, los dirigentes políticos y los particulares que fueron mencionados por la excongresista en sus declaraciones ante las autoridades y medios de comunicación. Merlano salpica ahora al presidente de la República, Iván Duque; al expresidente Juan Manuel Santos; al también ex primer mandatario Álvaro Uribe Vélez, y más.
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SEMANA tuvo acceso, en primicia, a la denuncia que presentó Aida Merlano ante la Fiscalía General de la Nación en la que revela nuevos detalles del entramado de corrupción conocido como Casablanca.
La denuncia se da por los posibles delitos de fuga de presos, secuestro agravado, tentativa de homicidio, fraude procesal, soborno en actuación penal, acceso carnal violento agravado y más.
La denuncia señala, en primer lugar, que “durante la detención en el establecimiento carcelario El Buen Pastor Aida Merlano recibió reiteradas visitas de individuos que se identificaban como abogados y quienes en cada reunión le insistían a Merlano en no realizar manifestaciones sobre la participación de los señores Alejandro Char, Fuad Char y Julio Gerlein en los actos investigados, es decir, por delitos relacionados con actos electorales”.
Merlano rindió dos declaraciones ante las autoridades (el 4 de marzo de 2020 y el 31 de enero de 2022), así como una entrevista con la directora de SEMANA, Vicky Dávila, el 17 de febrero de 2020, en las cuales mencionó la participación del clan Char en la compra de votos y en el plan de fuga que se llevó a cabo el primero de octubre de 2019 mientras asistía a una cita odontológica en el norte de Bogotá.
Relata la denuncia que a finales del año pasado, cuando Merlano tenía cita para hablar en la Corte, ella recibió la llamada de un individuo no identificado que le informó que al lugar de residencia de sus hijos estaban llegando algunas personas y que “si realizaba manifestaciones en contra de la familia Char, las consecuencias recaerían sobre sus hijos y su señor padre. En palabras textuales le manifestó: ‘Si usted quiere a su familia, quédese con la boca callada, que con la boca callada se ve más bonita’”.
La denuncia también relata: “Al momento en que la señora Aida Merlano se encuentra con el Magistrado Investigador, denota que hace presencia también el abogado del señor Arturo Char identificado como el doctor Sergio Cadena, quien previamente había asistido al establecimiento carcelario El Buen Pastor para amenazar a la señora Merlano”.
Y agrega: “Cabe aclarar que dicha amenaza se había efectuado por parte del abogado Sergio Cadena meses atrás, cuando la señora Aida Merlano había realizado manifestaciones en relación al interés que le asistía de comunicar a la justicia todo el aparato criminal que se presentaba en relación con delitos electorales en la zona caribe del territorio nacional, liderados por el clan Char y otros políticos de la zona. Ante dichas amenazas, la señora Aida Merlano respecto los cuestionamientos realizados por el H. Magistrado Instructor en relación con los autores y participes del delito investigado, decidió omitir a los miembros de la familia Char y entidades financieras como Serfinanza cuyas actividades se relacionan intrínsecamente con delitos electorales”.
La denuncia también dice que Alejandro Char y Fuad Char buscaban “obtener el fin perseguido relativo al homicidio de la señora Aida Merlano, plan criminal que se estructuraba mediante una supuesta fuga a favor de la mentada y con ello, después de mantenerla secuestrada por un tiempo prolongado, asesinarla y mostrar ante la vista pública que la misma había huido al isla de Barbados, lo último, mediante la compra de tiquetes por parte de la familia Char”.