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¿Qué hacer en el Valle del Dordoña? Conozca las cinco mejores actividades para hacer en este mágico destino francés
Este lugar cuenta con más de 100 castillos por descubrir entre pueblos llenos de encanto.
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Dordoña o Dordogne en francés, es un departamento de Francia ubicado en el suroeste del país, considerado como un entorno excepcional y fascinante, ofreciendo desde bosques profundos hasta acantilados escarpados y aguas cristalinas, declarado Reserva Mundial de la Biosfera por la UNESCO en 2012.
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Se trata del único río de Francia que cuenta con esta distinción desde su nacimiento en el Puy de Sancy, en Auvernia, hasta su desembocadura en Gironda, que está lleno de espacios naturales de gran riqueza que requieren protección, siendo la reserva más grande del país y una de las más grandes de Europa, destaca el portal Las Caux -Dordogne.
Como reserva de biosfera, este lugar alberga ecosistemas terrestres y marinos en el que se implementan soluciones enfocadas en la conservación de la biodiversidad y el uso sostenible, por lo que conocerlo también representa una aventura llena de aprendizaje y reconexión con la tierra, su fauna y flora en una amplia diversidad de especies animales y vegetales.
Imprescindibles para visitar en el Valle de Dordoña
De acuerdo con la página oficial de la Agencia Nacional del Turismo en Francia, algunas de las visitas ineludibles para hacer en este destino son:
El Castillo de Beynac
Una emblemática construcción medieval en Dordoña que se mantiene intacta pese al paso del tiempo. Este castillo es uno de los más famosos de la antigua provincia Périgord, edificado en el siglo XII por los barones de Beynac.
Visitar este castillo es sumergirse en un viaje a través de la historia de Francia justo en la Edad Media. Durante su recorrido los turistas pueden descubrir varios rincones interesantes como la sala de los guardias contigua a la torre del homenaje, la Sala de los Estados del Périgord, que servía de sala de reunión a las baronías, entre otros.
La Bastida de Monpazier
Este lugar se clasifica como “uno de los pueblos más bellos de Francia”, situado entre Sarlat y Bergerac. Se destaca como un “Gran Sitio Nacional” por sus numerosos tesoros, entre ellos la Bastide de Monpazier (siglo XIII), auténtica joya de la arquitectura medieval, modelo entre las 300 bastidas del suroeste.
Además, se ha convertido en la Ciudad de las Artes y los Oficios, con más de 22 artistas y artesanos que trabajan en talleres abiertos al público (la mayoría durante todo el año), lo que lo convierte en un destino ideal para adquirir nuevos conocimientos.
El centro de la ciudad de Sarlat
Esta ciudad medieval se encuentra en la región de Nouvelle-Aquitaine del departamento de Dordoña. Es una de las ciudades más bellas de Francia, capital del Périgord Negro, perfecta para los amantes de la historia.
Sarlat ha conservado el color de sus calles y la belleza de sus monumentos. De hecho, la ciudad ostenta el récord del mayor número de monumentos históricos catalogados, con 65 monumentos y edificios protegidos.
La Cueva de Padirac
Es la cueva más famosa de Europa, considerada como una de las mayores curiosidades geológicas de Francia, señala la página oficial de la Agencia Nacional del Turismo del país.
Para visitarla la reserva en línea es la única forma de acceder al recinto, por lo que se recomienda planificar todo con antelación buscando nuestros siguiendo su mapa interactivo.
Las actividades ineludibles en el Valle de Dordoña
Aunque hay otros sitios imperdibles para visitar como el claustro de Cadouin o el Castillo de Hautefort, en el Valle de Dordoña también hay espacio para refrescarse en los ríos Dordoña y Vézère, hacer senderismo o dar un paseo en bicicleta.
Quienes buscan descansar pueden hacerlo en sus hermosas playas de arena, donde incluso es posible organizar picnics familiares.