Se empiezan a conocer detalles acerca del ataque a el Capitolio en Washington del pasado 6 de enero
En total, son ya cinco personas las que han sido llevadas a prisión por su participación en el asalto al Capitolio de un total de 17 que ya han recibido algún tipo de pena. | Foto: Getty Images

MUNDO

Condenan a más de tres años de cárcel a hombre que agredió a un policía en el ataque al Capitolio

Luego de su paso por la cárcel, el hombre estará bajo vigilancia durante 36 meses más, debido a sus antecedentes penales.

10 de noviembre de 2021

Scott Fairlamb, uno de los alborotadores que asaltó el Capitolio en Washington el pasado 6 de enero, ha sido condenado a 41 meses de prisión por agredir a uno de los policías que acudió a contener la turba que, espoleada por el expresidente Donald Trump, pretendía detener el recuento electoral de las presidenciales.

Dueño de un gimnasio en Nueva Jersey y antiguo luchador de artes marciales mixtas, Fairlamb se declaró este miércoles culpable de los cargos de atentado contra la autoridad y obstrucción de un proceso oficial, convirtiéndose así en el primero de los sediciosos del Capitolio en ser condenado por agredir a un policía.

“Lamento de veras mis acciones de ese día. No tengo nada más que remordimientos”, aseguró Fairlamb ante el tribunal antes de implorar al juez, Royce Lamberth, “algo de misericordia”, cuenta la cadena CNN.

Antes de dictar sentencia, el juez aplaudió la decisión de Fairlamb de declararse culpable, ya que de ir a juicio –vaticinó– “no habría ningún jurado que pudiera haberle absuelto”. Al mismo tiempo, le recalcó “la suerte” que tuvo de no haber provocado más daño al policía que agredió, pues hay otros acusados en situaciones similares que “pasarán mucho más” tiempo en prisión.

Los fiscales habían solicitado 44 meses de prisión para Fairlamb, quien tras pasar por la cárcel estará bajo vigilancia durante 36 meses más, debido a sus antecedentes penales, así como por la violación de espacios restringidos y una serie de amenazas sexistas y racistas que días después vertió sobre la congresista demócrata Cori Bush.

Se espera que esta condena marque un precedente para el resto de acusados que están a la espera de sentencia, después de que la mayoría de los señalados por participar en aquellos disturbios hayan sido sancionados por delitos no violentos, librándose así de entrar en prisión.

Hasta el momento, la pena de cárcel más dura había recaído sobre Paul Allard Hodgkins, quien tras declararse culpable en julio fue condenado a ocho meses de prisión por un cargo de obstrucción de un procedimiento oficial, en este caso la sesión para ratificar la victoria en las elecciones del presidente Joe Biden, que puede acarrear una sentencia máxima de 20 años de prisión.

En total, son ya cinco las personas que han sido llevadas a prisión por su participación en el asalto al Capitolio de un total de 17 que ya recibieron algún tipo de pena. Todas ellas forman parte de los más de 630 alborotadores señalados por los hechos de aquel día y que están a la espera de sus sentencias.

La comisión de la Cámara de Representantes que estudia el asalto al Capitolio emitió seis citaciones para otros colaboradores del expresidente Donald Trump, incluidos responsables de la campaña electoral de Trump de 2020 y el abogado responsable de la estrategia de Trump, para intentar anular el resultado de las elecciones presidenciales de noviembre de 2020, John Eastman.

Estas citaciones incluyen, además, a Bill Stepien, director de la campaña electoral de Trump de 2020; Jason Miller, uno de los altos cargos de la campaña, y Angela McCallum, ayudante de Trump durante la campaña electoral.

De igual manera, ha sido citado Michael Flynn, asesor de Seguridad Nacional con Trump y quien, según la comisión de investigación, participó en una reunión en la Casa Blanca en diciembre en la que los participantes abordaron la posible declaración de la emergencia nacional para incautarse de máquinas de votación. Igualmente, habría sugerido imponer la ley marcial tras las elecciones.

Estas citaciones apuntan a una estrategia forjada por el entorno de Trump para cuestionar el resultado de las elecciones en los frentes judicial y legislativo a nivel estatal y federal para difundir las informaciones sobre un supuesto fraude.

*Con información de Europa Press.